“Están en condiciones físicas y mentales aceptables”: el parte oficial sobre la salud de los cuatro niños rescatados de la selva

Júbilo es el sentimiento del país luego de que se conociera la noticia, el pasado viernes, del rescate tras 40 días perdidos en la selva, de los cuatro menores sobrevivientes al accidente de una avioneta en la selva del Caquetá el pasado 1.° de mayo, y una gran expectativa fue la generada sobre el estado físico y mental de los menores tras ser sacados de la zona.

Precisamente, este sábado, desde el Hospital Militar, en Bogotá, sitio al que fueron trasladados los menores desde la noche del pasado 9 de junio, SEMANA dialogó con el general Carlos Rincón, vocero médico de las Fuerzas Militares, quien entregó un parte positivo tras la primera valoración de los menores de origen indígena.

“Están en condiciones físicas y mentalmente aceptables”, explicó el uniformado en diálogo con este medio, confirmando que pudo tener un breve contacto con ellos, evidenciando de primera mano que están muy animados, inquietos y con ganas de hablar.

Según el general Rincón, los menores fueron sometidos, a su llegada a Bogotá, a una serie de exámenes de rigor para constatar el estado de salud con el que salieron de la selva, con miras también a comenzar los correspondientes tratamientos para su recuperación física y nutricional, debido a las fuertes condiciones a las que se vieron abocados durante al menos 40 días de permanencia en la selva.

El general Rincón también destacó el rol que habría jugado Lesly, la mayor de los 4 menores rescatados, en el proceso de supervivencia de los demás menores, acusando que de momento no tuvo la oportunidad de ahondar en las historias que ella tenga que compartir sobre sus vivencias en la selva, y detalles como los alimentos que les permitieron conseguir el ‘milagro’ de la supervivencia.

Actualmente, los menores se encuentran en manos del equipo de pediatría multidisciplinar del Hospital Militar Central en Bogotá, precisó el general Rincón, quien detalló que tras una primera valoración, los menores actualmente se encuentran en un proceso “de completar un protocolo de exámenes paraclínicos y de imágenes diagnósticas”.

En ese sentido, el vocero de las Fuerzas Militares también detalló que superada esta etapa se comenzará el proceso de “recuperación nutricional y la terapia psicológica y familiar que es muy importante”.

El uniformado confirmó que pudo constatar que los menores en efecto “están un poco afectados desde el punto de vista nutricional”, apuntando que el proceso de recuperación “llevará algunas semanas y se llevará a cabo con apoyo del ICBF y la familia”.

En cuanto a su valoración psicológica, Rincón añadió que “los vi bien pese a haber llegado a un ambiente extraño y ser sometidos a una valoración médica”.

“Vi a los tres mayorcitos muy conectados, con muchos deseos de hablar y, sobre todo, con el deseo de comenzar nuevamente a comer y de comunicarse con la familia”, añadió.

El rescate de los cuatro menores, la mayor de ellos de 14 años y el menor de apenas un año, se logró tras 40 días de acuciosas labores de búsqueda por parte de 150 miembros del Ejército Nacional que se internaron en la selva, en compañía también de integrantes de comunidades indígenas y rescatistas de la Defensa Civil para agotar la búsqueda de los infantes.

En el proceso, la detección de huellas, restos de comida y algunos elementos personales como un biberón, sembraron y mantuvieron viva la esperanza de encontrarlos vivos, una noticia que finalmente se confirmó el pasado 9 de junio en horas de la tarde por parte de las autoridades nacionales.

Sobre los uniformados que se internaron en la selva para la búsqueda, se espera que próximamente sean reconocidos y condecorados.

De momento, al menos 30 de ellos continúan internados en la selva, en búsqueda de ‘Wilson’, uno los perros que hizo parte de la labor de rescate, quien se separó el grupo, y se encuentra perdido en la selva.