MEDELLÍN
Fiscalía reactiva búsqueda de los desaparecidos en la Comuna 13
Con base en declaraciones de ‘paras’ desmovilizados, el ente busca al menos 40 de 200 desparecidos reportados en ese lugar de Medellín. Exclusivo Semana.com
La 'Escombrera’, es una especie de montaña artificial que por décadas se formó por escombros dejados por los habitantes de la Comuna 13 de Medellín. El lugar se volvió tristemente célebre porque allí ‘paras’ y milicias urbanas arrojaban los cuerpos de sus víctimas. Algunos historiadores lo consideraron un cementerio clandestino.
Durante varios años la Fiscalía, en coordinación con grupos de búsqueda, ha hecho una silenciosa labor para identificar los restos de desaparecidos en Medellín. En ese proceso han intervenido varios equipos técnicos integrados por antropólogos forenses de varios países que -en el 2011- aseguraron que para encontrar los cuerpos que allí se encuentran “se deberán remover al menos un millón y medio de metros cúbicos de tierra”.
Por esto la Fiscalía, según conoció en primicia Semana.com, irá a ese sitio en los próximos días en una operación de gran calado a buscar al menos 40 de 200 cuerpos reportados que, se supone, allí yacen.
Adicionalmente, Semana.com conoció el más reciente informe de la Unidad de Justicia y Paz de la Fiscalía que muestra la compleja investigación sobre los hechos en ese empobrecido y conflictivo lugar de Medellín.
En la investigación se recibieron testimonios de familiares de víctimas de desaparición forzada en la Comuna 13 que señalan al desaparecido bloque ‘Cacique Nutibara’ de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), comandado por Diego Fernando Murillo Bejarano -conocido también como ‘Don Berna’- como el responsable de las desapariciones. También se han señalado miembros de la fuerza pública.
“Para la Fiscalía es claro que se realiza una investigación por desapariciones forzadas e inhumación ilegal de cadáveres en la Comuna 13 de Medellín en hechos ocurridos en la ‘Operación Orion’ del año 2002 y casos similares y posteriores en relación con dicha operación”, dice el documento.
En las labores investigativas de este ambicioso plan de exhumación de cadáveres en este olvidado sector, resultaron claves los testimonios de dos exparamilitares del bloque ‘Metro’ de las AUC.
El 30 julio del 2014, Juan Carlos Villa Saldarriaga, ‘Movil 8’, le contó a la justicia la forma como allí asesinaron a cuatro personas que sirvieron como informantes de la fuerza pública entre los años 2001 y 2002. “Un día que llegué, habían enterrado en una fosa común como a tres o cuatro muchachos que habían entregado unas caletas. Los mataron y los entregaron cerca de la laguna”, dijo.
En su declaración, el exparamilitar aseguró: “Muchos jóvenes víctimas de desaparición forzada fueron torturados, asesinados y posteriormente inhumados en fosas clandestinas. Dicha información fue clarificada por 'Don Berna', quien aceptó cargos por los hechos. En ese sector de la 'Escombrera’ se fue enterrando gente. En todo el accionar nuestro, puedo dar fe de que enterramos de 30 a 35 cuerpos”, concluyó.
El testimonio se va haciendo cada vez más estremecedor. “Daban la orden de muerte de las personas. Los muchachos los dejan en el sector de la 'Escombrera’ y aprovechaban la volqueta que descargaba tierra y escombros. Pero el otro día llegaba la máquina y los podía mover. Me avisaban a mí y yo iba, y lo hacían nuevamente. Hay que tener en cuenta que luego de la ‘Operación Orión’, salimos de la zona y no sé qué pudo haber sucedido luego”, indicó en su declaración.
Como se sabe, la ‘Operación Orión’ fue aquella incursión del Ejército y la Policía, en octubre del 2002, que supuestamente buscaba liberar la zona de guerrilla y delincuencia. Según se documentó en su momento, las autoridades se valieron de elementos paramilitares y se dieron desapariciones forzadas y ejecuciones extrajudiciales. Por esto los generales Mario Montoya (Ejército) y Leonardo Gallego (Policía) terminaron investigados por la Fiscalía. Investigaciones que no terminan.
Ahora un grupo de fiscales en los próximos días realizará inspecciones en la zona, para verificar los relatos del paramilitar y ubicar algunos los cuerpos inhumanamente lanzados en medio de una montaña de desechos, mudo testigo de la dura guerra que se vivió en esa zona.