DELINCUENCIA
Desgarrador testimonio de la familia de Juan Sebastián Martínez que fue asesinado por robarle un celular
El joven recibió un disparo en el oído que le perforó dos arterias y le produjo un derrame cerebral. La familia denunció negligencia por parte del hospital.
Juan Sebastián Martínez era un joven residente del municipio de El Rosal, en el departamento de Cundinamarca, que fue asesinado el pasado 18 de abril en medio de un robo.
De acuerdo con las declaraciones entregadas por su familia al diario El Tiempo, hacia las 6:40 p.m. de ese día el joven salió de su casa para encontrarse con una amiga. Una vez allí, y mientras esperaba sentado en un andén, dos hombres a bordo de una motocicleta lo interceptaron para robarle su celular.
Sin embargo, de acuerdo con la familia, además de robarle, los delincuentes le dispararon en el lado izquierdo del oído. Tras los disparos, los vecinos del lugar salieron para ayudarlo y las autoridades arribaron al lugar en menos de cinco minutos.
El joven fue llevado al centro de salud del pueblo, pero debió ser trasladado al hospital San Rafael, en Facatativá. De acuerdo con su hermana, en la ambulancia, Martínez estaba consciente y tenían esperanzas de que todo saliera bien.
Sin embargo, una vez arribaron al hospital la atención no fue inmediata y solamente 24 horas después los médicos se dieron cuenta de que el joven no tenía signos vitales y un médico cirujano para atenderlo “de afán”.
Martínez fue intubado y lo ingresaron a cirugía. Según su mamá, el disparo le reventó las arterias, dañó varios tejidos y le produjo un derrame cerebral. Luego, los médicos se comunicaron con ella y le dijeron que tenía muerte cerebral y, de hecho, le dijeron que donara sus órganos, a pesar de que el joven no había fallecido aún.
La familia visitó al joven el 25 de abril y, según ellos, sus órganos estaban respondiendo por lo que guardaban la esperanza de que mejorara, sin embargo, la mañana del 26 de abril les informaron que había muerto.
Los familiares le dijeron a El Tiempo que no recibieron un buen trato por parte del hospital. “Los médicos indolentes ni siquiera respondían con humanidad cuando uno les preguntaba qué había pasado. Una amiga de la familia lo hizo, y le respondieron: ‘¿Qué le puedo decir?, lo mismo que ya saben’“.
Además, afirman que la Alcaldía de su municipio no se ha pronunciado con respecto al caso del joven Martínez, no hay una investigación clara y, por supuesto, tampoco se ha capturado a los responsables del crimen.
Los habitantes de El Rosal han manifestado en varias ocasiones que la inseguridad aumentó en los últimos meses en el municipio y sienten que no han sido atendidas sus peticiones por parte del gobierno local.
Además del caso de Juan Sebastián, por el cual realizaron una ‘velatón’ ,también se conoció el de una joven que hace unas semanas, en un intento de robo, fue atacada y golpeada sin que las autoridades reaccionaran.
Según los habitantes del municipio, en los últimos meses este se llenó de gente de otros lugares “que piensan que pueden hacer lo que quieran” y le hicieron un llamado al gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, para que preste más atención a lo que está pasando en el municipio.
De acuerdo con los residentes de El Rosal, hay un sector específico llamado La Alejandría, donde la delincuencia ha tenido un aumento exponencial y ya nadie puede pasar caminando con tranquilidad por allí por el temor de ser atracado.
La familia de Juan Sebastián pide que no se olviden del municipio y de la seguridad. Hoy fue mi hermano, mañana puede ser el señor de la tienda, una mujer, un adulto mayor. Este es un dolor que uno no le desea a nadie. No es porque sea mi hermano, pero él era un angelito, un buen ser humano”, dijo su hermana.