CONFLICTO

Más de 3.500 desplazados en el Pacífico en dos meses

"Alta preocupación" expuso este miércoles la ACNUR por los enfrentamientos que se están presentando en las zonas que abandonaron las FARC y que ahora se pelean otros grupos armados.

8 de marzo de 2017
| Foto: Archivo Particular

Con más de siete millones de personas desplazadas durante todo lo que lleva el conflicto interno, Colombia es uno de los países que más desarraigados tiene en el mundo, y la situación no da muestra de querer cambiar con el fin de las confrontaciones armadas con las FARC.

"Alrededor de 900 familias han sido víctimas de desplazamientos masivos. En el año 2016 se desplazaron 11.363 personas en esta región. En lo que va corrido del año, se han desplazado cerca de 3.549 más. Resultan especialmente afectadas las mujeres, los niños, niñas y adolescentes", informó la agencia de la ONU para los refugiados (ACNUR).

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Su alerta se suma a la advertencia que este martes hizo la Corte Constitucional sobre el aumento de desplazamiento en los territorios que históricamente ocuparon las FARC. Tras una visita al bajo San Juan, el alto tribunal informó sobre la emergencia que se vive en la región donde los riesgos de esta práctica, "se agudizaron como consecuencia de los enfrentamientos entre distintos grupos armados ilegales".

En ese sentido, las comunidades afectadas comprenden Las Delicias, Santa María de Pángala y Pichimá Quebrada (asentadas en el Distrito de Buenaventura); Pangalita, Barrios Unidos y Las Delicias (ubicadas en Munguido); Santa María de Pángala, Nuevo Haití y Estrella Pángala (desplazadas hacía Unión Wainia); Bella Victoria (encontradas en Las Peñitas); Las Brisas (asentadas en Copomá y al interior de la Selva); Pichimá Quebrada (ubicadas en Docordó), y Unión San Juan y Puerto Guadualito (desplazadas hacía Puerto Pizario). 

Y es que según el comunicado de la ACNUR, los principales afectados han sido pueblos indígenas y afrodescendientes que habitan distintas zonas del Pacífico. "Durante los últimos años, la región se ha mantenido como una de las más afectadas" y pese a que el Gobierno ha sido insistente en su política de llegar a ocupar y trabajar en esos espacios de los que salieron las FARC, los hechos indican otra cosa.

Incluso, este fin de semana la Defensoría del Pueblo denunció precisamente el desplazamiento de unas 300 personas en Alto Baudó por combates entre el ELN y una banda criminal de origen paramilitar. La situación en esa zona es particularmente complicada y los "recientes combates son una muestra de las necesidades de protección que enfrentan estas comunidades".

"En el actual contexto de posacuerdo, las zonas tradicionalmente más afectadas por el conflicto armado presentan especiales riesgos por la disputa en el control que otros actores armados ilegales están ejerciendo sobre los territorios. ACNUR hace un especial llamado de atención a la necesidad de proteger a la población civil en este contexto y asegurar que estén dadas las condiciones de seguridad, voluntariedad y dignidad antes de adelantar eventuales procesos de retorno de las comunidades desplazadas", apunta el informe.