Nación
Exalumna y ahora profesora del Marymount denunció casos de ‘bullying’
La mujer habría puesto a disposición sus conocimientos en la materia, pero fueron rechazados.
Tras la polémica desatada este jueves 24 de febrero por una denuncia de abuso sexual en un reconocido colegio de Bogotá, se han escuchado las voces de funcionarios del plantel y las de ciudadanos, quienes exponen los malos manejos que el centro educativo tendría frente a las denuncias que, al parecer, ya se habían presentado en anteriores ocasiones sin que hubiera una respuesta clara por parte de las directivas del colegio.
En esta ocasión fue una exalumna del Marymount la que escribió a la comunidad del colegio, afirmando que el año pasado habría entrado a trabajar a la institución como profesora de apoyo, tiempo en el cual pudo apreciar situaciones de ‘bullying’ entre las estudiantes.
“Al reconocer y denunciar casos de ‘bullying’ que vi presentes en las generaciones de séptimo y décimo grado, me acerqué a las directivas con el propósito de poner a disposición del colegio mis conocimientos para crear un ambiente seguro e informado donde tanto padres de familia y profesores pudieran ser capacitados para manejar situaciones complejas de abuso, negligencia y bullying”, indicó.
“Desafortunadamente mi propuesta fue rechazada. Me dijeron que ‘eso es normal en esa edad, no te preocupes tanto’. Hoy en día me entristece ver que el colegio se negara a recibir ayuda de sus mismas exalumnas, después de saber que han sucedido tantas situaciones como las que hemos oído los últimos días”, añadió.
Así mismo, la exalumna aseveró: “El silencio Marymount no solo viene en escalas grandes como lo que hemos presenciado con Mauricio Zambrano. También lo podemos ver en la forma como se les enseña a las niñas la sexualidad. Se les enseña cómo vestirse para evitar “experiencias incómodas”, cuando en realidad el acoso llega de diferentes formas y no por la forma como estén vestidas”.
La profesora de apoyo, quien es profesional en Justicia Criminal con Maestría en Neuropsicología del aprendizaje, nuevamente ha puesto sus conocimientos en la materia a disposición de la institución, de los padres de familia y los estudiantes, con el fin de “realizar una comunicación abierta donde todos entendamos hasta donde llega el abuso y como podemos identificarlo”.
Cabe resaltar que, debido a lo sucedido, el colegio señaló en un comunicado: “El Colegio se permite informar que en días pasados, luego de conocer situaciones indebidas por parte de un profesor, realizó todos los reportes y activó la ruta que nos corresponde como institución educativa; así mismo, reportamos al sistema de alertas de la Secretaría de Educación y luego informamos a nuestra comunidad”.
“En ese sentido, y como resultado, el profesor fue inmediatamente retirado de sus funciones, las autoridades alertadas y se inició la atención de la comunidad estudiantil. En las últimas horas, varias exalumnas dieron a conocer otras situaciones abusivas que involucran al mismo profesor”, agregó la institución, con sede en el norte de Bogotá.
Este es el fiscal que está investigando la situación del colegio Marymount. Están pidiendo a quienes hayan sido víctimas o tengan testimonios sobre el profesor que se contacten con él. pic.twitter.com/7kDuSz225Y
— Diego A. Santos (@DiegoASantos) February 25, 2022
El relato de la joven que denunció abuso sexual
Según cuenta la joven en su denuncia, ella se graduó del colegio Marymount en 2017 y forma parte de las jóvenes que están denunciando al profesor Mauricio Zambrano.
Asegura que en grado séptimo conformó el equipo de fútbol del colegio, donde precisamente el docente fungía como entrenador y que allí fue donde tuvo el primer contacto con él, aunque su paso por el deporte fue fugaz.
Posterior a ello, ya en el grado décimo, el profesor comenzó a contactarla más seguido, le hacía chistes inapropiados y la interceptaba en los pasillos del colegio.
A través de WhatsApp, las conversaciones se hicieron más seguidas hasta que se involucraron en una “relación”, aunque asegura que para ella todo era muy confuso, pues apenas tenía 16 años y no tenía muy claro lo que estaba pasando.
Ya en el grado once, el profesor fue mucho más allá, le dijo que quería “estar con ella” y le propuso varias veces que se vieran en moteles, que “sacara una cédula falsa” para poder encontrarse y hasta la visitaba en su casa.
Finalmente, el abuso se habría consumado en uno de los parqueaderos del colegio. La joven narró que fue el propio profesor el que le dijo que se vieran allí después de clases. Contó, además, que hubo contacto físico y besos, pero que ella no estuvo dispuesta a tocarlo, porque era algo que la ponía “incómoda” y que no había hecho antes”.