Martorelli, a la espera de una bendición de la justicia colombiana

Este martes, un juez de Bogotá escuchó los argumentos que tiene la defensa del expresidente de Odebrecht en Colombia Eleuberto Martorelli para buscar una negociación con la justicia. El ejecutivo busca el cese de la acción penal en su contra por el delito de tráfico de influencias, al haber tenido conocimiento del pago a privados para quedarse con el otrosí Ocaña-Gamarra.

La Fiscalía valora que haya sido un documento presentado por tres ejecutivos de la firma -Martorelli, Luiz Bueno Junior y Luiz Mameri- el que inició la gran investigación por corrupción. Sin embargo, el fiscal general Néstor Humberto Martínez no ha escatimado detalles para insistir, que las acciones del ente investigador han encontrado mucho más dinero del denunciado por los ejecutivos. 

Las cuentas de los sobornos de Odebrecht en versión de los brasileños son: USD$ 6.5 millones de dólares por el contrato de Ruta del Sol tramo 2 y USD$ 4.5 millones para el otrosí de Ocaña-Gamarra. Sin embargo, el ente investigador lleva adicionalmente hallazgos por $ 37.000 millones en contratos simulados asociados a la ejecución del otrosí y $ 4.000 millones desconocidos que se habrían pagado para tramitar un contrato de estabilidad jurídica. 

En el caso particular de Martorelli, lo que le afecta su proceso en Colombia es lo relacionado con el otrosí Ocaña-Gamarra, el cual sacó adelante siendo presidente de la firma. Desde el comienzo del escándalo, reveló el nombre de Otto Bula como su enlace en Colombia. Sin embargo, rápidamente se convirtieron en contradictores ya que Bula niega que $4.6 millones de dólares hubieran ido a parar a sus bolsillos.

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Estando en libertad en Brasil, Martorelli busca arreglar su situación penal en Colombia y por ello le pide a los jueces que avalen la negociación, con la que se compromete a cambio a entregar 14.000 millones de pesos de indemnización y a ser testigo de cargo en contra del exsenador Bula. Además de aclarar los interrogantes que tenga la justicia de acá en adelante. 

Aunque la Fiscalía adelante sendas negociaciones con ambos, el gran interrogante es a ¿quién le va a creer el ente investigador frente a dos contradicciones claves?

La primera, tiene que ver con los montos. Al ser capturado, Bula entregó detalles de cómo se repartieron el 4 por ciento del contrato Ocaña Gamarra, que corresponde a las coimas que Odebrecht pagó en Colombia a políticos y funcionarios que ayudaron a la firma del contrato. Aunque acá aparecen mencionados un listado de congresistas investigados por la corte -entre los que está Bernardo ‘El Ñoño‘ Elías- Martorelli manifiesta que este dinero fue entregado a Bula y punto. A esta discrepancia se agrega que la Fiscalía tiene documentadas facturas ficticias por 37.000 millones de pesos adicionales a lo que confesaron los brasileños.

Otro de los puntos controversiales y sensibles tiene que ver con la supuesta entrega de USD$1 millón de Otto Bula a Andrés Giraldo. Según Bula, Martorelli dio la instrucción de entregar este dinero que tenía como destino final Roberto Prieto. Según Martorelli, jamás dio esta instrucción y es una invención absurda de Bula.

En lo que tiene que ver con los pagos a Bula, la decisión está en un manos de un juez de la República. Sin embargo, aún quedan piezas abiertas sobre las cuales la Fiscalía tendrá que emitir algún pronunciamiento que tendrá consecuencias penales, solo que a estas alturas no es claro en contra de quién.