MEDIO AMBIENTE

En cuatro años el río Bogotá será navegable: director de la CAR

Néstor Franco señala que la descontaminación del afluente es clave para una ciudad que lo puede convertir en su eje.

22 de noviembre de 2016
Néstor Franco, director de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca. | Foto: Guillermo Torres

El jueves 24 y el viernes 25 de noviembre se realizará un corte de cuentas sobre la intervención en el río Bogotá, la fuente hídrica que hace 10 años era considerada una cloaca irrecuperable y que hoy ya se piensa como la columna vertebral de un nuevo modelo de ciudad.

En ese sentido, Semana.com habló con el director de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca, Néstor Franco, entidad encargada de la recuperacipón de este río para saber qué se ha hecho.

Semana.com: Por tres años la CAR se ha encargado de la limpieza del río ¿qué han encontrado?

Néstor Franco: Nosotros hemos movido 6,5 millones de toneladas de basura. En los 58 kilómetros que hemos intervenido hasta hoy, hemos encontrado colchones, sofás, neveras, televisores, rollos de tela, motores, todo lo que uno se pueda imaginar. A eso hay que sumarle la basura que llega por escorrentía y la que dejan los recicladores en el proceso de separación.

Semana.com: ¿Cuál es el principal problema del río Bogotá?

N. F.: El principal problema es la falta de pertenencia de los bogotanos hacia el río. Históricamente el río ha sido despreciado, se consideró una alcantarilla, el ciudadano de a pie nunca ha tenido un sentido de acercamiento. Debe haber un cambio de conducta del ciudadano.

Semana.com: El diagnostico de hace 10 años era que el río era una cloaca irrecuperable…

N. F.: Desde Guacheneque hasta Girardot, cerca de 300 kilómetros, comienza a perder pureza por los vertimientos residuales domésticos e industriales. El punto más crítico es cuando llega a Bogotá, cuenca media. Allí recibe las aguas residuales de ocho millones de habitantes, el líquido no tiene tratamiento porque la ciudad tiene un rezago de saneamiento básico. (...) Los bogotanos estamos generando 15 metros cúbicos por segundo de aguas residuales.

Le puede interesar: En Suba cultivaban papa con agua del Río Bogotá

Semana.com: ¿Y qué han hecho?

N. F.: Tenemos el río recuperado en la cuenca media que antes tenía 30 metros de cauce y hoy tiene 60 metros. Los ríos naturalmente deben inundar y en temporadas de invierno buscan zonas de remanso, por eso compramos seis millones de metros cuadrados de tierra al lado del río para crear ocho áreas de inundación controlada. Buena parte de esa tierra se destinó al parque lineal del río Bogotá, será el más grande de Colombia que irá desde Soacha hasta la calle 80. Ya lo tenemos construido y estamos en la definición de senderos. La idea es que lo consolidemos como una nueva oferta de turismo.

Semana.com: El 20 % de la contaminación del río la producen las empresas, entre ellas, las curtiembres ¿por qué no se atacan estas industrias?

N. F.: Las curtiembres son empresas familiares que vienen trabajando desde hace 50 años en dos puntos estratégicos: Villapinzón y río Tunjuelo. Lo que hemos insistido a la luz del fallo (Tribunal Administrativo de Cundinamarca) es en la necesidad de hacer reconvención industrial y plantear, de la mano de los empresarios, dos parques industriales que ayuden al cambio en la forma de procesar el cuero para evitar el uso de mercurio y otros metales pesados.

Consulte: Río Bogotá, soñar no cuesta nada

Semana.com: ¿Por lo que se ve es casi una misión imposible descontaminar el río Bogotá?

N. F.: Era imposible hace 10 años. Hoy hemos logrado resultados. La comunidad se está dando cuenta, como cualquier gran ciudad, que lo más importante es el río que la atraviesa. Tenemos que hacer conciencia.

Semana.com: ¿Por qué es importante recuperar el río?

N. F.: En cualquier ciudad del mundo los ríos urbanos se han convertido en la columna vertebral del desarrollo. En Europa todos los ríos de las ciudades se recuperaron y transformaron la vida de los ciudadanos. Coincido con Enrique Peñalosa con que el río puede ser el eje estructural de la nueva ciudad. también descontaminado el Bogotá, limpiamos sustancialmente el Río Magdalena.

Semana.com: ¿No es muy Miami la propuesta de Peñalosa de urbanizar la ronda del río?

N. F.: No, los bogotanos en particular y los cundiboyasenses estamos acostumbrados a pensar en pequeño. (...) En el tema del río tenemos que ser ambiciosos, hay que hacer una propuesta conciliada con la sostenibilidad ambiental.

También puede leer: La explotación minera que aterra a los habitantes de Suesca

Semana.com: ¿El río en algún momento será navegable?

N. F.: Una vez mejoremos la calidad del agua y que no existan riesgos para la salud pública es posible autorizar navegación recreativa o comercial. No es descabellado pensar en poder llevar ciudadanos que viven en Soacha hacia la calle 80 o Chía. Puede ser una nueva alternativa de movilidad. Es un proyecto que hay que diseñar muy bien y puede hacerse realidad en cuatro años.

Semana.com: La CAR ya arrancó la construcción de la ampliación de la planta de tratamiento de aguas residuales Salitre, la comunidad aledaña se opone, no quieren tener un baño público gigante en su patio trasero...

N. F.: La CAR tiene instalada una mesa social desde hace dos años que he presidido en casi todas las sesiones. Un sector de la comunidad se marginó y he retomado la conversación con ellos y buscamos puntos de encuentro. La ubicación no es un capricho de la CAR, esa es una decisión estratégica que tomó la ciudad a finales de los años 80 (...). Por esa decisión todas las tuberías desde la calle 235 hasta la calle 26 miran hacia la planta el Salitre. Si quisiéramos cambiar de ubicación la Ptar tendrían que desenterrar todo el sistema de alcantarillado para que pueda llegar al nuevo sitio, eso es un despropósito.