Celda de Carlos Mattos en La Picota tras la visita de la Contraloría
Carlos Mattos, durante su reclusión en la cárcel La Picota. | Foto: Contraloría

Nación

Fiscalía no podrá procesar por dos delitos al empresario Carlos Mattos

El Gobierno español envió respuesta sobre el trámite de extradición.

30 de marzo de 2022

Desde España llegó la notificación a Colombia con la decisión final sobre el trámite de extradición del empresario Carlos Mattos, lo cual imposibilita la opción de imputar dos delitos sobre los presuntos sobornos a funcionarios judiciales.

El aviso del Gobierno de España dice que el proceso de Mattos únicamente puede incluir dos de los cuatro delitos por los que fue solicitado en extradición.

De acuerdo con El Tiempo, la Fiscalía colombiana acusó al empresario de los delitos de cohecho, utilización ilícita de redes de comunicaciones, acceso abusivo a un sistema informático y daño informático.

No obstante, el cohecho y daño informático no existen como delitos en el país europeo, por lo que solo se anotaron dos cargos en el procesamiento.

Vale la pena recordar que en días pasados, SEMANA dio a conocer que cuando todo estaba listo para negociar con la justicia, a Mattos se le ocurrió salir de paseo en carros del Inpec, mientras estaba o se supone debía estar en la cárcel. Ese hecho y otros sucesos que dejaron en duda la credibilidad de un acuerdo con la Fiscalía, terminaron ahora enredando a los fiscales del caso.

Los dos funcionarios de la Fiscalía compartieron la misma suerte de todos los funcionarios públicos y abogados que están o pasaron cerca de Carlos Mattos, que terminan enredados o dando explicaciones a la justicia. En este caso, un juez identificó fallas en la negociación que acordaron Mattos y la Fiscalía con el ánimo de reconocer responsabilidad y reparar al Estado.

Como el acuerdo falló, la sanción también se anticipó, así como una recusación que ahora advierte la nueva defensa de Carlos Mattos en contra de los fiscales Hernández y Betancourt. Como justamente los dos funcionarios serán investigados, no hay forma de que al mismo tiempo lideren el juicio en contra el empresario.

El periplo judicial de Carlos Mattos ya completó un lustro y pasó por todos los escenarios: se declaró inocente, perseguido, lo extraditaron, alegó enfermedad y, finalmente, decidió aceptar cargos y reconocer responsabilidad para obtener una pena favorable a su favor. Es decir, después de luchar por años en demostrar que no sobornó a jueces o funcionarios judiciales, el polémico empresario se lanzó a admitir todo.

Firmó un acuerdo con la Fiscalía, una negociación que incluyó el pago de dos millones de dólares como reparación al Estado. En ese momento todos celebraron el acuerdo, pues no solo se obtendría una condena en contra el empresario, sino que la justicia sería reparada con creces.

Mattos estaba listo para decirle al país lo que hizo para eliminar a sus competidores en la disputa legal por la distribución de los vehículos Hyundai en Colombia, básicamente sobornar a todo funcionario judicial que tocaba el proceso. Incluso lo reconoció en una carta abierta que firmó y donde aseguró que entregó dinero hasta a periodistas para afectar la imagen de la Fiscalía.

“La necesidad de resarcir los perjuicios que ocasioné al cohechar funcionarios y servidores públicos, así como de patrocinar al señor Gonzalo Guillén para que en mi beneficio desacreditara la labor que realizó la Fiscalía y sus delegados en el caso denominado Hyundai, pues afecta la imagen de la administración de justicia y de quienes la representan”, escribió y firmó el empresario en el documento.

Posteriormente, SEMANA conoció varios audios que dejaron en duda las advertencias de Mattos en su escrito, principalmente en lo referente a los pagos hechos a Gonzalo Guillén. En los audios se escucha al abogado Iván Cancino advertir que los fiscales del caso, los ahora recusados, presionaron al empresario para entregar esas declaraciones.