Iván y Samuel Moreno habrían recibido $1.000 millones de Odebrecht

Andrés Alberto Cardona, reconocido lobista de la administración de Samuel Moreno, era el que conseguía los contratistas, el que pagaba las coimas y el que terminaba subcontratando para ejecutar los contratos.

Así lo señaló la Fiscalía en la tarde del martes en la audiencia de imputación de Cardona. La Fiscalía reveló que a través de él se pagaron 1.000 millones a los hermanos Samuel e Iván Moreno, ya condenados por el ‘carrusel’ de contratos. Según el ente investigador, Cardona, a través de dos reuniones en México, eligió al contratista al que se le entregaron las obras de construcción del interceptor Tunjuelo-Canoas.

Cardona recibía órdenes del exsenador Moreno, a través de quien se realizó una primera reunión en México con el fin de pactar la entrega del contrato a una firma de ese país. Para ello -dice el ente investigador- viajaron Gustavo Alberto Giraldo Uribe, socio de la firma ACC Ingeniería; Jaime Buenaventura Quintero, de Contelac, y Julián Gómez Naranjo, de H2O Consulting.

Sin embargo, ante la imposibilidad de que el contratista que contactaron en México participara, cuadraron una segunda opción con Emilio Tapia, quien puso como única condición que se pagara soborno.

La adjudicación salió a favor del Consorcio Canoas: el 60 % lo tenía la Constructora Norberto Odebrecht SA, sucursal Colombia y el 40 % CASS constructores de la familia Solarte, también socios de Odebrecht en Ruta del Sol 2. Aunque presentaron la propuesta más alta fueron los ganadores del contrato.

La entrega del contrato fue hecha el 30 de diciembre del 2009, en el encargo por vacaciones que le dejó el entonces alcalde Samuel Moreno a Héctor Zambrano (condenado por el ‘carrusel’ de las ambulancias por contratos firmados ese mismo año). En los diez días que estuvo al mando de la ciudad se hizo la adjudicación por 243.000 millones de pesos.

Según la Fiscalía, el viaje a México no se perdió y también dio frutos ya que el contratista mexicano, al que le iban a entregar el contrato, terminó siendo el interventor de la obra. También se coordinó con Orlando Fajardo Castillo, representante de la constructora Fajardo Nieto ltda. (posterior subcontratista del Consorcio Canoas) el pago a otro de los oferentes para que se retiraran de la puja.

Se trata de la Unión Temporal Partenon, la cual, dice la Fiscalía, se retira luego de que se hiciera una negociación con el abogado representante Manuel Sánchez Castro. Dice además la Fiscalía que Sánchez recibió a nombre de la Constructora Fajardo Nieto la suma de 255 millones de pesos.

En el escrito del ente investigador también aparece una reunión el 4 de octubre del 2009 en la casa del abogado Álvaro Dávila, a la que asistieron Cardona, Iván Moreno, Manuel Sánchez Castro, Luis Bernando Villegas, Emilio Tapia Aldana. En esta época estaba en curso la licitación pública de adjudicación del interceptor. 

Una vez se entregaron las obras al Consorcio Canoas, este subcontrató dos meses después, en febrero del 2010, a la empresa ACC Ingeniería, de la que hace parte Andrés Cardona. Este contrato por 1.000 millones de pesos tenía por fin llevar a cabo la construcción de las vías de acceso a los pozos del interceptor. 

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La Fiscalía anticipó que además de Cardona, también habrían participado los funcionarios del Acueducto de Bogotá: Jorge Enrique Pizano, gerente; Julián Montoya Guzmán, gerente corporativo del sistema maestro, y Jaime Díaz Ortiz, director de compras y contratación. 

La imputación de cargos de la Fiscalía continuará este miércoles, y en ella Cardona responderá si acepta los cargos de cohecho y celebración indebida de contratos.