Fiscalía y Procuraduría piden cárcel para los patrulleros del caso Ordóñez

En respuesta a una tutela de seis periodistas, la Fiscalía tomó la decisión de revertir la reserva que pesaba sobre la audiencia de los dos patrulleros acusados de tortura y homicidio agravado contra Javier Ordóñez. Por ese motivo, este domingo se adelanta la diligencia de forma virtual y pública en la que el ente acusador pidió cárcel para Harby Damián Rodríguez y Juan Camilo Lloreda por “el riesgo de entorpecimiento de la justicia que se podría presentar”.

Otros detalles del abuso policial

Previo a la petición, la Fiscalía recordó apartes de la brutal golpiza que recibió Ordóñez, de acuerdo con lo contado por el testigo Wílder Salazar, amigo de la víctima. Además de agregar más detalles del resultado de la necropsia realizada por Medicina Legal.

“Lo empujan y cae boca abajo entre el baño donde estoy. Lo levantan y le pegan al frente mío. Le pegan en la parte de atrás de la rodilla y cae, se pega en la cabeza con el 'locker’ metálico de color gris, cae y queda en posición fetal. Yo dijo: 'por favor no le peguen mas que él ya estaba reducido", fue el testimonio de Salazar que retomó el fiscal.

De igual forma, recordó que el testigo señaló cuál de los dos patrulleros fue más violento contra Ordóñez durante su estancia en el CAI Villaluz. "Damián Rodríguez es el que más le pega (...) “en el mezón tenían un palo de madera, aproximadamente de 30 centímetros, es como una regla, delgado. Le pegan varias veces a Javier”.

Adicionalmente, Salazar señaló que el patrullero Damián Rodríguez le pegó un golpe en la cabeza luego de pedirle que no agrediera más a su amigo, quien instantes previos recibió una patada en la espalda y un puño en la cara.

“La medida de aseguramiento que solicita la Fiscalía no puede ser otra que la detención preventiva en establecimiento carcelario y explico por qué: es la única que satisface cabalmente los presupuestos de necesidad, resulta de adecuada, proporcional y razonable frente a los contenidos institucionales”, agregó el fiscal.

La necropsia de Javier Ordóñez reveló que tenía grado tres de embriaguez, pero que no hubo consumo de sustancias psicoactivas. “La muerte se explica por hemorragia masiva intrabdominal y retroperitoneal secundario a trauma cerrado de adbomen, contundente de alta energía. Según lo encontrado en la necropsia, las lesiones se producen por múltiples traumatismos, contundentes, en abdomen y región lumbar”, sostuvo el funcionario.