Judicial
Escalofriantes detalles de la forma como proxeneta secuestró y entregó a menor para que el exparamilitar Hernán Giraldo Serna la abusara
María Dirmedy Valencia habría torturado y mantenido secuestrada a la menor de edad, mientras el entonces cabecilla del Bloque Resistencia Tayrona la sometía sexualmente.
En un importante avance en la lucha contra la explotación y abuso sexual de menores de edad, la Fiscalía General de la Nación, a través de los funcionarios del CTI, logró la captura en Rionegro, Antioquia, de María Dirmedy Valencia Serna. La mujer es señalada de haber captado, custodiado y trasladado a una niña de 11 años que fue víctima de abuso sexual por parte del exjefe paramilitar Hernán Giraldo Serna, conocido también como alias El Viejo, El Señor de la Sierra o Taladro.
Los elementos de prueba reunidos en la investigación indican que Valencia Serna, presuntamente, se valió de la presencia constante de la menor en una tienda de su propiedad para persuadirla y finalmente retenerla. Las autoridades sostienen que la víctima fue sometida a condiciones y tratos degradantes, además de haber sido torturada y forzada a acudir a las fincas donde Giraldo Serna se ocultaba, siendo sometida a abuso en múltiples ocasiones.
El secuestro de la víctima habría tenido lugar el 3 de febrero de 2006, en la vereda Machete Pelado, ubicada en la zona conocida como Casa Verde, en la Sierra Nevada de Santa Marta, Magdalena. Según los resultados de la investigación, la niña estuvo bajo la custodia de María Dirmedy Valencia Serna durante algunas semanas, tras lo cual fue transferida a otras personas que continuaron su explotación sexual. Posteriormente, la menor fue llevada a centros carcelarios donde Hernán Giraldo Serna, exlíder del Bloque Resistencia Tayrona de las extintas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), cumplía su detención antes de su extradición en mayo de 2008.
Por los hechos descritos, una fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos formalmente vinculó a Valencia Serna a los delitos de trata de personas, explotación sexual, secuestro simple, tortura y acceso carnal abusivo agravado en perjuicio de una menor de 14 años. El proceso legal continúa siguiendo los parámetros establecidos en la Ley 600 de 2000, que regía el anterior sistema penal.
La captura de María Dirmedy Valencia Serna se llevó a cabo con el propósito de que rinda indagatoria. En los próximos días, se espera que se resuelva la situación jurídica de la investigada, marcando un paso significativo en la búsqueda de justicia para la víctima y el enjuiciamiento de quienes estén involucrados en estos graves delitos.
Hernán Giraldo, “el depredador de menores”, fue expulsado de Justicia y Paz
Hernán Giraldo Serna fue expulsado de la Ley de Justicia y Paz. Tras atender una petición de la Fiscalía General y las víctimas del excomandante del Bloque Resistencia Tayrona, la Sala Penal del Tribunal Superior de Barranquilla determinó que el excomandante paramilitar continuó incurriendo en delitos tras su desmovilización.
En el fallo, que fue comunicado en audiencia pública, se concluyó que El Patrón, desde su lugar de reclusión, continuó ejecutando crímenes de tipo sexual contra cuatro menores de edad. La evidencia es clara, contundente y precisa cuando señala que una emisaria del excomandante paramilitar trasladó a estas menores hasta las cárceles de Barranquilla y Antioquia, donde se encontraba recluido Giraldo Serna entre los años de 2007 y 2008, para que sostuvieran relaciones sexuales con él.
En la decisión se resalta que no cabe duda alguna “de la especial relevancia y prevalencia que adquieren los derechos de las víctimas de violencia basada en género, acaecida dentro del conflicto armado, por el impacto grave y desproporcionado que causa la revictimización a través del delito sexual”. Giraldo Serna, quien se encuentra en la cárcel de La Paz, en Itagüí, Antioquia, podrá presentar recurso de apelación que deberá ser resuelto por la Corte Suprema de Justicia.
Con esta decisión, se cae la condena alternativa de ocho años de prisión que en el año 2019 le impuso la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá por los delitos de violencia de género, desaparición forzada, reclutamiento ilícito de menores, homicidios, torturas, secuestro, trata de personas, prostitución agravada y financiación de conductas ilícitas.
En dicha decisión, la Sala encontró que durante 26 años el grupo comandando por Giraldo Serna sembró el terror en la población civil del Magdalena. Las conductas ilegales de El Patrón estuvieron relacionadas con el abuso sexual sistemático de menores de edad.
“Se creyó con el derecho de poder decidir sobre el destino de los menores y niñas de la región”, advirtió el fallo. En este sentido se señaló que, teniendo en cuenta elementos materiales probatorios, los padres se veían amenazados y presionados por los hombres de Giraldo Sierra para “entregar a sus hijas”, por lo que se trasladaban hasta las fincas del jefe paramilitar.
“Debían acatar sin oposición alguna la orden encaminada a satisfacer sus deseos libidinosos, materializado de manera cruel sobre sus hijos menores”. Con testimonios que demostraban el horror, la Sala de Justicia y Paz no dudó en calificarlo como un “depredador sexual” que durante años “enfocó sus deseos morbosos y enfermos en niños, para él la infancia no existe”.