En las nuevas relaciones con Estados Unidos, el presidente Iván Duque, personalmente, jugará un papel clave dado su conocimiento de ese país.

Nación

Duque pidió compromiso para la protección de la Amazonia en el Foro Económico Mundial

El Gobierno insistió en que los cultivos ilícitos de coca y la minería ilegal son las principales amenazas del Amazonas.

27 de enero de 2021

El presidente Iván Duque, en su intervención en el Foro Económico Mundial, elevó un llamado para que el sector privado apriete el acelerador con su compromiso para la protección de la Amazonia, al resaltar la importancia del Pacto de Leticia que se suscribió con varios mandatarios de la región para proteger e impulsar el desarrollo sostenible de esa zona.

Además, el presidente Duque alertó que la principal amenaza que enfrenta la Amazonía es la deforestación, derivada por los cultivos ilícitos, la minería, la industria maderera y la ganadería ilegal.

Así mismo, el mandatario destacó la iniciativa que lanzó el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), denominado Financiamiento de la transición de la Amazonia hacia una Bioeconomía Sostenible, cuyo programa se anunciará en la ciudad de Barranquilla, durante la Asamblea del BID 2021.

“No solo del sector público sino del privado, no solo para los gobiernos locales sino para los centrales, para que esa inversión se pueda conectar con los proyectos que van a proteger la cuenca de la Amazonia”, sostuvo Duque.

Y agregó “el segundo elemento más importante es la necesidad de combinar que las inversiones de las empresas encaminadas a proteger la Amazonia puedan ser valoradas internacionalmente en mercados de CO2 del mundo, sea el mercado de Chicago o el europeo, o si no podemos construir un mercado regional para tal fin”, recalcó.

Sobre la firma que permitió la creación del Pacto de Leticia, aseguró que se trata de una herramienta para acelerar la participación del sector privado, movilizar los contratos de conservación de la naturaleza con las comunidades locales y fortalecerá la forma de relacionar la protección de la biodiversidad con la innovación, con la particularidad de que la iniciativa fue elevada a nivel presidencial por todos los países que conforman la cuenca amazónica.

Vista aerea de Aerial de un campo de minería ilegal ubicado en la Amazonía peruana. AFP/ERNESTO BENAVIDES | Foto: AFP

Con el Pacto de Leticia, se busca incentivar el tener más econegocios y ecoindustrias que puedan utilizar la riqueza de la Amazonia de manera sostenible “para demostrarle al mundo que esos productos son valiosos para la salud por su alto contenido nutritivo”, dijo.

También señaló “tiene el propósito de poder conectar al mundo con los productos de la Amazonia para darles un medio de sustento a las comunidades locales que estén alineadas con la protección y que no se vean tentadas por “actividades ilícitas, como los cultivos ilícitos, minería o ganadería ilegal”.

A renglón seguido, el presidente Duque advirtió que el principal reto que enfrenta la Amazonia es la deforestación, que para su concepto, resulta de los cultivos ilícitos, la minería ilegal, del desarrollo ilegal de industria maderera y también la producción de ganado ilegal.

Hace varias semanas se conoció que la selva amazónica brasileña perdió 842.600 hectáreas como consecuencia de la deforestación, situación que sigue rampante en ese país. Si bien esta cifra es un 8 % inferior a la registrada en el año inmediatamente anterior, sigue siendo una cifra extremadamente preocupante para los especialistas, que cuestionan la política ambiental del presidente Jair Bolsonaro.

Se denunció, que la superficie deforestada es cinco veces superior a la de la ciudad de Sao Paulo, la mayor de América Latina, según los datos divulgados este viernes por el Instituto de Investigaciones Espaciales (INPE), basados en observaciones satelitales.

Así mismo, el dato, equivale a la desaparición de dos canchas de fútbol por minuto. En diciembre, la motosierra acabó con 21.600 hectáreas, frente a 19.000 afectadas en el mismo período de 2019.

Sin embargo, las cifras son aún más alarmantes, pues revelan que entre agosto de 2019 y julio de 2020 la deforestación amazónica llegó a 1,1 millones de hectáreas, lo que representa un alza de 9,5% respecto al año de referencia precedente.