POÍTICA

En lo que algunas cabezas de lista al Concejo de Bogotá se pusieron de acuerdo

El candidato al concejo de Bogotá por la Alianza Verde, Diego Cancino, invitó a cinco contendores de Cambio Radical, Bogotá para la gente, Centro Democrático, Colombia Humana y Farc para llegar a acuerdos en asuntos mínimos sobre Bogotá.

1 de octubre de 2019
De izquierda a derecha: Jorge Rojas, María Andrea Nieto, Diego Cancino, Marisol Gómez, Ana Teresa Bernal y Andrés Forero. | Foto: Esteban Vega

El candidato Diego Cancino, de la Alianza Verde, convocó a Marisol Gómez (Bogotá para la gente), María Andrea Nieto (Cambio Radical), Ana Teresa Bernal (Colombia Humana), Jorge Rojas (FARC) y Andrés Forero (Centro Democrático) para ponerse de acuerdo en unos mínimos para trabajar juntos por el futuro de Bogotá. 

El encuentro tuvo lugar en la calle 72 con 11. En el andén había tres sofás blancos y a eso de las 5:30 de la tarde empezó la conversación. Cancino comenzó agradeciendo a los candidatos su asistencia y elogió las cualidades de cada uno de sus contendores. Dijo que a Andrés Forero le envidiaba el rigor con el que ha trabajado en el Concejo de Bogotá. De Ana Teresa aseguró que le admiraba su trabajo por las víctimas y los derechos humanos. A Marisol le reconoció “su valentía para comunicar en medio de esta guerra con claridad y un talante moral y político admirable”.  De María Andrea dijo que sus denuncias como directora del Sena había sido muy importante. Y también dijo que envidiaba a Jorge Rojas por haber fundado Codex. 

Jorge Rojas lo interrumpió: “Diego es un gran filósofo y nos invitó al rededor de una palabra que está muy desgastada que es la confianza. Llegamos acá sin saber qué íbamos a hacer y esa es una muestra de confianza y del liderazgo que tiene Diego”.

Cancino prosiguió para aclarar de qué se trataba la reunión: “Hay tres ideas fundamentales: quisiera que diéramos un mensaje dejar de lado el codazo va y el codazo viene en lo que queda de la campaña. La segunda arista es que Bogotá merece una visión compartida y la apuesta es poder construir al menos en lo mínimo esa visión compartida”. Por último, el cabeza de lista de la Alianza Verde dijo que los citó en una sala en la calle, porque es en la sala donde se dan las grandes discusiones y porque es en la sala en donde hay un ambiente de confianza. “Ojalá los bogotanos se pudieran sentir así en las calles de la ciudad”. 

Para empezar sobre esas cosas en las que se pueden poner de acuerdo, Marisol dijo que no había “nada más patético” que hablar mal del contrincante. Por eso propone que en lo que queda de campaña ninguno hable mal del otro, ni de los otros partidos. María Andrea aseguró que le parecía una buena idea. Sin embargo, recalcó que el debate público es muy importante y que cuestionarse y preguntarse de una forma respetuosa también era importante. Agregó que la mejor forma para no recibir esos “codazos” era “no tener rabo de paja” y de lo contrario consideraba necesario responder ante los cuestionamientos de los demás. Ana Teresa, por su parte, consideró que el respeto no se podía quedar solo en la campaña, sino en lo que vendría si llegaban al Concejo de Bogotá. 

Andrés Forero recordó que los candidatos a la Alcaldía de Bogotá ya habían hecho un pacto de respeto, pero hasta ahora no lo habían cumplido. Aseguró que en lo corrido de esta carrera política se había dado cuenta en los debates de que todos estaban de acuerdo con los fines, pero no tanto en los medios. Invitó a “no asumir las malas intenciones” en el otro por el partido o el piso ideológico desde donde estaba parado: “Fuerte con las ideas, suave con las personas”. Justo minutos después pasó uno ciudadano y lo insultó unicamente por ser del Centro Democrático. 

Jorge Rojas lamentó que este ejercicio no se pudiera hacer en otras partes del país como Tubú o Tierra Alta (Córdoba) por las situaciones de violencia que se han presentado en esos lugares en el marco de esta campaña electoral. Aseguró que por supuesto estaba de acuerdo en debatir con argumentos y no con agresiones, pues su ejercicio debe ser “ un ejemplo de reconciliación”. 

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Cancino se sumó a ese compromiso de respeto y luego les pidió a los candidatos que pusieran sobre la mesa alguna propuesta con la que consideran que todos deberían estar de acuerdo para que todos los presentes se unieran para luchar por ella. María Andrea propuso erradicar por completo la violencia contra los niños pues “hoy Colombia sigue siendo el tercer peor lugar en el mundo para nacer”. Para la candidata de Cambio Radical es en la casa donde se ven las primeras violencias, los primeros abusos de poder y los malos ejemplos. Y si se lograba criar a buenas personas, un mejor futuro estaba garantizado. 

Marisol Gómez propuso el #RentaChallenge. Se trata de un reto para que todos los candidatos presentes o no publicaran sus declaraciones de renta y de patrimonio como un gesto de transparencia. También propuso que los candidatos que no tuvieran problemas de seguridad cedieran a la ciudad los dos policias que se les asignan por ser concejales. Así mismo aprovechó para hacer un reconocimiento a Jorge Rojas: “Jorge quiero reconocer que en esta campaña tú has tenido el gesto máximo de reconciliación al decidir ser cabeza de lista del partido Farc, no de las Farc, sino del partido que decidió dejar las armas. Admiro ese gesto y quiero aprovechar para decir que en esa lista de la FARC hay una víctima y un militar, lo cual es una muestra muy grande de reconciliación”. 

Uno de los temas sobre los que no se pudieron poner de acuerdo fue el POT. Para candidatos como Ana Teresa Bernal y Jorge Rojas este plan de ordenamiento territorial, que será la hoja de ruta sobre cómo y dónde se puede construir en Bogotá en los próximos 12 años, atenta contra la estructura ecológica de la ciudad. Sin embargo, María Andrea Nieto, Marisol Gómez y Andrés Forero aseguraron que no se les podía exigir a los concejales que no votaran el proyecto cuando era precisamente una de sus funciones. De hecho, para Forero, quien hace parte de la comisión que estudia el POT en el Concejo, el POT de Peñalosa es una buena propuesta que protege las reservas, los cerros y en general el ambiente de Bogotá. Así que finalmente se unieron para hacer un llamado a los concejales para que votaran sobre el proyecto ya sea negativo o positivo pero que cumplieran con su tarea. También estuvieron de acuerdo en hacer un llamado al alcalde para que en caso de que el proyecto se hunda porque no hay quórum en el cabildo no lo saque adelante a través de decreto, sino que espere a la siguiente legislatura. 

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Ana Teresa aprovechó para retomar el tema de la seguridad y denunció que ella es una de las que necesita seguridad por su trabajo como defensora de víctimas y que hasta ahora el Estado no le ha respondido y anotó que lo mismo pasaba con Jorge Rojas. 

También se propuso que no se admitiera la violencia en el ejercicio de la política. Sobre eso Ana Teresa dijo que rechazaba los actos de vandalismo que se vieron en medio de las protestas estudiantiles, pero propuso también trabajar para que el Esmad dejara de atacar con tanta violencia la protesta social, como se vio en los últimos días. También aseguró que era importante ponerle atención al tema de la corrupción, empezando por lo que está sucediendo en la Universidad Distrital: “Con esos miles de millones que se robaron se hubiesen podido educar a muchas otros jóvenes”. Todos estuvieron de acuerdo. 

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Un último aspecto sobre el que los cabezas de lista al concejo coincidieron fue en trabajar en la cultura ciudadana porque consideran que todos los problemas de Bogotá están atravesados precisamente por la falta de cultura ciudadana. 

El evento se terminó cerca de las 7 de la noche cuando algunas decenas de los estudiantes de la Universidad Pedagógica salieron con unas velas para manifestarse en contra de las acciones del Esmad. 

Jorge Rojas les entregó una rosa a cada candidato e hizo un llamado para que desde Bogotá todos trabajaran por sacar adelante el proceso de paz. Todos recibieron la flor. 

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