Entrevista
Eder Parada, socio de concesión de cementerios del Distrito, revela en SEMANA: “La corrupción está en la interventoría”
Eder Parada denuncia que su socio Dairo Mora está detrás del contrato de la interventoría y afirma que es ahí donde está el foco de la corrupción. Señala que hay un contubernio entre Mora y la subdirectora de la Uaesp.
SEMANA: ¿Cómo conoció usted a Dairo Mora?
Eder Parada (E. P.): En el Ministerio del Interior, en el marco de un proceso para aplicar a unos proyectos que tenían que ver con el programa Sacúdete y en ese lapso de tiempo, el señor Mora me manifiesta que podemos hacer una alianza para montar diferentes proyectos.
SEMANA: ¿Cómo surge la unión temporal Jardines de Luz y Paz para administrar los cementerios del Distrito?
E. P.: Dairo Mora me dice que hay una posibilidad de entrar a participar de la licitación y me propone crear la unión temporal. Yo le manifiesto que mi empresa (A&M Grupo Empresarial) no tiene experiencia en el tema de cementerios, pero él me manifestó que hay una empresa de Panamá (Global Fundesco), cuya propietaria es su compañera sentimental, Liliana Mercado Lozano, que sí tenía experiencia en servicios funerarios. La participación mía consistía en un apalancamiento financiero que les faltaba para poder cumplir con los índices que estaban exigiendo en el pliego de condiciones.
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SEMANA: ¿Usted nunca indagó si esa experiencia de Global Fundesco era válida?
E. P.: La verdad, no. Cuando decidimos hacer parte de la unión temporal, Liliana Mercado y Dairo Mora fueron quienes armaron la oferta e hicieron llegar los documentos que acreditaban la experiencia. Nosotros partimos del principio de la buena fe.
SEMANA: La representación legal de la unión temporal había quedado a nombre de Mercado, ¿qué sucedió para que usted decidiera quitarles esta representación?
E. P.: Porque encontramos una serie de irregularidades que se venían presentando en los cementerios Norte y Central, donde el señor Mora tenía absoluto control, irregularidades como profanación de tumbas y comercialización de bóvedas.
SEMANA: ¿Por qué Mercado y Mora tenían el control de los cementerios Norte y Central y usted del Serafín y el Sur?
E. P.: Antes de empezar la operación de los cementerios, empezamos a tener serias diferencias con Dairo Mora, toda vez que él tomó la concesión para pagar favores a gente externa, es decir, empezó a contratar gente, así no cumpliera con los requisitos, y al darme cuenta de estas irregularidades, decidimos dividir la operación de los cementerios.
SEMANA: ¿Se pagaron sobornos para hacerse con el contrato de concesión?
E. P.: No y respecto a eso yo quiero ser muy claro, cuando se habla de coimas, esos comentarios son producto de unos audios que se salieron a la luz pública, pero estos audios se dan con ocasión a la adjudicación del contrato de interventoría y no al contrato de concesión. Dentro de la licitación de la concesión de los cementerios solo hubo dos proponentes y, por ende, dos propuestas, mientras que en el contrato de interventoría, hubo cuatro proponentes. Y en los audios que se hicieron públicos, sale hablando el señor de la Uaesp y Dairo Mora, diciendo que al primer proponente lo eliminan y al segundo y al tercero les van a permitir participar, pero les van a ganar por puntos. Es así como le adjudican el contrato de interventoría al Consorcio San Marcos, que sencillamente es una unión temporal que armó el mismo Dairo Mora para tener el control y manejo absoluto de la concesión y de la interventoría.
SEMANA: Es decir, que usted está señalando a Dairo Mora de estar detrás del contrato de interventoría…
Y resulta que cuando ellos tan solo llevan 20 días ejecutando el contrato de interventoría, nos generan un período de cura tendiente a una sanción, pero esta sanción la promueven en contra de la administración de los cementerios Serafín y Sur y no en contra de los cementerios Norte y Central que estaban a cargo de Mora.
Es así como Carlos Martínez, quien es el abogado de la concesión; Marta Uribe, quien era la contadora; Liliana Mercado y yo fuimos a una reunión a la oficina de Maxitempo con Gloria Pulido. Apenas iniciamos la reunión, yo le pregunto a Pulido por qué la interventoría está motivando esta sanción y ella voltea a mirar a Mercado y le dice: “tú estuviste acá con Dairo la semana pasada y les expliqué cómo íbamos a proyectar ese período de cura, no sé por qué Eder me sale ahora con esta pregunta, si todo lo que nosotros hacemos, Dairo lo autoriza”.
Entonces en ese momento yo ratifico que el consorcio San Marcos no podía tomar ninguna decisión si Mora no se lo autorizaba. Y con esos audios que salieron en noviembre de 2022, reconfirma lo que nosotros veníamos denunciando a la Uaesp desde octubre de 2021 sobre un conflicto de intereses entre el consorcio San Marcos y Jardines de Luz y Paz.
SEMANA: ¿Quién de la Uaesp conoció esa alerta de conflicto de intereses?
E. P.: La subdirectora de Servicios Funerarios y Alumbrado Público, Ingrid Ramírez, quien era la supervisora del contrato. La alerta la hicimos en varias ocasiones, pero nunca fuimos escuchados y a lo último, acudimos al veedor Henry Anaya, para que pidiera explicaciones de qué estaba pasando en la interventoría.
SEMANA: ¿Pero la única alerta que usted tenía era ese encuentro con Pulido?
E. P.: No, también hay una factura que prueba el vínculo entre ellos. En septiembre de 2021, Maxitempo radicó una factura a Jardines de Luz y Paz cobrando unos exámenes médicos y si bien Maxitempo se defendió asegurando que los servicios se prestaron en junio de 2021, cuando el consorcio no se había conformado, eso es falso porque en junio ya estaban en el proceso de entrega de la oferta para que fuera adjudicado el proceso de interventoría. Y desde mayo se sabía que Jardines iba a operar los cementerios.
SEMANA: ¿La subdirectora Ingrid Ramírez respondió a esas alertas?
E. P.: Sí, pero las desestimó. Para mí existía un contubernio entre Ingrid Ramírez, el consorcio San Marcos y Dairo Mora, porque a pesar de que en los medios se hizo pública la alerta de profanación de tumbas en los cementerios que administraba Mora, Ramírez nunca hizo nada. Ella es una de las responsables del desastre del contrato de concesión y, desde que yo la señalé, de que ella hacía parte de un contubernio, empezó a atacar la concesión.
SEMANA: ¿Luz Amanda Camacho estaba al tanto de estas alertas?
E. P.: Las alertas siempre se las manifestábamos a Ramírez, pero supongo que Camacho tenía que estar enterada.
SEMANA: Lo cierto es que la Contraloría advirtió que hay más de $5.700 millones que debían estar en la fiducia y que no aparecen. ¿Dónde está ese dinero?
E. P.: Ese dinero está invertido en la misma operación de los cementerios, toda vez que la Uaesp ha incumplido el contrato y le ha negado a la concesión el derecho a la retribución, obligando a que el concesionario tenga que sacar recursos de su patrimonio para el sostenimiento de la operación; entonces decidimos dejar de enviar todo el dinero a la fiducia y enviarlo a otras cuentas de Jardines de Luz y Paz para poder pagar la operación de los cuatro cementerios que al mes supera los $500 millones.
SEMANA: Pero la Contraloría ya les bloqueó las cuentas…
E. P.: Sí, y eso es una completa arbitrariedad de la Contraloría, que lo único que busca es llevar al límite al concesionario para que no tenga cómo responder y así poder liquidar el contrato, pero la Contraloría está cometiendo un error al no ver dónde está el vicio de ilegalidad y de corrupción, porque aquí la corrupción está es en el contrato de interventoría, que nació de una adjudicación corrupta. Ramírez y Mora son los culpables.