¿Duque, el proteccionista de los páramos?, en Santurbán lo dudan

La defensa de Santurbán es una bandera ambiental del país que también tiene fuerza internacional. Con su discurso ante la Asamblea General de la ONU, el presidente Iván Duque le dio vuelo internacional a la protección de los páramos, posó como un ambientalista preocupado por estos ecosistemas, sin embargo en Colombia lo que dejó fue un sinsabor, pues continúa sin respaldar el pedido ciudadano de parar la licencia ambiental del proyecto minero de la multinacional Minesa, en los santanderes.

“Los páramos son verdaderas fábricas de agua potable y el lugar de nacimiento de las cuencas hídricas, que irriga a gran parte de nuestro territorio. Por eso, la convocatoria también se extiende a que las naciones del mundo aporten recursos y que entendamos que la protección de los páramos es un deber universal”, dijo Duque ante la ONU para pedir apoyo.

Para el Comité para la Defensa del Agua y el Páramo de Santurbán, las palabras del presidente ante la ONU sonaron incoherentes, sobre todo porque, en caso de que se apruebe la licencia ambiental para el proyecto de Minesa, se abriría “una puerta a la megaminería en otros páramos del país”, esos ecosistemas que, según Duque, merecen especial protección.

“Vemos una cara de Duque nueva, una que pone a nivel internacional y que defiende los páramos, pero acá en el país que gobierna le abre la puerta a la megaminería en las altas montañas, como la de Santurbán. No vemos coherencia entre lo que dice y las políticas. El martes, mientras Duque decía ante la ONU que protegía los páramos, en el mismo momento estaba su ministro de Minas, Diego Mesa, diciendo en un debate del Senado que el gobierno de Iván Duque apoyaba el proyecto Minesa”, aseguró a SEMANA Mayerli López, vocera del comité de defensa del páramo.

Y es que el pasado martes en la Comisión Quinta del Senado, el senador Jorge Enrique Robledo citó a un debate de control político sobre los proyectos mineros de Jericó y Santurbán, que cuentan con amplia oposición en las comunidades afectadas. Allí, el ministro de Minas, Diego Mesa, defendió los proyectos mineros porque serán fundamentales para “la reactivación económica” tras la pandemia.

“De estos proyectos, de los cuales hay tres en el departamento de Antioquia y uno en Santander, ahora que necesitamos la reactivación sostenible, hay un potencial de inversión de más de 4.000 millones de dólares, con 12.000 empleos directos y más de 500 millones de dólares por exportación. Por eso, nosotros pensando en la coherencia de reactivar esta economía, creemos que a este tipo de proyectos, si cumplen con todos los estándares ambientales y técnicos, no les podemos dar la espalda”, aseguró el jefe de la cartera.

Para el ministro de Minas no existe tal incoherencia del Gobierno Nacional, porque según dijo en la Comisión Quinta, están siguiendo el principio de “producir conservando y conservar produciendo” —todo un juego de lenguaje que los opositores critican, pues les parece una contradicción y una manera de salir rápido de la discusión—, que se ajustan a las políticas del gobierno.

Sin embargo, para Carlos Sotomonte, consejero para la Defensa del Páramo de Santurbán de la Alcaldía de Bucaramanga, el presidente Iván Duque tiene un discurso hacia afuera, con la comunidad internacional, y otro en el país. “El alcalde Juan Carlos Cárdenas se lo ha dicho varias veces al presidente y se lo manifestó en la Casa de Nariño, que en muchos temas podrían ponerse de acuerdo, pero el tema del páramo de Santurbán es un inamovible”, aseguró a SEMANA Sotomonte, diciendo que para el alcalde no está en negociación la explotación minera del páramo.

El alcalde Cárdenas reafirmó su postura de defensa del páramo —lo cual considera un mandato de sus electores— tras la intervención del presidente en la ONU. Aprovechó para pedirle que impidiera que le dieran la licencia ambiental a Minesa. “Impida que se haga y nieguen la licencia ambiental a @Minesa_Col! Eso es lo que exigen los colombianos”, escribió en su Twitter.

Con respecto al discurso ante la ONU, Sotomonte explicó que el presidente pretende abonar terreno ante la comunidad internacional en un tema de interés mundial: “A Duque lo que le está preocupando es que las organizaciones internacionales y los países que hacen parte de las Naciones Unidas critiquen esta actitud, porque el tema de Santurbán no solo es de país sino tiene que ver mucho con el cambio climático, y en ese sentido es una discusión de orden global”, dijo.

La defensa del páramo de Santurbán tuvo un respaldo político y jurídico después de la declaración del presidente; numerosas organizaciones ambientalistas, entre ellas Greenpeace, así como de las Asambleas de Santander y los concejos municipales de Cúcuta y Bucaramanga levantaron su voz. El respaldo lo hicieron efectivo con un memorial de apoyo a la solicitud de medidas cautelares ante el Tribunal Administrativo de Santander, en el marco de una acción popular que interpuso el Comité de la Defensa de Santurbán para que se suspenda el proceso de licenciamiento.

Un dato que no es menor: desde Presidencia se habla de la protección de estos ecosistemas porque aseguran que la explotación de Minesa será a un kilómetro del páramo de Santurbán y que no lo afectará, un argumento espúreo.