JUSTICIA
Exclusivo | Estas son las imágenes de la celda de Rafael Uribe Noguera en Valledupar
El asesino y violador de la pequeña Yuliana Samboní paga más de 50 años de condena en la cárcel La Tramacúa.
SEMANA tuvo acceso en exclusiva al sitio donde paga su condena de más de 50 años Rafael Uribe Noguera, el asesino y violador de la niña de 7 años Yuliana Samboní.
El crimen ocurrió hace un poco más de 4 años en Bogotá y hoy Uribe Noguera pasa sus días en prisión. Es uno de los reclusos con más riesgo y considerado de alta peligrosidad. Sin embargo, el Inpec ha podido garantizar su seguridad y tenerlo bajo el control estricto del régimen carcelario. No pasa lo mismo con Juan Guillermo Monsalve, el testigo estrella contra el expresidente Álvaro Uribe, quien ha gozado de toda clase de privilegios, ha cometido toda clase de abusos y hoy sigue gozando de su estadía en una habitación de las casas fiscales de La Picota en Bogotá.
La celda es muy pequeña. Tiene una cama de cemento que está empotrada de pared a pared. Es de aproximadamente 1 metro de ancho y menos de 2 metros de largo. El colchón es sencillo y está cubierto por una sábana blanca, y encima tiene una almohada. A los pies, en la pared, tiene un pequeño ventilador, ya que las temperaturas en el centro penitenciario a veces superan los 40 grados centígrados. Las paredes están pintadas de blanco y la reja con barrotes es azul. Al ingresar, según se ve en las imágenes obtenidas por SEMANA, la celda está marcada como la número 1.
En el mismo lugar hay un sanitario, ubicado justo a pocos centímetros de la cabecera de la cama y resguardado por un muro que le da privacidad. Allí se observa que almacena varios rollos de papel higiénico y se ven dos platos de metal un poco abollados, un detergente y un esponja de lavar loza. También hay otros elementos de aseo personal.
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Al otro lado de ese pequeño muro se levanta una especie de lavadero de no más de 50 o 60 centímetros. Ahí debe lavar su ropa y se nota que guarda algunos alimentos. En las imágenes hay algunos panes tajados, mantequilla y queso. A una distancia muy corta hay un tubo por el que sale agua para bañarse. Todo está en el mismo sitio, en la pared que está frente a la cama. Quizá toda la celda no tenga más de 2 por 3 o 4 metros.
La ropa de Rafael Uribe Noguera y los zapatos están al descubierto. Algunas cosas las guarda en bolsas colgadas en la pared. Se observan algunos libros, un encendedor y, debajo de la cama, la imagen de lo que parecen ser alimentos no perecederos que almacena en recipientes de plástico.
El arquitecto Rafael Uribe Noguera, llamado el Monstruo del Chicó, tendrá que pasar prácticamente toda su vida en esa celda reducida por haber sido capaz que acabar con la vida y los sueños de Yuliana y su familia.
Uribe Noguera recibe el trato de un criminal. Ojalá con todos los delincuentes en Colombia pasara lo mismo. Mientras tanto, el Inpec lo seguirá cuidando y prestándole seguridad para salvaguardar su vida como dice la ley.