Bogotá
Distrito responde a Personería y señala que variación de precios ha impedido adjudicar y suministrar pollo en los jardines
Aun así, la Secretaría de Integración Social señala que el suministro de proteína siempre ha estado garantizado en los jardines infantiles.
Luego de que la Personería de Bogotá haya revelado fallas en la alimentación de 270 jardines infantiles que están a cargo de la Secretaría Distrital de Integración Social en la capital del país, toda vez que en lo corrido de este 2022 se evidenció desabastecimiento en el suministro de pollo de manera sistemática, el Distrito le respondió al Ministerio Público.
De acuerdo con la Secretaría de Integración Social, la variación de precios ha impedido que se adjudique y se suministre pollo en los jardines infantiles, pero subrayó que siempre ha estado garantizado el suministro de proteína animal.
“La secretaría garantiza en sus ciclos de menús el suministro de proteína de origen animal y vegetal, entre ellas la carne de res, cerdo, huevo, atún, pescado u otro como los huevos”, dijo en un principio, Ivon Carolina Camargo, subdirectora de nutrición de la Secretaría Distrital de Integración Social.
De manera paralela, de acuerdo con la funcionaria, “se ha publicado cinco procesos en la Bolsa Mercantil para la adjudicación de pollo, pero cuatro de ellos se han declarado desiertos por factores externos a la entidad que tiene que ver con la fluctuación de los precios y la falta de oferentes”.
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“En esta quinta oportunidad esperamos que haya adjudicación de este proveedor para de esta manera garantizar la variedad en las preparaciones de la dieta y continuar con el aporte nutricional establecido para todos los grupos de edad en todas las minutas de alimentos”, agregó Camargo.
La Personería de Bogotá advirtió que de acuerdo con los menús diseñados por la Secretaría de Integración Social, al menos una vez a la semana se debe preparar y suministrar en los jardines un almuerzo a base de proteína de pollo. Ante la falta de este alimento, durante más de 10 meses, las recetas tuvieron que ser modificadas para remplazar este ingrediente. De manera tal que 28.400 niños y niñas menores de cinco años en la ciudad se vieron perjudicados.
Sin embargo, no fue claro para el organismo de control, cuál fue la estrategia desarrollada por la entidad para garantizar que esta falencia no afectara la nutrición de los niños y niñas, debido a que se identificó que los jardines infantiles realizaron estos cambios de ingredientes sin aplicar un lineamiento estandarizado. Tampoco son claras las razones que justifique que, ante la falta definitiva de pollo, no fueran modificados formalmente los menús en el transcurso del año.
Desde el primer semestre del año, el órgano de control solicitó corregir las fallas de planeación en la contratación de los proveedores de alimentos, para que la prestación del servicio en los jardines operados por la Secretaría de Integración Social no se viera afectada o interrumpida, ni vulnerara el desarrollo integral de los infantes.
En el más reciente ejercicio de control realizado por la Personería en el mes de octubre, se evidenció que durante todo el año 2022, la Secretaría no ha realizado la contratación para el suministro de pollo.
Aunque en lo corrido del segundo semestre de este año se identificaron dos intentos para adelantar la contratación de un nuevo operador de suministro de pollo, uno de los cuales se declaró desierto y el otro se encuentra actualmente en curso de adjudicación, no es justificable para este órgano de control que la Dirección de Nutrición y Abastecimiento de dicha entidad no demostrara gestiones tendientes a culminar satisfactoriamente este proceso y garantizar el suministro de pollo a lo largo del año.
Teniendo en cuenta que en este 2022 los jardines infantiles culminarán el periodo escolar el próximo 2 de diciembre, también llama la atención que la Secretaría de Integración Social esté pretendiendo adjudicar el contrato para el suministro de pollo esta semana, a menos de 10 días de que los niños y niñas salgan a vacaciones, lo que confirma que los jardines infantiles no tuvieron pollo durante todo el año.
“No es justificable, ni entendible para este órgano de control, el por qué se iniciaron las acciones contractuales a menos de días de finalizarse el periodo escolar y estando próximo al disfrute de las vacaciones de fin de año de los menores”, aseguró Sandra Elizabeth García, personera delegada para la coordinación de prevención y control a la Función Pública.
La Personería de Bogotá es enfática en señalar que han sido recurrentes las fallas de la Secretaría de Integración Social en la planeación y contratación de los procesos de suministro de alimentos, toda vez que la falta de pollo ha afectado, también, a otros servicios operados por la entidad, dirigidos a la atención de personas mayores, en condición de discapacidad, entre otros.
Para el caso de jardines infantiles, cumplir con la continuidad y calidad del servicio de alimentación ofrecido a niños y niñas menores de cinco años, es una obligación, pues la atención que se brinda en estos espacios está pensada para ofrecerse de manera integral, al ser esenciales para el desarrollo de la primera infancia.