POLÍTICA
“Respetamos la soberanía de Colombia”: Estados Unidos sobre cancelación de visas a magistrados
Mediante un comunicado la Embajada de Estados Unidos en Colombia aseguró que el Departamento de Estado tiene “amplia autoridad” para revocar visas por información que indique que el titular de ese documento es inadmisible en ese país.
La Embajada de Estados Unidos en Colombia fijó su posición frente al incidente que provocó la cancelación de las visas a los magistrados de la Corte Constitucional, Antonio José Lizarazo y Diana Fajardo, y al presidente de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia, Eyder Patiño.
En un escueto comunicado la delegación diplomática de ese país en Colombia aclaró que los expedientes de visas son confidenciales por lo que no se hacen comentarios sobre casos individuales, pero aseguró que el Departamento de Estado tiene la potestad para revocar esos documentos si sale a la luz información que indique que cualquier titular es inadmisible en territorio norteamericano.
Le puede interesar: Portada: ¿Chantaje diplomático?
“Bajo la ley de Estados Unidos, los expedientes de visas son confidenciales. No comentamos sobre casos de visas individuales. El Departamento de Estado tiene amplia autoridad para revocar visas basándose en información, que salga a la luz en cualquier momento, que indique que el titular de la visa puede ser inadmisible en Estados Unidos, o no cumpla con los requisitos de visa. Todas las decisiones con respecto a la elegibilidad para una visa se basan en las leyes y regulaciones de Estados Unidos”, se lee en el comunicado.
La embajada también descartó que lo sucedido con los magistrados obedezca a decisiones adoptadas por estos y que resultaran incómodas para los Estados Unidos.
“Estados Unidos y Colombia tienen una larga historia de diálogos abiertos y sinceros. Nuestra misión diplomática es representar los intereses de los Estados Unidos ante los interlocutores colombianos. Al hacerlo, reconocemos, valoramos y respetamos la soberanía de Colombia y lo esencial de sus instituciones democráticas. Valoramos especialmente la relación que hemos construido durante tres décadas con los valientes hombres y mujeres de la rama judicial colombiana, que trabajan incansablemente y con integridad para garantizar el Estado de derecho. Nuestra cooperación judicial ha dado resultados concretos a ambas naciones. Apreciamos nuestro diálogo continuo”, finaliza el comunicado.
El pasado viernes SEMANA conoció que las visas de tres magistrados, dos de la Corte Constitucional y uno de la Corte Suprema de Justicia, habían sido revocadas por parte de los Estados Unidos, por haber adoptado posiciones contrarias a los intereses de Estados Unidos.
A Antonio José Lizarazo le habrían cancelado la visa por haber sido ponente de la ley estatutaria de la JEP que no le gustó al embajador de Estados Unidos por las implicaciones que tendría en procesos de extradición. Lo notificaron el 12 de abril vía correo electrónico y lo citaron a una entrevista en la embajada.
Le puede interesar: La cúpula de la justicia se enfila para resistir a las presiones indebidas
Para esos días, el magistrado afrontaba el luto por la muerte de su madre, razón por la cual se trasladó a Cúcuta y no pudo asistir a esa cita. Una vez regresó a Bogotá acudió a la embajada, en donde le explicaron que se trataba de un impase “rutinario”. Le dijeron que las autoridades norteamericanas estaban preocupadas porque personas con líos judiciales pudieran irse a Estados Unidos, como en el caso de Andrés Felipe Arias. Y en este contexto le solicitaron presentar un certificado de la Comisión de Acusación del Congreso, el órgano competente para procesar a los magistrados y demás dignatarios del Estado, en el que constara que no tenía asuntos pendientes con la justicia. Lizarazo cumplió con el requisito y recuperó su visa.
A la magistrada Diana Fajardo, clave en los debates de los asuntos relacionados con el proceso paz que se han dado en este tribunal, también le fue notificada la suspensión de su visa. Al igual que a Lizarazo le habrían pedido certificar que no tiene procesos pendientes en la Comisión del Congreso.
El caso del retiro de la visa de Patiño tendría relación directa con el trámite de extradición de José Martín Yama Guacanés, un indígena de la comunidad San Juan de los Pastos, en Ipiales (Nariño). El hombre fue grabado por la DEA adelantando transacciones de droga y fue requerido en extradición por los delitos de concierto para delinquir agravado y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes agravado.
La Corte Suprema de Justicia con ponencia del magistrado Patiño tomó la decisión de negar la extradición a Estados Unidos bajo la protección del principio del non bis in idem (no ser juzgado dos veces por el mismo delito) en vista de que la comunidad indígena ya lo había sancionado. El resguardo anexó incluso la constancia según la cual ya había sido condenado por narcotráfico a diez años de prisión por las autoridades de su resguardo bajo los parámetros de la jurisdicción indígena. Aunque el concepto de extradición fue proferido el 21 de marzo de 2018, viene generando malestar desde entonces.
Puede leer: La justicia bajo presión: Estados Unidos les quitó la visa a tres magistrados
Ante la situación la Corte Constitucional consideró indigno el tratamiento y la presidenta del alto tribunal, Gloria Stella Ortiz, se reunió con el presidente Iván Duque en la Casa de Nariño donde expuso sus temores por la falta de garantías que está afrontando la justicia.
El viernes pasado la cúpula de la justicia, entre otros el Consejo de Estado y la Corte Suprema de Justicia, expresaron su solidaridad y en sendos pronunciamientos los magistrados dejaron entrever que si bien el gobierno norteamericano tiene derecho a decidir quién entra en su territorio, rechazaron cualquier “mecanismo de presión o represalia” que busque menoscabar la autonomía de la Justicia colombiana.
Este es el texto del comunicado
Declaración de la Embajada de Estados Unidos
La Embajada de Estados Unidos reafirma la fuerte amistad y alianza entre Colombia y Estados Unidos. Hemos apoyado al gobierno y al pueblo colombiano en tiempos de guerra, y continuaremos apoyándolos en tiempos de paz.
Bajo la ley de Estados Unidos, los expedientes de visas son confidenciales. No comentamos sobre casos de visas individuales. El Departamento de Estado tiene amplia autoridad para revocar visas basándose en información, que salga a la luz en cualquier momento, que indique que el titular de la visa puede ser inadmisible en Estados Unidos, o no cumpla con los requisitos de visa. Todas las decisiones con respecto a la elegibilidad para una visa se basan en las leyes y regulaciones de Estados Unidos.
Estados Unidos y Colombia tienen una larga historia de diálogos abiertos y sinceros.Nuestra misión diplomática es representar los intereses de Estados Unidos ante los interlocutores colombianos. Al hacerlo, reconocemos, valoramos y respetamos la soberanía de Colombia y lo esencial de sus instituciones democráticas.Valoramos especialmente la relación que hemos construido durante tres décadas con los valientes hombres y mujeres de la rama judicial colombiana, que trabajan incansablemente y con integridad para garantizar el estado de derecho. Nuestra cooperación judicial ha dado resultados concretos a ambas naciones. Apreciamos nuestro diálogo continuo.