Director de la Policía dijo que lo más probable es que Sara Sofía Galván no haya salido de Bogotá

Después de que se conociera la posibilidad de que la niña Sara Sofía Galván, desaparecida desde hace más de un mes, estuviera en Bucaramanga, el director de la Policía Nacional, general Jorge Luis Vargas, descartó esta posibilidad y aseguró que lo más probable es que la menor no haya salido de Bogotá.

El uniformado explicó desde Medellín que hay “unos avances importantes en la investigación”; sin embargo, no dio detalles de la misma, por la reserva de los datos.

“No podemos dar a conocer sobre esos avances, precisamente por lo que significa en la reserva de la misma investigación. Son avances frente a los elementos probatorios y la evidencia física”, indicó el director de la Policía.

En la declaración, el general Vargas explicó que se ha descartado que la niña esté en otros puntos del país. “Hemos estado en contacto con el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, han enviado videos mostrando a posibles niñas que fueran Sara Sofía y lo hemos descartado de manera presencial con unidades investigativas de la Policía Nacional”, dijo el general.

“El deseo de todos los colombianos es que Sara Sofía este con vida”, agregó el funcionario, quien destacó que la investigación se está haciendo con la colaboración de varias entidades del Estado, como la Fiscalía General de la Nación, el Instituto de Bienestar Familiar o Migración Colombia.

En este proceso, se han realizado entrevistas y se han recogido testimonios que han permitido adelantar la investigación, aunque aún no se pueden compartir.

Madre de la menor aseguró que la niña está muerta

Este jueves se conocieron detalles del interrogatorio que adelantó la Fiscalía a Carolina Galván, la mamá de Sara Sofía, quien confesó que la niña está muerta y narró cómo sucedieron los hechos.

En la diligencia judicial, de acuerdo con Noticias RCN, la mujer empezó su relato contando que el pasado 27 de enero salió a las 11 de la mañana para “conseguir plata como trabajadora sexual” y que, cuando regresó a la casa, encontró a la niña dormida.

Según Carolina Galván, la menor no despertaba ni daba señales de vida: “Me acuesto otra vez en la cama con el celular y la niña seguía dormida. A las 6 de la tarde, Nilson se para a mirar a la niña, cuando él manda a los niños para la sala y me llama: ‘Caro, venga’, cuando yo veo a la niña botando espuma por la nariz, yo me ataqué a llorar y llorar y empezaba a mover la niña para que se despertara y ya no despertó”.

En su relato ante la Fiscalía, no se refirió a la intensión de trasladar a Sara Sofía a un hospital o de reportar el hecho a las autoridades para que recibiera atención médica después de ver el estado de salud de la menor de dos años.

“Nilson me abrazaba y me decía que tranquila, que me calmara y de todas formas yo seguí llorando. Y la dejamos como media hora ahí y al rato Nilson coge una cobija azul oscura, no era de adulto, era una cobija mediana, era de la cama del niño. Nilson envolvió a la niña toda, de pies a cabeza, y la metió en un costal blanco de fibra blanco, son de tiritas delgaditas y la dejó en la sala. Ahí dejó el costal con Sarita”, señaló.

La madre de la menor dijo que el cuerpo de Sara Sofía estuvo en la casa desde el miércoles 27 de enero hasta el 29 de ese mes.

Galván aseguró en su declaración ante el ente acusador que su expareja, Nilson Díaz, lanzó ese viernes 29 de enero el cuerpo de la menor a un caño o a un río, pero advirtió que desconoce la ubicación.