Nación
Francia Márquez sale en defensa de la niñera y la empleada de la casa de Laura Sarabia, es la primera funcionaria que rechaza las chuzadas y no las niega. Pide que se investiguen los hechos
La coequipera del presidente pidió que se investiguen los hechos y se esclarezca lo ocurrido.
El gobierno del presidente Gustavo Petro ha estado en la mira, mucho más después del caso que SEMANA destapó sobre Laura Sarabia, entonces jefa del Despacho de la Presidencia, y la exniñera de su hijo Marelbys Meza.
Dicha situación ha sido de total interés para el país, en especial por la búsqueda de pruebas y la investigación de los abusos de poder en el gabinete del actual gobierno. En efecto, se descubrió que hubo interceptaciones ilegales.
El fiscal Francisco Barbosa denunció que integrantes de la Dirección de Investigación Criminal (Dijin) le dijeron a un fiscal contra bandas criminales que Meza y otra trabajadora de servicios generales de Sarabia eran parte del Clan del Golfo y por eso había que interceptar sus comunicaciones.
El jefe del ente acusador indicó que todo se orquestó luego de la denuncia que hizo Sarabia sobre el hurto de un dinero en su casa. Cabe recordar que a la señora Meza la hicieron pasar por una prueba de polígrafo, en los sótanos del edificio Galán, adyacentes al Palacio de Nariño, y en diálogo con SEMANA denunció el temor que sintió.
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Ante esto, los pronunciamientos del presidente Petro y la vicepresidenta Francia Márquez no se daban.
No obstante, en las primeras horas de este viernes 2 de junio, la coequipera de Gustavo Petro se pronunció en Twitter sobre las interceptaciones ilegales; Márquez rechazó esto y pidió que se investiguen los hechos.
“Rechazo las interceptaciones ilegales, hemos luchado toda la vida por la garantía de los derechos humanos, esa lucha le costó la vida a muchos de los nuestros. Que se investiguen estos hechos y se esclarezca lo ocurrido”, escribió la vicepresidenta.
De igual modo, la vicepresidenta no dudó en decir que ella y su equipo de trabajo llegaron a los altos mandos del Gobierno “con la esperanza de un cambio, y seguiremos trabajando de manera incansable por ello”.
En la misma línea, aunque no tiene relación directa con el caso de la señora Marelbys Meza y Laura Sarabia, la funcionaria pública trajo a colación parte de los planes y programas del Gobierno.
“Tenemos un programa y un plan de desarrollo que con amor, alegría y esperanza la gente ayudó a construir desde los territorios”, consignó Francia Márquez.
Así las cosas, Francia Márquez fue la primera funcionaria que rechazó las chuzadas y no las negó.
Antes de terminar, la vicepresidenta recalcó su apoyo al presidente Gustavo Petro “en el propósito de cambio en favor de la justicia social y la paz”, se lee en Twitter.
Petro dice que nadie de su gobierno ordenó chuzadas contra Marelbys Meza
Tras reunirse con el embajador Armando Benedetti y con su exjefe de Despacho, Laura Sarabia, el presidente Gustavo Petro usó nuevamente su cuenta de Twitter para referirse a todo el escándalo que se ha generado en las últimas horas por cuenta del abuso de poder y chuzadas ilegales contra Marelbys Meza, exniñera del hijo de Sarabia.
El mandatario indicó en sus redes sociales que nadie de su gobierno está vinculado con la orden que se dio para estas interceptaciones ilegales. “Ningún miembro del Gobierno ha dado ninguna orden de interceptaciones telefónicas”.
La Fiscalía General anda tras la pista de esta chuzada desde hace varios días, desde que SEMANA hizo pública la delicada denuncia de Marelbys contra su exjefa y jefe de Gabinete de Petro, Laura Sarabia.
Hay un dato relevante: el fiscal que manejaba el caso, con sede en Chocó, les explicó a los investigadores en Bogotá que la Policía le hizo la petición de la interceptación argumentando que Marelbys Meza, una humilde niñera de 51 años, era fundamental para capturar a alias Siopas, uno de los jefes de Clan del Golfo y heredero del poderoso narcotraficante Otoniel.
Todo era una farsa, simplemente un montaje para escuchar de manera ilegal a la niñera. Por eso, la sorpresa del fiscal del caso fue mayúscula cuando ordenó hacer una interceptación legal mientras investigaba el robo de la plata de Laura Sarabia y le informaron que el número de Marelbys ya estaba cargado en la plataforma de interceptaciones.