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En exclusivo sector de Cúcuta capturan hijo de poderoso terrorista de Hezbolá; financiaba grupo paramilitar deforestando a Colombia
Mahdy Akil Helbawy, alias “Turco”, ordenó la tala de 32 mil árboles para producir carbón vegetal que exportaba al Líbano, Israel, Kuwait y Emiratos Árabes.
En medio de un sigiloso operativo que adelantó la Dijin de la Policía fue capturado Mahdy Akil Helbawi, alias Turco, el hijo de Amer Mohamed Akil Rada, el poderoso terrorista que participó en el atentado a la Asociación Mutual Israelista Argentina (Amia), que dejó casi 100 muertos y más de 500 personas heridas en julio de 1994.
Alias El Turco resultó ser un ciudadano colombiano nacido en Maicao, La Guajira, que ahora estaba dándose buena vida en un exclusivo sector de Cúcuta, en Norte de Santander, a través de las actividades criminales con las que terminó financiando a Hezbolá, el grupo terrorista del que su papá es pieza clave.
El hombre, de 36 años, según la Dijin era el administrador de una sociedad comercial de exportaciones de carbón vegetal, que terminó deforestando de manera estrepitosa a Colombia, todo para obtener dinero que le permitiera seguir con su estilo de vida y de paso financiar al grupo paramilitar.
En un exclusivo sector de Cúcuta fue capturado el hijo de poderoso terrorista de Hezbolá que financió al grupo deforestando a Colombia. Alias "El Turco" ordenó la tala de 32 mil árboles para exportar carbón. Obtuvo más de $6.000 millones en ingresos. https://t.co/if1kX8q65f pic.twitter.com/T9g8Zchq63
— Revista Semana (@RevistaSemana) August 11, 2024
El coronel Edwin Urrego, director de Investigación Criminal e Interpol aseguró que El Turco “habría creado una empresa en el 2015, a través de la cual se exportaron más de 2.450 toneladas de carbón vegetal hacia el Oriente Medio. A través de esas operaciones, se habrían lavado más de 5.400 millones de pesos”.
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Las exportaciones las hizo a través de una sociedad comercial identificada como Zanga S.A.S, la cual terminó siendo una empresa de papel con la que vendió y exportó carbón vegetal a diferentes países de Oriente Medio. Pero, además, utilizó documentos falsos para darle la apariencia de legalidad a sus actividades comerciales.
De hecho, el Instituto de Operaciones Especiales de Inteligencia de Israel, Mosad, destacó el resultado en su cuenta de X, indicando que “la Policía colombiana arrestó a Mehdi Akil, uno de los financiadores de la organización terrorista Hezbolá”.
Colombian police arrested Mehdi Akil, one of the financiers of the terrorist organization Hezbollah pic.twitter.com/5hngvMOgnI
— Mossad Commentary (@MOSSADil) August 11, 2024
Las investigaciones de la Policía, que arrancaron en el 2021, también permitieron revelar que El Turco habría obtenido varias cuentas bancarias para que sus operaciones ilegales terminaran con los beneficios tributarios que otorga Colombia a quienes exportan. Así logró retirar en efectivo miles de millones de pesos con los que se terminó enriqueciendo con la actividad criminal.
El director de la Dijin también confirmó que tanto Akil como su papá “y la empresa en mención se encuentran incluidos en la lista OFAD. Este sujeto ha sido puesto a disposición de la Fiscalía General de la Nación por los delitos de aprovechamiento ilícito de los recursos naturales renovables, lavado de activos agravado, enriquecimiento ilícito de particulares y uso de documento falso”.
El modus operandí de Mahdy Akil Helbawy dejó una deforestación enorme en Colombia con la tala de más de 32 mil árboles de Guayacán, que después eran quemados para producir el carbón que terminaba en el Líbano y en otros países. Así dejó graves afectaciones en decenas de hectáreas de bosques nativos de La Guajira, el departamento que lo vio nacer.
“Restaurar el ecocidio llevado a cabo por esta persona podría tomar de 30 a 50 años, un prolongado periodo de recuperación que subraya la gravedad del impacto ambiental”, informó la Policía en un comunicado.
Amer Mohamed Akil, el papá de El Turco, ha sido sancionado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos como uno de los agentes operativos financieros de Hezbolá y también se tienen serios indicios de estar vinculado con el ataque contra la Embajada de Israel en Argentina en el año 1992.