NACIÓN
Excomandantes paramilitares piden perdón por asesinato de estudiantes en Nariño
Guillermo León Marín y Aníbal Gómez, exintegrantes del entonces denominado Frente Brigadas Campesinas Antonio, reconocieron los homicidios que se cometieron entre los años 2000 y 2004
La Comisión de la Verdad continúa reuniendo testimonios en todo el país para reconstruir lo que pasó durante más de medio siglo de guerra en Colombia y, por esa razón, varios comisionados participaron en el encuentro ‘El conflicto armado en la Universidad de Nariño’, donde se conoció que el paramilitarismo asesinó a varios estudiantes de dicha institución educativa entre los años 2000 y 2004.
En el encuentro participaron los excomandantes paramilitares Guillermo León Marín y Aníbal Gómez, del extinto Frente Brigadas Campesinas Antonio Nariño de las AUC. En el evento reconocieron el asesinato de, por lo menos, cinco estudiantes de la Universidad de Nariño. Durante su relato pidieron perdón por esos homicidios y relataron lo que ocurrió en ese entonces.
“Nos equivocamos, pedimos perdón. No queremos repetir esta tragedia, no queremos que nuestros hijos, ni que los hijos de nuestras víctimas, ni los hijos de los guerrilleros, nos sigamos matando”, fueron las palabras de los exparamilitares.
Según los excomandantes, un sargento del Ejército les entregaba la información en una lista con los nombres de los estudiantes que debían asesinar por tener, supuestamente, relación con grupos al margen de la lay. Sin embargo, Marín y Gómez explicaron que nunca pudieron comprobar dichas acusaciones y que sencillamente los asesinaron por esos posibles nexos.
“El sargento fue el que nos dio la lista de los estudiantes que había que quitarles la vida. Si uno dijera motivos para la muerte de los estudiantes, pues primero (está) el dedo señalador de la inteligencia militar y, segundo, las informaciones que los mismos estudiantes que resultaron siendo parte de las AUC pasaban”, dijo uno de los exparamilitares.
Pero además se conoció que, supuestamente, hubo participación del DAS en todos los asesinatos que cometieron en los primeros años de la década del año 2000. “El DAS pasó información también para que mataran algunas personas, entregaban nombres o fotografías. Había gente que se atrevía a denunciar, algunos eran atrevidos y lo hacían con nombre propio sobre cosas que hacían las autodefensas. Pero era curioso porque no hacía una semana que habían denunciado algo cuando ya teníamos copia incluso de los procesos. Había infiltración en la Fiscalía”, narró el exparamilitar.
Marín y Gómez contaron que los paramilitares y las guerrillas tenían infiltrados en la Universidad de Nariño y que, seguramente por eso, el sargento del Ejército entregó esa lista con nombres concretos para asesinar algunos jóvenes que fueron señalados de apoyar a las guerrillas.
Los asesinatos reconocidos fueron los de Jairo Moncayo (2003), Adriana Benítez (2000), Martín Rodríguez (2000), Marcos Salazar (2002) y Tito Libio Hernández (2004). Los familiares de estos jóvenes piden conocer toda la verdad de lo que ocurrió en aquella época porque las circunstancias aún no están claras.