Nación
Esta fue la condena al hombre que asesinó y enterró en una pared de su propia casa a un profesor ballet
La Fiscalía logró un acuerdo con el ahora confeso asesino de un profesor en Cajicá. La víctima fue enterrada en su propia casa.
La macabra historia que dejó como víctima a Gamaliel Enrique Álvarez, un profesor de ballet en el municipio de Cajicá, Cundinamarca, al norte de Bogotá, cerró, quizá, su capítulo más importante. El señalado responsable aceptó que mató y luego incineró el cuerpo del docente. Un juez lo condenó a 24 años de cárcel.
Orlando Alberto Rojas Bedoya, alias Pecas, fue capturado por la Fiscalía tras una larga investigación que permitió conocer los detalles del crimen, de cómo asesinó al docente, incineró el cuerpo y trató de ocultarlo en una especie de bóveda que construyó en una pared y en la casa de la propia víctima.
“La Fiscalía General seccional Cundinamarca logró que Orlando Alberto Rojas Bedoya, alias Pecas, aceptara ser el autor material del crimen del profesor de ballet y matemáticas Gamaliel Enrique Álvarez García, y, en consecuencia, se profiera en su contra una condena a 24 años de prisión”, señaló la Fiscalía.
Alias Pecas firmó un acuerdo con la Fiscalía que le dejó una sustancial rebaja de la pena. Aún con la gravedad y brutalidad del crimen, el ahora confeso asesino pagará 24 años de cárcel como resultado de la negociación. De aceptar cargos y ahorrarle tiempo a la justicia.
“Con fundamento en el abundante material probatorio, el Juez Primero Penal del Circuito de Conocimiento de Zipaquirá, avaló el allanamiento a cargos por los delitos de homicidio agravado; ocultamiento, alteración, y destrucción de material probatorio; hurto calificado; falsedad material en documento público; falsedad en documento privado, y fraude procesal”, dijo el ente acusador luego de conocer el monto de la pena.
La Fiscalía logró demostrar cómo alias Pecas asesinó al profesor el 27 de septiembre de 2021 y trató de desviar la atención de los investigadores, mientras lavó la escena del crimen y construyó, él mismo, la improvisada sepultura en la casa de la víctima.
“La evidencia recaudada permitió establecer que, una vez cometido el homicidio, el confeso agresor procedió a lavar y limpiar la sangre del baño de la vivienda, con el fin de alterar la escena del crimen para ocultar lo sucedido. Las pruebas indicaron, además, que Rojas Bedoya incineró el cuerpo del profesor para desaparecer la evidencia. El dictamen forense practicado a la víctima da cuenta de quemaduras en el 29% del cuerpo”, explicó la Fiscalía.
La vicefiscal Martha Mancera aseguró que el hombre, alias Pecas, el confeso asesino, hurto las pertenencias del profesor y hasta vendió una motociclista que tenía el docente en 10 millones de pesos. Toda la evidencia apuntó al asesino y ahora con el acuerdo, se resuelve el brutal asesinato.
“Días después del homicidio, los vecinos alertaron a la policía de los fétidos olores que emanaban de la vivienda, lo que permitió hallar el cuerpo del profesor en una bóveda construida para ocultar el cadáver”, advirtió la vicefiscal Mancera.
No cabe duda en la responsabilidad del asesino, incluso de las actividades posteriores al crimen, no sólo el asesinato del profesor y la venta de la motocicleta, también de los gastos con las tarjetas de crédito del docente en establecimientos de comercio. Pruebas también de la barbarie.
“La contundencia de los elementos materiales de prueba, tales como, la ubicación física del autor del crimen el día que fue cometido el asesinato, el uso de tarjetas débito en establecimientos de comercio posteriores al homicidio de la víctima, huellas digitales y el cotejo de muestras de restos biológicos, establecieron la autoría de Rojas Bedoya en este delito”, señaló el ente acusador.
La audiencia con la lectura de fallo, que confirme la condena de 24 años de cárcel contra alias Pecas, se realizará el próximo 6 de diciembre ante un juez de Zipaquirá, Cundinamarca.