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El Ejército busca reforzar la seguridad de Cali con 1.141 soldados tras lamentable balance del 28 de mayo
Diez muertos y múltiples daños a bienes públicos y privados, dejó un día más de protestas en Cali. Así va el despliegue de la fuerza pública.
Este sábado, 1.141 hombres del Ejército llegaron a la capital para contribuir a la mejora de la seguridad y la movilidad de la población civil, teniendo en cuenta que desde hace días hay bloqueos urbanos y peajes improvisados en distintos barrios.
“En desarrollo de actividades de asistencia militar, el Ejército Nacional comenzó el despliegue estratégico operacional sobre la ciudad de Cali, con el objetivo de contribuir a mejorar la seguridad, bienestar y movilidad de sus pobladores”, informó el Ministerio de Defensa.
Los uniformados removieron escombros y elementos que impedían la libre movilidad de la ciudadanía. Además, levantaron 10 puntos de bloqueo Cali, Jamundí, Candelaria y Yumbo.
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Adicionalmente, acompañaron el paso de caravanas de vehículos de carga con alimentos, combustible y artículos de primera necesidad que ingresaban a la región.
De acuerdo con la cartera de Defensa, en algunos puntos los militares hallaron tachuelas, puntillas y otros elementos que habían sido regados con el objetivo de pinchar las llantas de los vehículos que intentaran pasar por ahí. Sumado a eso, algunas vallas de señalización vial fueron derribadas y pegadas a estructuras en suelo con soldadura para dificultar su posterior remoción.
Todo esto sucede luego de una violenta jornada, en la que hubo muertos, denuncias de abuso policial y bienes materiales arruinados. El general Juan Carlos León, comandante de la Policía Metropolitana de Cali, hizo un balance actualizado de los hechos.
Según él, el viernes se presentaron 10 homicidios en Cali, pero solo tres de ellos coinciden con lugares donde tuvieron lugar actividades de protestas. “Los demás casos estarían relacionados con ajustes de cuentas entre estructuras delincuenciales, intolerancia y sicariato”.
El comandante informó, aparte, que a las 6 de la mañana del sábado 29 de mayo, en el barrio Poblado Campeste, en la vía Cali-Candelaria, ocurrió el homicidio de una persona, que presuntamente pudo haber ocurrido por una riña.
A esa misma hora, en el sector de Meléndez, se conoció información sobre otro cuerpo sin vida. “La Fiscalía General de La Nación se encuentra adelantando las respectivas investigaciones. En relación a este y los demás casos, todas las capacidades institucionales estarán dispuestas para aportar al proceso investigativo, si así lo requiriera el ente investigador y que permita esclarecer los hechos en el menor tiempo posible”, informó.
Además, se reportaron tres muertos en el sector de La Luna, en horas del mediodía, aparentemente por una agresión mutua por los bloqueos registrados en ese sector de la capital.
A lo largo del 28 de mayo hubo al menos 15 bloqueos, ocho concentraciones y cuatro movilizaciones donde hicieron presencia cerca de 8.000 personas, acompañadas por un dispositivo policial.
Las concentraciones comenzaron desde temprano en diferentes puntos de la capital del Valle, pero con el paso de las horas empezaron a registrarse hechos vandálicos, “para nada relacionados con la manifestación pacífica”, que dejaron un saldo de seis instalaciones policiales afectadas, dos estaciones del sistema de transporte masivo vandalizadas, así como cuatro establecimientos de hospedaje, establecimientos comerciales, cajeros electrónicos e infraestructura pública.
Según el general, fue necesaria la intervención del Esmad, especialmente en Meléndez y en Ciudad Jardín, ambos en el sur de Cali. En el lugar resultaron cuatro policías lesionados, uno de ellos por arma de fuego cuando intentaba evitar un bloqueo en este sector de la ciudad. Los uniformados se suman a los 212 policías afectados desde el pasado 28 de abril.
A raíz de todo lo sucedido, aparte del despliegue de soldados por toda la ciudad y zonas del departamento, un dispositivo conformado por 750 hombres y mujeres policías de las diferentes especialidades de la institución, iniciaron patrullajes aéreos y terrestres, puestos de control permanentes en sitios priorizados y de mayor afectación.