Coronavirus

¿El Congreso se está convirtiendo en un foco de contagio por la covid-19?

Un senador y un subsecretario de la Cámara murieron por el virus. Mientras que el Gobierno, alcaldes y gobernadores toman medidas para evitar la expansión del virus, los presidentes de Senado y Cámara guardan silencio.

18 de abril de 2021
Fachada Congreso de la República Bogotá agosto 27 del 2020
Fachada Congreso de la República Bogota, agosto 27 del 2020 Foto Guillermo Torres Reina / Semana | Foto: GUILLERMO TORRES REINA

El coronavirus está rondando los pasillos del Congreso. El senador Eduardo Enríquez Maya murió el miércoles de la semana pasada tras perder la lucha contra la covid-19 en una Unidad de Cuidado Intensivo. Además, este sábado se confirmó el deceso por el virus de Carlos Alberto Triana, subsecretario de la Comisión Cuarta de la Cámara de Representantes y varios congresistas han dado positivo después de asistir presencialmente a las sesiones.

A esto se suma que recientemente se conoció que más de 27 funcionarios y aproximadamente 10 policías asignados a la seguridad del Congreso resultaron contagiados y la mayoría de ellos eran asintomáticos. La Comisión Tercera de la Cámara tuvo que entrar en cuarentena y aplazar las sesiones porque algunos trabajadores eran portadores del virus.

Lo cierto es que mientras los congresistas de la oposición insisten en la necesidad de sesionar presencialmente, los casos de contagio han venido en aumento en el legislativo y este lugar se está convirtiendo en un foco de contagio por recibir a personas de distintas lugares del país, en medio del tercer pico de la pandemia.

A pesar de los esfuerzos de las direcciones administrativas de Senado y Cámara para que se cumplan con los protocolos de bioseguridad y solo asistan al recinto las personas necesarias para las sesiones, algunos congresistas obligan a todos los integrantes de sus Unidades de Trabajo Legislativo, esquemas de seguridad y asesores a permanecer en el Congreso durante las sesiones. Ello está generando el riesgo de contagio.

Además, volvieron las aglomeraciones. Los legisladores autorizan el ingreso de personas ajenas al legislativo y los policías deben permitir el acceso de estas personas que asisten a distintas reuniones y pueden recorrer los pasillos libremente.

En medio de todo este panorama, los presidentes del Senado, Arturo Char, y de la Cámara, Germán Blanco, han brillado por su ausencia. Ninguno de los dos se ha pronunciado frente a esta situación y se han apartado del manejo de la pandemia durante las sesiones ordinarias.

El pasado 13 de abril, Andrea Galvis Cabrales, jefe de Sección de Bienestar y Urgencia Médica del Congreso, envío un oficio recordando que se debía cumplir con los lineamientos del Gobierno nacional para sesionar. Esto quiere decir que se deben evitar las aglomeraciones. Además, recordó que debe primar el teletrabajo para evitar la expansión del virus.

“Durante el tiempo que dure la emergencia sanitaria por causa de la pandemia del coronavirus, las entidades del sector público y privado procurarán que sus empleados o contratistas cuya presencia no sea indispensable en la sede de trabajo, desarrollen las funciones y obligaciones bajo las modalidades de teletrabajo, trabajo remoto y trabajo en casa u similares”.

Varios congresistas han dicho que no volverán presencialmente hasta que hayan sido vacunados, pero otros quieren ir a las instalaciones del Congreso de la República. Por ello, se abre nuevamente el debate de la necesidad de que quienes vayan físicamente al legislativo no obliguen a sus asesores a hacerlo y dejar sus esquemas de seguridad fuera de las instalaciones.

Para esta semana se practicarán nuevas pruebas masivas en el legislativo para determinar si hay nuevos casos de contagios.