Estas son las razones de los veteranos y las reservas para marchar este 19 de julio: “Respaldo a la democracia y a las instituciones”

El miércoles 19 de julio militares de la reserva, veteranos, víctimas y pensionados de la Fuerza Pública saldrán a marchar en distintas calles de varias ciudades en Colombia. Las movilizaciones fueron convocadas por el Foro Ampliado de Reserva Organizada (Faro) y se han venido sumando algunos sectores de la oposición.

En la ciudad de Bogotá, el punto principal de concentración será la Plaza de Bolívar a las 11:00 de la mañana, hora en la que se espera una gran afluencia de personas.

”Nos damos cita nuevamente en la Plaza de Bolívar para alzar nuestra voz en respaldo irrestricto de la democracia y a las instituciones que están en peligro en estos aciagos momentos por lo que atraviesa la patria”, señalaron los convocantes.

¿Por qué van a marchar?

De acuerdo con las proclamas dadas a conocer por las reservas y los veteranos de la Fuerza Pública, estas movilizaciones no tienen “carácter político”, sino que buscan expresar las preocupaciones frente a las problemáticas que atraviesa Colombia.

En primer lugar, los convocantes señalan que creen firmemente en la separación de poderes y en la importancia de realizar ciertas reformas necesarias para el bien de todos los colombianos, especialmente de los menos favorecidos. Sin embargo, enfatizan que dentro de este proceso se debe respetar el marco democrático.

“Los cambios no pueden ser ni caprichos ni impositivos y violentos (...) Hacemos un llamado al Gobierno para que acepte las decisiones que se tomen en la nueva legislatura y no se recurra a indebidos acuerdos transaccionales con legisladores o a la presión social indebida a través de la protesta violenta para alcanzar sus objetivos”, apuntan.

Asimismo, piden a la Rama Ejecutiva dejar de lado el “discurso polarizador, excluyente y de lucha de clases”, explicando que alentar para que haya una confrontación entre ciudadanos es un actuar “propio de regímenes totalitarios, demagógicos, caudillistas y populistas”.

Por otra parte, también hablan de la paz y lanzan una crítica al acuerdo que se firmó en La Habana, Cuba, con la entonces guerrilla de la Farc. Los veteranos señalan que el Estado no puede ceder su obligación de proteger a los colombianos y, mucho menos, exponer la seguridad de las personas.

“Mal mensaje se envía a la sociedad cuando se sitúa en una posición superior al delincuente abyecto, avasallando a los ciudadanos de bien y, de paso, sacrificando a los integrantes de la Fuerza Pública”, exponen.

En esa línea, señalan que los colombianos se deben pronunciar cuando desde el “Gobierno se pretende otorgar franquicias a particulares para que ejerzan control territorial y realizar actividades de seguridad bajo los modelos de guardias campesinas, indígenas, afrodescendientes y palenqueras”.

Por ello, enfatizan que son las instituciones del Estado, especialmente la Policía y las Fuerzas Militares, en las que se debe centrar la políticas de seguridad, pues de otra forma se expone a Colombia a “sumergirse en la vorágine de anarquía y violencia donde la población civil será nuevamente la más afectada”.

“Por estos motivos, y a escasas 24 horas de que en el país se conmemore el Día de la Independencia, en este encuentro civilista y democrático queremos refrendar nuestro apoyo incondicional e irrestricto a la Fuerza Pública y a cada uno de los hombres y mujeres que portan las armas de la República”, apuntan.

Otro de los motivos será respaldar la decisión que levantó la suspensión de la llamada mesada 14 y que fue proferida por el Consejo de Estado. Frente a este tema, le hacen un llamado al Ministerio de Defensa para que “en verdad tutele los derechos adquiridos de los uniformados colombianos, activos y en retiro, y que en su despacho pase de la retórica y el verbo a la praxis y al uso de sustantivos en su gestión”.

Por último, la reserva y los veteranos le exigen al gobierno del presidente Petro respeto por los medios de comunicación y por los periodistas, señalando que esto es muestra de una sana democracia.

“Atacar o estigmatizar a los periodistas y a los medios de difusión masiva, nacionales e internacionales, son rasgos totalitarios que miran la información, el pluralismo, el debate y la opinión pública”, finalizan.