“El fuego interno en el Centro Democrático está sobrepasando los límites”: Ernesto Macías

En el Centro Democrático ya no hablan de fuego amigo porque ya ni siquiera se consideran con ese grado de confianza. Se refieren a fuego interno. Así lo reconoció este viernes el senador Ernesto Macías en su red social Twitter al asegurar que las peleas al interior de la colectividad “están sobrepasando los límites”.

El pronunciamiento del expresidente del Senado surge porque este jueves el grueso de la bancada parlamentaria del uribismo expidió un comunicado expresando el apoyo a la precandidatura presidencial del exministro de Hacienda, Óscar Iván Zuluaga. Aunque en el partido también se disputan la candidatura las senadoras María Fernanda Cabal, Paloma Valencia, el exministro Rafael Nieto y el congresista Edward Rodríguez, pesos pesados de la colectividad no dudaron en marcar línea y preferencias hacia el exrival político de Juan Manuel Santos en 2014.

La afinidad de la bancada en favor de Zuluaga generó malestar entre algunos sectores, especialmente entre quienes respaldan a la senadora María Fernanda Cabal. Juan José Lafaurie, su propio hijo, reaccionó en contra del comunicado. “El candidato del Centro Democrático aún no está elegido. El candidato oficial será publicado el 22 de noviembre. Al candidato del Centro Democrático lo elegirá la militancia del partido y los uribistas que no sean militantes”, aclaró el joven conservador. Y en otro trino en su red social Twitter: “Las bases quieren a Cabal”.

El constitucionalista Rafael Nieto también reaccionó en contra. “Aprecio a mis amigos congresistas, pero dan un pésimo mensaje. Hay que respetar el mecanismo de definición del candidato del Centro Democrático. Se debe proclamar es a quien los militantes del partido y los uribistas escojan, a quien ellos, la base, crean que mejor los representa”, escribió.

El activista e influenciador de derecha, Miguel Polo, cercano a la senadora Cabal, manifestó que “esto no es de firmas de congresistas, esto es con votos y opinión de la militancia. Esto se llama Centro Democrático, no centro dedocrático. La militancia elegirá al candidato que los represente”.

El expresidente Álvaro Uribe se ha mantenido hermético, respetuoso de las diferencias, pero seguramente tendrá que salir al frente y calmar los ánimos entre sus dirigentes porque al estilo de la izquierda y la centroizquierda, el movimiento de derecha también parece fracturado.

El Centro Democrático tiene claro que en noviembre próximo se escogerá el candidato único entre la militancia y una encuesta, tal como sucedió en el 2018 en el proceso de escogencia de Iván Duque, pero el comunicado en bloque del grueso de figuras del uribismo en favor de Zuluaga se ha leído como una forma de presión para que se decida antes de lo estipulado el nombre de la figura que se medirá en la consulta de la centroderecha en marzo de 2022.

Lo cierto es que en la casa uribista hay varios sectores enfrentados. Este viernes, por ejemplo, las directivas de Centro Democrático resolverán los cuestionamientos del analista Rafael Nieto frente a la precandidatura presidencial del congresista Edward Rodríguez. El primero no le ve perfil al segundo y considera que no le da altura al debate en el uribismo, pero no hay dudas que Rodríguez obtuvo más de 100.000 votos a la Cámara en el 2018, una cifra que no resulta despreciable y que pudo ubicarlo en el Senado.

Nieto también cuestionó la precandidatura del exgobernador de Casanare Alirio Barrera, un líder que el expresidente Uribe aprecia, pero que a juicio del abogado, no tiene el perfil académico y profesional para conducir los destinos de la Nación.

Como están las cosas, el Centro Democrático no decidirá frente al tema. O si lo hace no coartará la aspiración de ninguno de sus precandidatos presidenciales. Al fin y al cabo, Uribe ya dijo en que su colectividad no existen vetos y será mediante un mecanismo democrático que se tomen las decisiones de cara al 2022. En ese orden de ideas, la salida del partido de Rafael Nieto, uno de los perfiles de derecha que más ha defendido la Política de Seguridad Democrática, está casi que cantada.

Otra de las diferencias las protagoniza la senadora María Fernanda Cabal y Óscar Iván Zuluaga. Aunque la relación entre ambos es buena, e incluso ella puso a sonar su nombre durante el primer semestre de 2021, su posición frente a los apoyos en favor del exministro de Hacienda tras el comunicado de este jueves, podría distanciarlos. Cabal, además también tiene serias diferencias con la Casa de Nariño, especialmente con Iván Duque. Recientemente, ella le reconoció a SEMANA que tomó distancia del palacio presidencial.

Como si faltaran más divisiones, el congresista Gabriel Santos y la presidenta de la Cámara, Jennifer Arias, adelantan el enfrentamiento más reciente en el partido de derecha. El hijo de Francisco Santos le reclama a la dirigente llanera para que le de trámite a su proyecto que busca reducir las vacaciones de los parlamentarios, pero ella no decide y amaga con ahogar una de las iniciativas más esperadas por la opinión pública. El tema ya está en manos del Comité de Ética de Centro Democrático porque Santos empapeló el Congreso con afiches que decían ‘Se busca’ donde aparecía el rostro de Arias.

Solo una figura como el expresidente Álvaro Uribe puede limar las divisiones entre su partido. Al fin y al cabo él sigue siendo la cabeza y la voz cantante en esa colectividad.