NACIÓN
Armando Novoa, por la boca muere el pez
El magistrado al que le habían asignado estudiar el supuesto ingreso de dineros de Odebrecht a la campaña de Santos 2010 fue recusado. Su caso puede ser un ejemplo de la inconveniencia de mezclar los fallos con los micrófonos.
Para nadie es un secreto que Armando Novoa llegó por una carambola del destino al Consejo Nacional Electoral (CNE). Una de esas peleas entre los partidos políticos de la Unidad Nacional propició que dentro de los nueve magistrados se eligiera a uno del uribismo y otro que representara tanto a la izquierda como a los independientes. Novoa era este último.
Es probable que desde su posesión Novoa se sintiera como “mosco en leche”. No era para menos. Su perfil académico, su condición de exconstituyente y el respaldo de los partidos que siempre se han declarado en oposición al establecimiento (caso del Polo y la Alianza Verde, por ejemplo) lo hacía un elemento extraño al perfil tradicional que han tenido los magistrados del CNE. Y aunque una golondrina no hace verano, la presencia de Novoa alimentó la expectativa de quienes esperaban verdaderas respuestas del máximo tribunal electoral.
Desde el mismo momento en que el escándalo de Odebrecht salpicó a las campañas presidenciales de Juan Manuel Santos y Óscar Iván Zuluaga del 2014, al CNE le cayó la responsabilidad de determinar si hubo recursos de la firma brasileña y si las campañas superaron los topes de financiación establecidos por la ley.
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Una auténtica pregunta del millón pero que el país se resignaba a no encontrar las respuestas, entre otras por la filiación política del resto de magistrados, cinco de ellos de la llamada Unidad Nacional.
Luego, cuando Roberto Prieto, gerente de la campaña de Santos, admitió en la célebre entrevista a Blu Radio el ingreso de recursos de Odebrecht, pero en la campaña del 2010, el destino, en forma de una balota, lo señaló como el encargado de resolver estos interrogantes, por lo menos los relacionados con la campaña Santos Presidente 2010. Sin embargo, el único magistrado que defendía la tesis de que ese expediente se podría reabrir terminó recusado.
Y es que Novoa, desde cuando tuvo la investidura de magistrado, se volvió tan amigo de los micrófonos que soltó la lengua más de la cuenta. Y quizá por no tener esa prudencia que hace verdaderos sabios, le fue despojada la investigación contra la campaña de Santos.
¿Declaraciones indebidas?
Sólo entre el 10 y el 17 de marzo, cuando los medios de comunicación dieron a conocer la entrada de 400.000 dólares a esa campaña, Novoa habló con cerca de una decena de medios de comunicación nacionales y extranjeros.
Por ejemplo, en La W con Vicky Dávila, el 10 de marzo, explicó lo que le podía suceder a la campaña Santos Presidente 2010. Afirmó que si se llegara a comprobar que esos 400.000 dólares entraron y violó los topes, el CNE puede imponer “una multa económica al partido y se puede suspender su derecho a presentar candidato en la próxima contienda electoral”.
Y el mismo día que Prieto aceptó la presencia de Odebrecht en Santos presidente 2010, el 14 de marzo, el magistrado visitó al veterano periodista Yamid Amat en su programa Pregunta Yamid. Allí dijo, entre otras cosas, “me parecen deplorables esas declaraciones y lo que está ocurriendo con ese episodio (…) hay unas normas legales y constitucionales que asignan unas responsabilidades al gerente de la campaña, al auditor y al candidato del partido”.
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Frente a la supuesta caducidad de la campaña dijo que "sería absurdo pensar que la caducidad corre desde el momento de los hechos cuando la autoridad electoral tuvo conocimiento de esas situaciones tiempo después”. Citó un fallo del Consejo de Estado y dijo que el término de la caducidad corre a partir del momento en el que las autoridades tienen conocimiento de los hechos.
Horas antes ya había estado en el programa de Patricia Janiot, en CNN, hablando del mismo tema.
Y al día siguiente, el 15 de marzo, presentó otra proposición a la sala plena para que “inicie una investigación sobre la posible superación de los límites de financiación, por recibir contribuciones del extranjero y por posibles omisiones en la rendición de cuentas, en la campaña del presidente Juan Manuel Santos para el período 2010-2014, luego de las declaraciones del señor Roberto Prieto sobre el aporte de Odebrecht a dicha campaña”, dice la proposición.
Para muchos el magistrado prejuzgó y por eso este miércoles, minutos antes de presentar el proyecto en el que pide que investiguen esa campaña, recibió en su despacho una recusación de un ciudadano que dice que el magistrado Novoa está inhabilitado por entregar declaraciones a los medios acerca de la investigación que luego apadrinó.
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La ira del magistrado no se hizo esperar e inmediatamente publicó en cuenta de Twitter: “Hoy en CNE nueva recusación para apartarme de la investigación a la campaña presidencial del 2010. Al parecer redactada en despacho de algunos magistrados”.
Héctor Elí, el nuevo investigador recusado
Una vez recusado el magistrado Novoa, el CNE anunció que, por reparto, la investigación quedó en manos del magistrado Héctor Helí Rojas, un político curtido en el Congreso, lugar en el que ha ocupado dos veces una curul en la Cámara de Representantes y cuatro veces ha estado sentado en el Senado como representante del Partido Liberal.
Cabe recordar que la solicitud de investigación la hizo el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, quien también hace parte de los liberales y este partido de la Unidad Nacional, la coalición política del presidente.
Sin embargo, Héctor Elí fue recusado este jueves por el director de la Red de Veedurías Ciudadanas, Pablo Bustos, porque alegó que el magistrado fue candidato al Senado por el Partido Liberal y apoyó abiertamente al presidente en su reelección.
Así las cosas, la recusación contra Novoa deberá ser resuelta por el magistrado Emiliano Rivera; dice el reglamento que corresponderá estudiarlas al magistrado que le siga en orden alfabético al recusado. Le tocó a este magistrado liberal. Para el caso de Rojas, la tendría que definir Alexander Vega, siguiente de la lista. Quién sabe si la pueda estudiar. Por ser del partido de la U, y por su presunta cercanía con el Ñoño Elías, también tendrá recusaciones en su contra, o le llegarán. El martes habrá Sala Plena. Al CNE se le agota el tiempo para entregar respuestas a los interrogantes que tienen en vilo al país desde hace varias semanas.