Exclusivo: sin alias Pablito, así es el temido Frente de Guerra Oriental del ELN, autor del cobarde atentado a la General Santander

Cinco frentes territoriales, cinco compañías y una comisión son parte del Frente de Guerra Oriental del ELN, según se puede leer en el informe de inteligencia en poder de SEMANA. Esta unidad es una de las más despiadadas que tiene la guerrilla y que cuenta con una amplia zona de injerencia en los departamentos de Arauca, Casanare y Boyacá.

A esta estructura se la atribuyen secuestro de militares en Arauca, patrullajes de los guerrilleros en zonas urbanas y otro gran número de acciones terroristas, según inteligencia de las agencias del Estado. Forman parte de dicha agrupación los frentes Domingo Laín Sáenz, Efraín Pabón, José Adonay Ardila, José David Suárez, Capitán Pomares, entre otros.

Hay que mencionar que de este Frente de Guerra era comandante alias Pablito, a quien se le atribuye el atentado terrorista contra la Escuela de Policía General Santander, ocurrido el 17 de enero de 2019, en el que fueron asesinados 21 de cadetes.

Sin embargo, en el informe de inteligencia al que tuvo acceso SEMANA, en el que se encuentran los principales cabecillas del Frente de Guerra Oriental no aparece Gustavo Aníbal Giraldo, alias Pablito y, por el contrario, como uno de los máximos cabecillas figura Juan de Dios Lizarazo.

Fuentes consultadas por SEMANA indicaron que sobre alias Pablito se manejan tres hipótesis, que se encuentran en proceso de verificación. La primera indica que el Coce, Comando Central del ELN, le habría delegado una nueva misión que consistiría en reclutamiento de jóvenes en universidades en el Valle del Cauca.

La segunda versión es que posiblemente lo sacaron del camino, luego de haber hecho una alianza con las disidencias de las Farc en zona de frontera con Venezuela. Por último, que tras el atentado a la General Santander debían sacarlo de la zona, donde ya había bastante información de las autoridades en su contra.

En la nueva estructura de mando del Frente de Guerra Oriental, al que algunos expertos en conflicto señalan que no estarían alineados con el Coce en el proceso de paz, aparecen Juan de Dios Lizarazo, alias David, quien es delegado en La Habana, Cuba; como cabecilla político figura Arturo Archila Rincón, alias Raúl o Nacho. Debajo de este hay por los menos otros 14 cabecillas entre los que se encuentran, según inteligencia de las agencias del Estado reclutadores de menores de edad, como pasó en el caso de Andrés*, una historia que reveló en exclusiva SEMANA en el artículo titulado: ‘Un video es la prueba contundente de que el ELN sí recluta menores, aunque Otty Patiño, jefe negociador del Gobierno, diga que no sabe’.

SEMANA reveló la dramática historia de un menor que murió en combate tras ser obligado a pertenecer a esa organización criminal.

La bandera del ELN sobre el ataúd de Andrés*, un menor que murió empuñando armas en nombre de esta organización criminal, es la prueba que contradice de tajo al máximo comandante de esa guerrilla, alias Antonio García, quien de forma descarada afirmó que no reclutan menores de edad y que quienes están en sus filas lo hacen por voluntad, así se trate de personas entre los 11 y 17 años.

Andrés era de una región humilde y campesina de Tame (Arauca). Un menor valiente, guerrero para enfrentar la vida, parado, como se les conoce a las personas de carácter fuerte, cualidades que vio el ELN para reclutarlo.

Fuentes de inteligencia indicaron que, mediante engaños, fue seducido por la guerrilla. Le ofrecieron un mejor futuro para él y su familia. Ilusionado, accedió a iniciarse en la subversión sin saber que allí se encontraría la muerte, dejando un enorme vacío entre sus familiares y amigos.

El reclutamiento de menores por el ELN resulta descarado. Tras su muerte, el menor fue homenajeado por una de sus mejores amigas con un emotivo video que publicó en sus redes sociales, con frases como “mi niño precioso”, y ambientado con la canción ‘Como quien pierde una estrella’, de Alejandro Fernández.

En el video se ve al menor montado en caballos, correteando el ganado, actividad propia de la cultura llanera. También se le ve acompañado de sus mejores amigas, siempre con una sonrisa en su rostro, la misma que se apagó tras el reclutamiento forzado que sufrió por la guerrilla del ELN cuando apenas tenía 15 años de edad, aseguran los informes de inteligencia de las Fuerzas Militares.