Enfrentamientos entre grupos armados ilegales dejan seis muertos en Tumaco, Nariño

Las autoridades del departamento de Nariño confirmaron que seis personas murieron tras enfrentamientos entre grupos ilegales que se registraron el pasado martes en la vereda Sabaleta, jurisdicción del municipio de Tumaco.

Según informó el secretario de Gobierno de Nariño, Francisco Cerón, los cuerpos de los fallecidos fueron hallados en un cementario de la localidad.

De acuerdo con el funcionario, los enfrentamientos se produjeron entre el grupo armado residual Oliver Sinisterra, disidente de las Farc, y el grupo armado Los Contadores, que se disputan de las rutas del narcotráfico en esta zona del país.

Las víctimas, según lo informado, pertenecerían al grupo Los Contadores. El secretario de Gobierno señaló que la población indígena de la zona se encuentra confinada tras los fuertes combates que se han registrado en los últimos días.

Crisis humanitaria

El funcionario también reportó un nuevo desplazamiento masivo en el municipio de Roberto Payán. Se trata de 142 familias que salieron del sector Laguna de Piría hacia la cabecera de la localidad por fuertes enfrentamientos entre grupos ilegales.

A mediados de julio, el gobernador de Nariño, Jhon Rojas, señaló que los desplazamientos en esta localidad son constantes desde hace más de un año. Según manifestó, solo en 2020 se registraron 11 desplazamientos masivos y en lo corrido de este año van nueve, lo que ha generado una ola de múltiples problemas socioeconómicos que afecta a más de 2.700 familias.

De acuerdo con el gobierno departamental, en total son 7.000 personas que no tienen dónde vivir y sobreviven de la solidaridad del gobierno departamental, pero los recursos son insuficientes, y a eso se suma la complejidad para llegar al terreno con las ayudas humanitarias.

Entre los afectados, más de 2.600 son niños y adolescentes. Además, 3.186 son mujeres. Muchos de los desplazamientos también se han dado hacia los municipios de Barbacoas, Tumaco y Olaya Herrera. “Estas cifras reflejan la realidad del Pacífico nariñense, donde el conflicto no ha cesado, donde se necesita con urgencia una atención integral del Estado y de todas las instituciones para reconstruir el tejido social y generar oportunidades para las comunidades”, señaló el gobernador Rojas.

De la misma forma, les hizo un llamado a los organismos internacionales y a las entidades no gubernamentales para que sean garantes de derechos humanos, debido a que la crisis está desbordando la capacidad de atención local y regional.

Los desplazamientos de miles de familias se están dando por intereses particulares de grupos al margen de la ley que se disputan el control territorial y la economía ilícita que hay alrededor de él. Solo en Nariño existen más de 15 actores criminales.

El gobernador hizo un llamado al Ministerio de Defensa para que se presenten resultados efectivos en la lucha contra el crimen organizado, para así mitigar los hechos violentos que están generando los masivos desplazamientos. Para el mandatario, no solo con fuerza se logra recuperar los territorios que han arrebatado las disidencias de las FARC y otras organizaciones. “Es necesaria la inversión social e integral para lograr una presencia efectiva del Estado, y un desarrollo que llegue a estas regiones a brindar condiciones mínimas de garantías de derechos y empecemos a quitarle terreno al conflicto”, dijo Rojas.