¿El Centro Democrático se está convirtiendo en un ‘patito feo’ para estas elecciones?

La sorpresiva decisión del candidato presidencial del Centro Democrático Óscar Iván Zuluaga de no hacer parte de alguna de las coaliciones que se han integrado, con lo que iría solitario a la primera vuelta, tiene un transfondo que causa preocupación: muchos sectores no quieren tomarse la foto junto al Centro Democrático.

La decisión ha generado temor en muchos uribistas que, con calculadora en mano, no confían en que Zuluaga pueda remontar, solo, en primera vuelta, la votación de las tres coaliciones que definirán sus candidatos presidenciales en la consulta interna de marzo. Los más pesimistas creen que la realidad política no le permitirá llegar a primera vuelta.

No se puede olvidar que, como está demostrado, quienes van a consulta en marzo, antes de primera vuelta, cuentan con la ventaja de ya haberse hecho contar en las urnas, lo que les permite llegar con una mejor perspectiva a la primera vuelta en mayo. De entrada, el candidato del Centro Democrático estará en desventaja.

Zuluaga decidió este sábado no insistir en formar parte de la coalición de centroderecha, Equipo Colombia, luego de recibir desaires de algunos integrantes de esa alianza, que públicamente le han hecho el “feo”.

En su declaración, el candidato uribista lamentó que algunos miembros de Equipo por Colombia hayan hecho “descalificaciones” a su proyecto político.

Se refería a Alejandro Char, Dilian Francisca Toro y Enrique Peñalosa, quienes públicamente rechazaron el ingreso del uribismo a esa coalición.

Desgaste del Gobierno

El rechazo de algunos miembros del Equipo por Colombia para recibir a Zuluaga tiene una de sus razones fundamentales es el desgaste en el que viene el Gobierno del presidente Iván Duque y con el que han tenido que lidiar los aspirantes al Congreso por el Centro Democrático. Cuatro años siendo Gobierno les podrían pasar factura.

Y algunos de los miembros del Equipo por Colombia no estaban dispuestos a salir a la plaza pública y que les cobraran por una administración que es ajena a ellos.

De hecho, hace algunas semanas, el expresidente Álvaro Uribe Vélez aseguró, en entrevista con Vicky Dávila en SEMANA, que los resultados del Gobierno Duque “inhiben” la campaña del Centro Democrático con miras a 2022. El exmandatario consideró que sí habrá dificultades con miras a la contienda electoral de la que saldrá el próximo presidente de Colombia y en la que se elegirá un nuevo Congreso.

“Alguien que salga del seno del Centro Democrático no puede pretender salir ajeno al Gobierno. Para bien o para mal”, aseguró el expresidente Uribe. “Yo estoy preocupado por el futuro de Colombia y de la democracia. Este problema de criminalidad ha llegado a un punto que empieza a reversar la capacidad del Estado. La dictadura del terrorismo destruyendo la democracia”.

A esto debe sumarse el hecho de que el propio expresidente Uribe, quien ha salido en los últimos días a volantear pidiendo a los colombianos votar por los candidatos del Centro Democrático, se encuentra con uno de los niveles de popularidad más bajos desde que se le mide en los sondeos de opinión.

Un fallo de la Corte Constitucional, en una apretada votación de cinco contra cuatro, determinó hace algunos meses que el expresidente Álvaro Uribe seguirá vinculado a un proceso penal, formalmente imputado por fraude procesal y soborno. Esto no solo lo mantiene con la cabeza puesta en su defensa sino que le ha provocado un impacto negativo en su imagen.

Sin embargo, a pesar de que el Centro Democrático con el expresidente Uribe a bordo, según los cálculos de los expertos, no estaría hoy en capacidad de pasar en solitario a segundo vuelta, sí tiene la fuerza para llevarse una consulta en marzo.

Esta fue, precisamente, otra de las razones que pusieron a los miembros del Equipo por Colombia a pensar. Con la llegada de Zuluaga a esta coalición, muy seguramente hubiese tenido que pasar a ser gregarios del Centro Democrático, pues el candidato uribista se convertiría en el favorito en esa consulta.