INVESTIGACIÓN
Tras la pista de los agresores de niños abusados
Fiscalía pone la lupa sobre dos familiares cercanos y el dueño de la casa donde se hallaban. Menores, a cargo del ICBF.
En el marco del abominable caso en el que tres hermanos menores de edad y una bebé que habrían sido abusados física, sicológica y sexualmente en una casa del barrio Meissen, en el sur de Bogotá, las autoridades se aprestan a tomar las primeras decisiones.
Mientras los niños de 17 meses, 11, 12, y 13 años, rescatados por la Policía en la noche del pasado domingo pasaron este martes a tutela del ICBF y permanecerán en hogar de protección, la Policía de Menores y la Fiscalía General de la Nación adelantan la investigación para conocer qué era lo que ocurría en la vivienda ubicada en la localidad de Ciudad Bolívar.
Según el director de Fiscalías y Seguridad Ciudadana, Luis González, la entidad está “recolectando todas evidencias técnico científicas de Medicina Legal; realizando todos los peritajes, declaraciones y entrevistas y continuaremos, en el día de hoy (martes), recogiendo todas las evidencias para adoptar las decisiones que correspondan”.
Añadió que al finalizar el día la Fiscalía tomará importantes decisiones en el caso. “Por el momento, están tomando entrevistas a testigos y revisando los exámenes médicos para estructurar una teoría frente a las hipótesis que se maneja de los hechos”, dijo.
¿Qué se sabe?
Los hechos siguen siendo confusos. Una pareja, ambos de 19 años de edad, son los padres de la bebé de 17 meses. La mujer es hermana de los tres menores y, además, tiene ocho meses de embarazo.
Por otra parte, el día en que fueron rescatados de la vivienda en la que aparentemente llevaban viviendo desde mediados de año, el dueño del inmueble (de 32 años) fue duramente recriminado por la comunidad, que lo acusó de haber agredido a los niños e intentó lincharlo. Debió ser sacado del sector en una tanqueta de la Policía.
“Tenemos una casa en la que residían Luisa Fernanda; su pareja, Fabio Andrés, y la hija de los dos adultos de 19 años de edad, quien tenía sólo 17 meses. Además, se encontraron tres menores que eran hermanos de Luisa Fernanda. Tenemos conocimiento que vivía otro hombre pero es distinto a este núcleo familiar”, explicó González.
Lo que sí fue establecido plenamente por Medicina Legal es que los menores presentan lesiones de quemaduras, cortaduras y golpes, algunas de estas de bastante tiempo atrás, además de signos de violencia sexual.
“Hay lesiones constitutivas de abuso sexual en algunos de ellos, y lesiones de diferente tiempo de ocurrencia con elementos causales que pueden ser de tipo contundente y de tipo térmico, porque se trata de lesiones cicatrizales por quemadura”, fue la declaración en la mañana de este martes de Carlos Valdés, director de la entidad.
A hogar de protección
El ICBF se encargará de la protección de los tres hermanos, de la bebé y de su madre, que estaría próxima a tener labores de parto.
La directora de la entidad, Cristina Plazas, que los visitó en el Hospital de Kennedy, adonde fueron remitidas las víctimas en primera instancia, le dijo a Semana.com que se pondrá al frente de la protección de los menores para garantizarles sus derechos. “Los niños están realmente maltratados tienen cicatrices, hematomas por ataques con elementos contundentes”.
Los menores permanecerán juntos en un hogar de protección al cual fueron llevados por la propia funcionaria. Por ahora, el ICBF no ha hablado con los padres u otros familiares para que respondan por qué los niños aparecen con evidentes signos de maltrato.
La familia, al parecer, vivía en condiciones de pobreza. Según el reporte de la Policía, se hallaron textos bíblicos abiertos. Vecinos reportaron que constantemente al hombre, propietario de la casa, se le escuchaban gritos como “sáqueme los demonios”.