La hija de Escobar vuelve a aparecer

Tenía 9 años cuando su papá murió. Era la hija consentida del reconocido narcotraficante, Pablo Escobar. Es probable que a esa edad no entendiera lo que implicaba ser su heredera o que no comprendiera por qué para él era tan fácil conseguirle una jirafa o hacer que un caballo blanco luciera como un unicornio porque ese era su capricho del momento. 

Manuela Escobar fue el nombre que recibió cuando nació pero luego de la muerte del capo, su mamá (María Victoria Henao) se lo cambió por Juana Manuela Marroquín, como cambió también el de su otro hijo, Juan Pablo por Sebastián. Hoy los tres se apellidan Marroquín Santos, María Victoria quería tal vez despistar a quienes los amenazaban así como borrar el lastre de ser la familia del hombre más sangriento de los 90. Época en la que el capo hizo imperar el narcotráfico. 

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Tres años después de la última foto que circuló y de la que se especulaba que la mujer que aparecía era Manuela, la consentida de Escobar fue finalmente vista en las calles de Palermo, uno de los barrios más exclusivos de Buenos aires, caminando con su mamá. La cámara del fotógrafo Enrique García Medina, de la revista Gente, capturó a la desaparecida hija del capo. 

La foto que ya ronda de forma masiva en las redes ha levantado curiosidad y polémica. Y es que Manuela fue vista por última vez a sus nueve años, y desde entonces había estado oculta de la mirada pública. 

Es poco o nada lo que se sabe sobre su vida hoy, a diferencia de su hermano, que, de hecho, publicó un libro y es quien siempre aparece para hablar de los asuntos del clan Escobar.

Manuela tiene hoy alrededor de 35 años, y este martes se dejó ver vistiendo una sudadera gris, un camisón blanco y unos tenis de color negro. 

Pese a su intención de esconderse del pasado, la historia del narcotráfico no se ha desligado de su familia, aunque de ella directamente sí. Hace años fueron involucrados con actividades ilícitas y narcotráfico. Sin embargo, no se encontraron pruebas en su contra por lo que quedaron nuevamente en libertad. Tiempo después, desde el año pasado, se volvieron a ver inmersos en este mundo por lo que los reflectores están puestos sobre ellos.  

Las autoridades argentinas investigan tanto a madre como hijo por ser el posible enlace entre el abogado Mateo Corvo y el narco colombiano José Piedrahita para lavar dinero del narcotráfico. En el caso que ha tomado relevancia en los medios en los últimos días, por acercarse las fechas en que se presentaran a declarar, también se encuentra relacionado el exjugador de la Selección Colombia, Mauricio ‘El chicho‘ Serna.

Entre tanto, de la hija de Escobar no se dice nada. Durante años se ha rumorado que fue su consentida, a quien le cumplió todos los deseos, y a quien protegió incluso quemando dólares para mantenerla caliente en uno de los escondites. De hecho, dicen que Escobar construyó el zoológico de su llamativa hacienda Nápoles, en Antioquia para el disfrute de su hija menor.

25 años después de que Escobar muriera abatido, el héroe de Manuela sigue siendo una leyenda del crimen que en Colombia quiere ser olvidada, y tal vez, la misma que ella ha intentado dejar guardada en el pasado.