“El resultado del lenguaje violento de Petro”: el país reacciona a ataque de la minga indígena a las instalaciones de SEMANA

Este viernes, 29 de septiembre, la minga indígena entró a la fuerza a las instalaciones de SEMANA, rompiendo los cristales de la recepción y agrediendo a funcionarios de seguridad. El país manifiesta su indignación por el ataque a la libertad de prensa perpetrado por el grupo étnico.

Uno de los primeros en reaccionar fue el senador Miguel Uribe, quien aseguró que la libertad de prensa en Colombia está en riesgo.

“La libertad de prensa está en riesgo en Colombia. Indigenas entran a la fuerza a SEMANA. Este es el resultado del lenguaje violento de Petro en contra de los medios y periodistas que no lo aplauden ciegamente”, dijo el parlamentario en su cuenta de X.

Francisco Santos, exvicepresidente y exembajador de Colombia en Washington, mostró su indignación por lo ocurrido.

“Hay que sacarlos a las malas. Si no es el comienzo del fin de la democracia”, publicó. Luego complementó, comparando lo ocurrido con el atentado al diario El Espectador.

“Una bomba a El Espectador o la toma de Revista SEMANA, el parecido de los narcos con la minga es evidente. Cierto ir al Cauca es ir al epicentro del narcotráfico. Entregar espacios como este es entregar la democracia. Hay que enfrentarlos igual a como ellos lo hacen. Sin miedo”, agregó.

José Manuel Acevedo, director de Noticias RCN, expresó su solidaridad con SEMANA y rechazó el ataque a la prensa.

“Se puede discrepar de los contenidos, del enfoque editorial, del estilo, y a ese juicio estamos sometidos todos los medios por parte de las audiencias, pero NUNCA eso puede implicar una agresión física para los periodistas de un medio de comunicación que merecen respeto. Lo que ha pasado hoy es inaceptable, merece todo el rechazo y una reflexión honda de parte de la sociedad: nos hacemos verdaderamente libres en democracia, si tenemos más medios, no menos. Toda mi solidaridad con Semana por esto que ha ocurrido hoy y que no puede pasarse por alto”, expresó el periodista, en conversación con este medio.

El senador Jota Pe Hernández, de la Alianza Verde, calificó el ataque de los indígenas como “actos delincuenciales” en contra del medio.

“Mi solidaridad con SEMANA y su directora, Vicky Dávila. Estos actos delincuenciales por parte de los indígenas, que se deciden a invadir y destruir la propiedad privada, deben tener consecuencias. Nos toca unirnos Colombia y junto a la fuerza pública defender esta patria”, manifestó.

Andrés Mompotes, director del diario El Tiempo, rechazó lo sucedido: “Ninguna agresión violenta contra un medio contribuye a la democracia. Reprochable que un grupo de indígenas haya acudido a las vías de hecho en la sede de Revista SEMANA para expresar su desacuerdo. La libertad de expresión es el disenso sin violencia”.

Iván Duque, expresidente de Colombia, recalcó que se trata de grupos promovidos por el Gobierno en la movilización del 27 de septiembre.

“Es muy grave que grupos promovidos en su movilización por el Gobierno, irrumpan a la fuerza en un medio de comunicación. Estos actos son un mensaje de intimidación a la prensa libre y una alerta que amerita una acción institucional contundente de rechazo y judicialización. Esto es la combinación de todas las formas de lucha contra la libertad y la democracia”, dijo en X.

José Manuel Restrepo, exministro de Hacienda, expresó su solidaridad con el medio: “Este tipo de actos son totalmente contrarios a la construcción democrática que ha tenido el país y merecen todo el repudio de la sociedad. ¡Son actos de violencia! ¡Así no se tramitan las diferencias!”.

Carlos de Hart, exviceministro de Desarrollo Empresarial, pidió “rodear y proteger a SEMANA”.

“Este ataque a ese medio es un ataque a la libertad de prensa y, por lo tanto, un grave ataque a nuestra democracia. El gobierno debe decidir, ante este hecho violento, de qué lado se para (democracia o terror y amedrentamiento para coartar las libertades)”, publicó.

El Partido Liberal pidió respeto por la labor periodística y rechazó las amenazas a quienes ejercen la profesión.

“Exigimos absoluto respeto por los periodistas, por los medios de comunicación, sus trabajos fortalecen la democracia. Rechazamos las amenazas, las tomas a sus sedes y que se les trate de intimidar para afectar su trabajo periodístico. Respeto por los periodistas”, comunicó la colectividad en X.

Sofy Casas, columnista de opinión en SEMANA, culpó al Gobierno nacional: “Esto es lo que ha logrado el odio de Gustavo Petro y su Pacto Histórico en contra de la libre prensa. Pedimos a la Fiscalía que investigue y tome acciones en contra de estos desadaptados. Mi solidaridad siempre con mi casa, Revista SEMANA, y a nuestra directora Vicky Dávila ante esta persecución que no cesa”.

El expresidente Álvaro Uribe grabó un video rechazando lo ocurrido en las instalaciones de SEMANA.

“Mal precedente que la minga indígena, que ha llegado a Bogotá, invada las instalaciones de Revista SEMANA o cualquier instalación, privada o pública. Eso parece que hubiera en el fondo de todo un ánimo provocador para conducir al país a más tensiones, a más dificultades y a más violencia. Rechazamos cualquier invasión”, expresó.

Federico Gutiérrez también expresó su solidaridad con el equipo de SEMANA y pidió respeto a la prensa por parte del Gobierno nacional.

“El Gobierno nacional tiene que respetar la prensa. Los colombianos no vamos a permitir que crucen la línea roja y sigan amedrentando a los periodistas. Si permitimos esto será el fin de la democracia. Toda mi solidaridad con la Revista SEMANA, con Vicky Dávila y con todos sus periodistas y personal de apoyo. Expreso mi más enérgica condena a este atentado contra la libertad”, dijo.

Carlos Fernando Galán, candidato a la Alcaldía de Bogotá, pidió “reflexionar” sobre los mensajes que el poder envía contra la prensa.

“Entrar a un edificio a la fuerza y romper sus vidrios no es protesta social, no es manifestación pacífica. Es simplemente violencia. Hechos como el de la minga indígena en Revista SEMANA son inaceptables y preocupantes. Es hora de reflexionar sobre los mensajes que desde el poder se envían contra la prensa. Las palabras pesan y, en casos como este, son violencia. Mi solidaridad con SEMANA”, dijo.

Rodrigo Lara, quien también aspira a la Alcaldía de Bogotá, manifestó su indignación: “Es un hecho repudiable y totalmente inaceptable. La libertad de prensa no puede ser amedrentada por hechos violentos como los que ocurrieron hoy”.

El general Jorge Luis Vargas, candidato a la Alcaldía de Bogotá, aseguró que los indígenas que irrumpieron en el edificio deben ser judicializados.

“Esto es inaceptable. La primera línea ancestral patrocinada por Petro y su títere atacando la libertad de prensa. ¡Los responsables de esta irrupción violenta deben ser judicializados! Solidaridad con Vicky Dávila y su equipo”, publicó.

La senadora María Fernanda Cabal fue contundente al afirmar que los ataques son “promovidos” por el presidente Gustavo Petro.

“Inaceptables las acciones violentas de estos que creen que porque son indígenas están por encima de la ley. Inaceptables las agresiones contra un medio de prensa, que además tiene especial protección. Inaceptable que estas sean las consecuencias de la promoción del vandalismo y la anarquía por parte del presidente Gustavo Petro”, aseveró.

Wilson Ruiz, candidato a la Alcaldía de Cali, pidió garantías en seguridad para los periodistas: “Rechazo contundentemente el ataque contra las oficinas de SEMANA. Mi solidaridad para los periodistas porque no se puede amedrentar ni coartar la libertad de prensa. Solicito al Gobierno que le dé garantías de seguridad a todos los periodistas del país y agradezco a la fuerza pública por su gran trabajo oportuno en restablecer el orden”.

El abogado Ramiro Bejarano también se pronunció: “Muy grave y antidemocrático que un grupo de indígenas, obviamente libreteado por el Gobierno, irrumpa con fuerza en las instalaciones de SEMANA. Es un ataque a la libertad de la prensa que debe rechazarse”.

Gustavo Gómez, director de 6 AM Hoy por hoy de Caracol Radio, expresó su solidaridad y rechazo.

“Toda mi solidaridad y apoyo a Vicky Dávila y los colegas de SEMANA. Las discrepancias y opiniones se manejan con respeto. Pido consideración por la libertad de expresión y una actuación efectiva de las autoridades para dar garantías de seguridad”, trinó.

Alejandro Gaviria, exministro de Educación del Gobierno Petro, también rechazó lo ocurrido: “Inaceptable lo ocurrido en la sede de SEMANA: una intimidación violenta que amenaza la libertad de prensa. Las palabras violentas (sobre todo las pronunciadas por quienes detentan el poder del Estado) pueden terminar alimentando la violencia. El respeto a la democracia comienza por el respeto a las distintas formas de expresión y pensamiento”.

Después del ataque, el general Jorge Luis Vargas y Diego Molano, candidatos a la Alcaldía de Bogotá, llegaron a las instalaciones de SEMANA para expresar su solidaridad.

“Defendemos la democracia. Hoy rechazamos este ataque a la Revista SEMANA. Es un ataque, no a la revista, sino a los medios de comunicación. A la esencia de la democracia. Defendemos a Bogotá, defendemos a la libertad de prensa, defendemos la posibilidad de que la oposición esté siempre en un papel activo”, dijo Molano.

Julio Sánchez Cristo, director de W Radio, también se pronunció: “Toda mi solidaridad con nuestros colegas de SEMANA. Siempre se debe defender la libertad de prensa en una democracia. Rechazo total a los ataques”.

Bruce Mac Master, presidente de la Andi, aseguró que los ataques a los medios de comunicación “deben ser rechazados por todos los que creemos en la democracia”.

“La prensa libre es uno de los mayores valores de las sociedades civilizadas y libres. Nuestra solidaridad con SEMANA y nuestro llamado a todos los sectores a rodear la prensa libre y la libre expresión”, sostuvo el líder de los empresarios en Colombia.

El Partido Conservador también expresó su rechazo a la “incursión violenta” de los indígenas en las instalaciones del medio: “Lo cual es una amenaza directa a la libertad de prensa, principio fundamental de nuestra democracia”.

Además, el partido independiente opinó acerca de las polémicas declaraciones de la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, al respecto.

“Es preocupante la actitud y reacción de la ministra de Trabajo cuando señala ‘que los periodistas no sean incendiarios’ justificando un hecho violento que irrespeta también la libertad de prensa”, aseveró.

José David Riveros, secretario de Gobierno de Bogotá, opinó sobre el ataque a nombre de la administración distrital.

“El ataque a la sede de SEMANA es absolutamente reprochable. En una democracia ninguna posición o expresión justifica hechos violentos y estos no pueden pasar como derecho a la protesta. Condenamos cualquier desmán que se produzca en medio de la expresión de la diferencia”, dijo Riveros.

El Círculo de Periodistas de Bogotá emitió un comunicado sobre el ataque al edificio SEMANA, condenando la acción violenta de los indígenas.

“El CPB hace un llamado al respeto por la actividad periodística y a las instituciones periodísticas de Colombia e invita al diálogo como mecanismo para evitar cualquier hecho que altere la tranquilidad ciudadana”, manifestó Víctor Hugo Lucero, presidente del CPB.

La Defensoría del Pueblo rechazó: “Rechaza el ingreso a la fuerza de un grupo de indígenas al edificio donde opera la Revista SEMANA, hechos en los que, según denuncia del propio medio de comunicación, los manifestantes rompieron vidrios y agredieron a un integrante del personal de vigilancia”.

A lo largo de este día, ciudadanos y gremios se han solidarizado con SEMANA. La Asociación de Periodistas Económicos (APE) emitió un comunicado en la que expresa:

“La Asociación de Periodistas Económicos APE ve con profunda preocupación y como una grave amenaza para los medios de comunicación de Colombia y para todos y cada uno de los profesionales que ejercen el oficio, la toma de las instalaciones de la revista Semana.

Además, consideramos que las delicadas afirmaciones hechas durante la misma, respecto a los medios de comunicación, se constituyen en una seria advertencia para la libertad de expresión y el efectivo desarrollo de la democracia”.

También, el exmagistrado del consejo de Estado Marco Antonio Velilla, en solidaridad para todos, comunicó: “Toda mi solidaridad y apoyo. Como se dice en El Quijote de la Mancha, ‘ladran Sancho, señal que cabalgamos’. Gracias por toda esa resistencia valiente por Colombia”.

Además, el columnista Jorge Barón Jr. posteó en X su pronunciamiento, en el que exalta su apoyo a esta casa editorial.

“Cómo ciudadano parte del constituyente primario, condenó el acto de terror generado por la minga indígena a las instalaciones y personal de la revista SEMANA. Este es un ataque directo a la libertad de prensa y a la integridad personal de los empleados del medio de comunicación. YO APOYO A SEMANA”.

Diego Santos se unió a las voces de rechazo al violento acto y sentenció:

“¿Qué sigue mañana? ¿Que entren en nuestras casas, en las de quienes somos oposición de este gobierno? ¿En las fábricas y empresas cuyos dueños no se inclinan ante Petro? ¿En los hogares de los congresistas que son dignos? Sorprende ver quienes están quitándole importancia al hecho de los indígenas”.

En el plano internacional también hubo reacciones a favor de SEMANA.

La periodista Patricia Janiot aseguró a través de su cuenta en X: “Me uno a las voces de rechazo a esta agresión a las instalaciones de Revista Semana. Una democracia debe garantizar la libertad de expresión y el ejercicio periodístico. Ese que fiscaliza y molesta al poder de turno. Es un pilar fundamental en una sociedad civilizada que respeta la diversidad de opiniones. La violencia nunca es el camino”.

Por su parte, la Federacion Colombiana de Lonjas de propiedad Raiz (Fedelonjas) también mostró su rechazo ante este tipo actos violentos sucedidos en contra de SEMANA, al asegurar que si bien reconocen el derecho a la protesta social, estas acciones no deben afectar la paz de los colombianos.

De la misma forma, tomaron estos hechos como base para resaltar la importancia de la prensa dentro de la sociedad, al solicitar el respeto hacia los periodistas y sus labores, priorizando el diálogo por encima de las vías de hecho.