JUSTICIA

"Se están robando todo": Contralor Maya sobre redes de corrupción en Colombia

Según la Contraloría, el detrimento por corrupción en los últimos años podría superar los 14 billones de pesos. La entidad habló de empresas criminales en la salud y en la educación.

14 de agosto de 2018
| Foto: León Dario Peláez / SEMANA

La rendición de cuentas del contralor Edgardo Maya Villazón, quien está próximo a dejar su cargo, terminó siendo una radiografía de la magnitud catastrófica de la corrupción en el país.

Durante los últimos cuatro años, el ente de control dio cuenta del mayor desfalco a las arcas nacionales en toda la hitoria -Reficar- y de otros casos de robos descarados a la alimentación de los niños, a la salud de los enfermos más graves. Y hasta el caso de Ibagué, una ciudad que tumbó sus escenarios deportivos para reemplazarlos por otros que nunca se construyeron.

"Se están robando todo", dijo Maya Villazón. Las cifras de la Contraloría muestran que las 2060 auditorías adelantadas durante el último cuatrenio produjeron 36.800 hallazgos de presuntas irregularidades administrativas, cientos de ellos de carácter penal, y sus pérdidas pueden tasarse alrededor de 14 billones de pesos.

El caso que habría cargado un mayor detrimento a las cuentas públicas es el de la modernización de Reficar, en Cartagena, una obra que terminó costando más de 8.000 millones de dólares y que habría presentado una pérdida de 2.400 millones de dólares, según las investigaciones del ente.

"Estamos viviendo uno de esos momentos en la historia del país en el que tenemos que tomar medidas drásticas para acabar con la corrupción", dijo Maya, quien calificó el desfalco al Plan de Alimentación Escolar (PAE), como uno de los escándalos más indignantes conocidos durante su gestión.

En 17 procesos por irregularidades en este programa, dirigido a financiar la alimentación de los más pequeños y vulnerables, el ente detectó pérdidas que pueden rondar los 85.000 millones de pesos. Y casos en los que los niños eran alimentados con productos en mal estado, contaminados y cobrados a precios inflados.

Por este caso hay funcionario regionales de mayor nivel bajo la lupa. Cinco gobernadores, 7 exgobernadores, ocho alcaldes y 45 exalcaldes están siendo investigados.

El robo de la salud evidenció una arista preocupante: la creación de empresas criminales sistemáticas que se replicaban en una y otra área. Fue el caso de los carteles de la hemofilia y de los enfermos mentales, sobre todo en Córdoba. Allí se conformaron redes que involucrarían tanto a los prestadores de salud como a los dirigentes regionales. Esas mismas creaban pacientes falsos con los que cobraban el dinero que el Estado dirige para atender a los enfermos más graves.

Uno de los casos más indignantes fue el de los Juegos Nacionales de Ibagué. La capital tolimense se preparaba para recibir las justas deportivas y, por lo mismo, demolió sus escenarios deportivos funcionales desde hace décadas, para reemplazarlos por obras nuevas. Sin embargo, estas no se completaron y la ciudad quedó desprovista de escenarios. El estadio de atletismo, el complejoacuático, la cancha de sóftbol, el patinódromo, la pista de BMX y hasta la cancha de tejo, todo quedó a medias.

La lista de presuntos hallazgos de alto impacto fiscal se extiende: el crédito del Banco Agrario a Navelena, los recursos de la salud gestionados por Saludcoop o Medimás. Pero no solo la pérdida de recursos públicos preocupa a la Contraloría, sino también la falta de gestión de los mismos. En el caso de las regalías, donde se calcula un probable detrimento de 800.000 millones de pesos, habrían alrededor de 13 billones de pesos represados, sin gestionar, pese a que las regiones necesitan las obras que podrían financiar.

"Si nosotros no destruimos la corrupción, la corrupción destruye el Estado", dijo Maya, cuyo reemplazo será elegido el próximo lunes en el Congreso.

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