Nación
Encienden las alertas por aumento de trabajo infantil en Cali; esto advierte la Procuraduría
El ministerio público envió una comunicación al alcalde de la ciudad, a la gobernadora del Valle y autoridades del ICBF. La situación es preocupante.
En desarrollo de una acción preventiva, la Procuraduría General de la Nación pidió conocer de manera urgente las acciones adelantadas para contrarrestar el incremento en las cifras de niñas, niños y adolescentes que trabajan o son explotados en el perímetro de la ciudad de Cali y en los sectores rurales del departamento del Valle del Cauca.
En comunicación enviada al alcalde de Cali, la gobernadora del Valle, el director seccional del ICBF y la jefe de Infancia y Adolescencia de la Policía Metropolitana de Cali, la Regional de Instrucción del departamento pidió un informe en el que se detallen las actuaciones tomadas por cada ente para prevenir y atender la problemática.
Y es que el tema, en muchas ciudades de Colombia, es un fenómeno que no solo afecta la salud física y mental de los menores de edad, sino que le pone una talanquera a sus posibilidades de desarrollo individual para intentar salir de la pobreza. Muchas veces, obligados con amenazas y con presiones por parte de familiares, lo cual agudiza la situación.
La Procuraduría, en este nuevo pronunciamiento, recalcó la importancia de atender de manera oportuna el requerimiento, para que una vez se conozcan los resultados sea posible articular un trabajo institucional que permita encontrar mecanismos eficientes de atención.
La situación actual, que también ha sido denunciada por los medios de comunicación locales, es uno de los ejes sobre los que la Procuraduría viene trabajando en todo el territorio nacional, consciente de la importancia de garantizar los derechos fundamentales de la población infantil.
Según cifras de mediados de 2022, si bien entre 2018 y 2021 salieron 260.000 niños de la condición de trabajo infantil, aún quedan 507.846, incluyendo adolescentes.
¿Qué ha pasado en Colombia?
Según las cifras entregadas en junio de 2022, por el Ministerio de Trabajo, la disminución de la tasa de trabajo infantil en el país, en tres años, ha sido de 1,3 %.
La tasa de trabajo infantil en el total nacional era de 6,1 % en 2018, según una medición del Dane, mientras que en el cuarto trimestre de 2021 se vio la reducción, pues la tasa está en 4,8 %.
Las acciones en Colombia para tratar de reducir este panorama, que en muchas ocasiones está ligado a la pobreza, son principalmente educativas. Las familias vulnerables, en medio de las dificultades económicas, eligen poner a trabajar a los menores para que contribuyan a la generación de ingresos del hogar. El problema es que, de esa manera, lo que se logra es continuar los círculos de pobreza, pues el niño y adolescente pierde la oportunidad de tener una educación que lo saque de la condición.
Uno de los casos más dramáticos en el trabajo infantil está en el campo, donde está la concentración del problema. Según el reciente reporte del Dane, 231.000 de los más de 500.000 casos se registran en las áreas rurales.
La situación en Bogotá: el caso de Corabastos
Cabe recordar que, por ejemplo, en el caso de Bogotá, en 2022 se firmó con Corabastos un pacto con siete compromisos para prevenir y erradicar el trabajo infantil.
El pacto fija compromisos para que la Central de Abastos - Corabastos, genere estrategias articuladas que permitan identificar situaciones que pongan en riesgo la integridad de las niñas, niños y adolescentes.
Desde junio, se había venido trabajando con más de 1.500 niños, niñas y adolescentes del país en procesos de transformación cultural con el fin de minimizar los riesgos y evitar el trabajo infantil.
Compromisos
Promover una cultura de cero tolerancia con el trabajo infantil. Para tal efecto, Corabastos desarrollará estrategias de sensibilización para generar un cambio cultural que garantice que ninguna niña, niño o adolescente se encuentre trabajando; y contará con la asistencia técnica del Ministerio del Trabajo, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y demás entidades Distritales, departamentales y nacionales competentes.
En segundo lugar, Corabastos generará estrategias para prevenir, visibilizar, identificar y reportar casos de trabajo infantil y otras situaciones de violencia contra niñas, niños y adolescentes, y promover las garantías del trabajo adolescente protegido dentro de la Central de Abastos, en un escenario que permita la articulación interinstitucional e intersectorial con los actores responsables.
Además, la central mayorista realizará un autodiagnóstico para identificar los riesgos de trabajo infantil en el contexto de sus dinámicas económicas e institucionales, así como en las relaciones con proveedores y usuarios, en aras de desarrollar estrategias pedagógicas, en cuanto a los derechos de la infancia y la erradicación del trabajo infantil.
Por último, entre los compromisos asumidos por Corabastos, está implementar esfuerzos con los demás agentes del Sistema Nacional de Bienestar Familiar (sector educación, Policía de Infancia y Adolescencia, Ministerio del Deporte, ICBF, entre otros), para lograr sinergias en torno a la eliminación del trabajo infantil y propender por entornos protectores dentro de sus instalaciones.