Liberación con ‘cambiazo’ en Chocó

La felicidad era, hasta ese momento, completa. La familia Sánchez Montes de Oca y decenas de seguidores del exalcalde y exgobernador de Chocó Patrocinio Sánchez Montes de Oca celebraban su liberación. Era el fin de un infierno de dos años y nueve meses producto del secuestro del que fue víctima a manos, según dicen allá, del ELN. El propio presidente Santos celebró en su cuenta de Twitter la noticia.

En efecto, los fieles seguidores de este hombre que muchos califican como un ‘Mesías’, se apostaron en la residencia familiar en el barrio El Jardín, en el norte de la capital chocoana, a gritar ‘vivas’ por la liberación. Ocurrió el domingo 3 de abril y los medios registraron la noticia.

Patrocinio Sánchez se veía en muy mal estado, producto de tantos meses de un repudiable secuestro en tierras donde el trópico húmedo hace de las suyas. Pero rápidamente la alegría dio paso a las dudas, especialmente por parte de periodistas locales. Si bien algunos creían que se trataba de un acto generoso del ELN que comenzó un proceso de diálogo con el Gobierno, la realidad es que para otros no cuadraban partes de la historia sobre la misteriosa forma como el político fue liberado.

Inicialmente se dijo que Patrocinio fue dejado libre en una carretera del municipio de Lloró (Chocó). Pero nadie vio ni oyó nada. El exmandatario seccional, según los pocos datos disponibles, fue liberado sin que mediara ni el Comité Internacional de la Cruz Roja, la Defensoría del Pueblo o alguna autoridad, como normalmente ocurre.

Representantes del CICR le dijeron a Semana.com que aunque tenían conocimiento del caso y esperaban ser contactados por algún grupo armado para mediar, esto no ocurrió y tampoco fueron informados de la liberación.

Representantes de la Defensoría del Pueblo, por su parte, aseguran que no conocieron los detalles del regreso a la libertad del dirigente y mucho menos fueron contactados por la familia. Y para rematar, la Iglesia, que en Chocó ha estado ligada a liberaciones por parte del ELN, no fue informada de este episodio.

El misterio que comenzaba a rodear esta historia tomó su punto más alto cuando una voz comenzó a recorrer el pueblo –como un rumor sin freno–, que decía que el excongresista de La U Odín Sánchez, hermano del liberado, había sido canjeado por su hermano. Las informaciones decían que la familia, por un lado estaba muy contenta con la liberación, y por la otra muy triste con la suerte de Odín. Un medio local preguntó sobre el asunto y no obtuvo respuesta por parte de la familia. “Odín está en Bogotá”, murmuraron.

Lo cierto es que desde ese día Odín no aparece y su celular está apagado. “Es raro. Odín es un hombre de pueblo que nunca se desaparece. Siempre está en las calles hablando de política y muy pocas veces se pierde”, dijo un político consultado que se preguntó por qué Odín no apareció justo en el momento de la liberación de su hermano.

Semana.com indagó con fuentes de la Policía en Bogotá, quienes aseguraron que están investigando el misterioso asunto. Pero este portal fue más allá. Encontró fuentes en Istmina (al sur de la capital de Chocó), por donde se mueve el ELN, quienes contaron que vieron a Odín Sánchez en la tarde y noche del sábado 2 de abril departiendo con varias personas en un sitio público. Aseguraron que se hospedó en un hotel de ese municipio y que al día siguiente, hacia las 5:00 a. m. tomó una lancha con destino al medio San Juan. Asegura la fuente que el excongresista se dirigía rumbo a los corregimientos donde tuvieron secuestrado a su hermano.

Según ellos, era la segunda vez que Odín se desplazaba al corregimiento (Noanamá), zona de influencia de la guerrilla. “A Odín la guerrilla ya le había planteado un cambiazo. La idea era que su hermano liberado podía gestionar el dinero para pagar por su liberación. Odín no había querido acceder a esa propuesta, pero creo que por las condiciones de salud de su hermano, le tocó”, dijo uno de los consultados.

Semana.com quiso conocer la versión de la familia del excongresista, que ha estado muy hermética con el asunto. La exsenadora Astrid Sánchez evadió preguntas realizadas por periodistas de este portal y prometió un comunicado de prensa que nunca llegó.

No sería la primera vez

Aunque ningún grupo guerrillero se ha atribuido el secuestro del exgobernador de Chocó, las autoridades del departamento descartan que haya estado en manos de la delincuencia común.

“Los grupos delincuenciales no tienen la capacidad militar y económica para tener a alguien secuestrado tanto tiempo. Él tuvo que estar retenido por algún grupo armado organizado en Chocó, y esos son el ELN o las FARC”, manifestó una fuente a Semana.com.

Y aunque las dudas siguen haciendo nido, no pocos tienen claro que el ELN estaría detrás de todo esto. Fuentes del Gaula Militar aseguraron que sería el frente Resistencia Cimarrón el que lo tuvo en su poder.

Sin embargo, resulta extraño que el grupo guerrillero no haya contactado a ningún representante de la Iglesia católica para la liberación de un personaje tan importante en Chocó como lo es Patrocinio Sánchez.

Por todas las inconsistencias y preguntas que surgen alrededor de este hecho, en ese departamento parece tomar fuerza la versión de que hubo un posible canje.

Semana.com se comunicó con el padre chocoano Antún Ramos para saber si tenía alguna información sobre este episodio. El religioso manifestó, con cierto dejo de extrañeza, que nunca lo contactaron para intermediar en la entrega del secuestrado. Algo que resulta aún más confuso si se tiene en cuenta que desde el año pasado, él es fue una de las personas que con más insistencia buscaron alguna información sobre el paradero del exgobernador. Incluso, el padre Ramos se contactó con los miembros del ELN y los plenipotenciarios de las FARC en La Habana para preguntarles sobre Patrocinio. Ambos grupos le dijeron que no lo tenían en su poder.

Cuando este portal le preguntó al padre su opinión sobre la versión de un posible canje, manifestó que –aunque no tiene mayor información– no sería extraño que eso ocurriera, pues no sería la primera vez.

En diciembre del 2013, la chocoana Nohora Isabel Precigas se ‘canjeó’ por su esposo, Manuel Montes, que estuvo secuestrado durante casi cuatro meses en poder del ELN. La razón: el hombre presentaba un delicado estado de salud y, además, debía conseguir el dinero para su liberación. Un caso muy parecido al de los Sánchez.

En esa ocasión, el padre Ramos sirvió de mediador. “Fue muy difícil tener que ir junto a ella por su esposo y luego tener que dejarla allá. Pero no había otra opción (…) Normalmente nosotros servimos de mediadores y las familias nos buscan para hacer un acompañamiento”, dijo.

En conclusión, el misterio continúa y en Chocó hay expectativa. Muchos se preguntan ¿dónde está Odín?