NACIÓN
En Cali, intensificarán controles a la rumba debido al aumento de casos de la covid-19
En las últimas horas entró en vigencia el decreto que establece que el horario de los establecimientos nocturnos será hasta las 3:00 a. m.
Debido al aumento de casos activos de la covid-19, desde este viernes 7 de enero y hasta el 31 del mismo mes, regirán varias modificaciones al horario de la rumba en Cali.
Como informó la alcaldía, el horario para los establecimientos de comercio que ejerzan la actividad de expendio de bebidas alcohólicas para consumo dentro del lugar (bares, gastrobares, billares y carpas de eventos, entre otros), será desde las 10:00 a. m. hasta las 3:00 a. m.
A su vez, según lo consignado por la administración de Jorge Iván Ospina en el decreto 0006 de 2022, los comercios cuya actividad sea la venta de bebidas alcohólicas como estancos, licoreras y cigarrerías, deberán cerrar sus puertas antes de la 1:00 a. m.
En cuanto al aforo de los establecimientos, se dispuso que no se podrá exceder el 50 % de la capacidad normal de los diferentes lugares, con el objetivo de garantizar el distanciamiento entre mesas y evitar la propagación del coronavirus. Igualmente, continúa la exigencia del carné de vacunación o certificado digital para el ingreso.
La Secretaría de Seguridad verificará que las acciones se cumplan, según señaló el secretario Carlos Soler, quien manifestó que serán inflexibles con lo establecido. “Voy a estar verificando todos los lugares personalmente, con Policía, inspectores móviles del Código de Policía y seremos inflexibles con los cierres”, dijo el funcionario en declaraciones recogidas por Blu Radio.
MinEducación negó solicitud para aplazar la presencialidad en colegios privados de Cali
Tras la petición del alcalde de Santiago de Cali, Jorge Iván Ospina, de aplazar el retorno a clases de los estudiantes de colegios privados en la ciudad al Ministerio de Educación, la cartera respondió al mandatario local negando la solicitud y recalcando la necesidad de la presencialidad en las aulas para los menores.
Ospina había pedido al ministerio que no se retornara a los colegios privados de calendario B hasta el 31 de enero, esto, luego de un considerable aumento de contagios de la covid-19 en la capital del Valle del Cauca, las cuales estarían respondiendo a las fiestas regionales por la feria de Cali y otros festivales, además de las celebraciones por el fin de año.
“Nuestra ciudad tiene un modelo educativo distinto al del resto del país. Nuestros colegios privados fundamentalmente tienen calendario B, y ese calendario iniciaría las clases este 12 de enero. Hemos solicitado al Ministerio de Educación que posibilite recomendarle a los colegios privados que aplacen el inicio presencial de clases dos semanas”, fue la petición del alcalde, Jorge Iván Ospina.
Sin embargo, este viernes 7 de enero, la Secretaría de Educación de Cali informó que esto no podría ser posible, ya que luego de revisar la petición con el Ministerio de Educación, este ratificó que los colegios privados, incluso los que tiene calendario B, deberían comenzar las clases presenciales lo antes posible y sin límites de aforo; todo esto argumentado con la resolución 2157 de 2021.
“El Ministerio dice que necesitamos regresar a la presencialidad plena y que va a ser muy importante el rigor en todos los elementos de bioseguridad, las condiciones completas de aseo y desinfección”, fueron las palabras del secretario de Educación de la ciudad, José Darwin Lennis, recalcando la necesidad de seguir las normas de bioseguridad para no aumentar los contagios tanto en la población menor de edad, como en las familias de estos.
Según indicó la cartera, “el retorno a la presencialidad en el sistema educativo, más allá de ser una orientación y decisión del Gobierno nacional, es una causa que nos une como colombianos en coherencia con el principio constitucional de la prevalencia de los derechos de los niños y requiere del concurso y concurrencia de todos los actores involucrados de alguna manera en este gran propósito nacional”, resaltando la importancia del retorno a clases para los menores como la protección de su derecho a la educación.