Dura multa a Ulahy Beltrán por corrupción el Hospital Universitario de Barranquilla. El escándalo explotó cuando era Supersalud

Cinco meses después de salir del cargo de Superintedente de Salud en medio de un escándalo de contratación en el Hospital Universitario CARI en Barranquilla, Atlántico, del que fue gerente, a Ulahy Beltrán el mismo caso le vuelve a pasar factura y esta vez es una dura multa que le impuso la Procuraduría General de la Nación, en la que deberá pagar al tesoro nacional su sueldo mensual devengado para la época de los hechos por ocho meses, lo que corresponde a 101.852.864 millones de pesos.

“El ente disciplinario confirmó que el servidor público adelantó el proceso de contratación y celebró de manera directa el negocio jurídico 690 de 2019 con el consorcio gestor hospitalario del caribe por aproximadamente $12 mil millones, para realizar los procesos asistenciales, logísticos, administrativos, financieros y complementarios de los servicios de alta complejidad de la entidad”, informó la Procuraduría en un fallo de primera instancia.

El ente de control ratificó que el contratista suscribió el bilateral sin contar con la autorización previa de la junta directiva del centro hospitalario, a pesar de que, es un requisito ineludible y establecido en el estatuto de contratación.

Finalmente, la Procuraduría delegada de Juzgamiento 2 confirmó la calificación de la falta formulada como grave, a título de culpa grave; por lo que, deberá pagar al tesoro nacional su sueldo mensual devengado para la época de los hechos por ocho meses, lo que corresponde a $101.852.864 millones.

Beltrán, médico cirujano, especialista en Gerencia de Servicios de Salud y con estudios en seguridad social, asumió el cargo en agosto del año pasado, cuando todavía el Ministerio de Salud era liderado por Carolina Corcho, y se convirtió en una figura clave en la serie de sanciones e investigaciones que enfrentan varias EPS del país por cuenta de miles de quejas de los usuarios en materia de falta de atención y de entrega de medicamentos.

El ente de control señaló en su momento que, “dado que el contrato superaba los 5.000 salarios mínimos legales vigentes para la época de los hechos, el entonces gerente del Hospital Universitario Cari necesitaba autorización de la junta directiva de la referida entidad para iniciar y adelantar el proceso de contratación, según lo establecido en el estatuto de contratación de la ESE. La conducta reprochada fue calificada provisionalmente como grave, a título de culpa grave”, aseguró la entidad.