NACIÒN
Fuertemente custodiado llegó al búnker de la Fiscalía el conductor de la camioneta de la UNP hallada con coca, en Cauca
El director de la Unidad Nacional de Protección, Augusto Rodríguez, solicitó medidas de protección extremas para esta persona, pues tiene información clave de irregularidades y corrupción y teme que puedan atentar contra su vida.
En una operación que fue coordinada directamente por el director de la Policía Nacional y el fiscal general, fue trasladado a los calabozos del búnker de la Fiscalía Manuel Antonio Castañeda, el hombre que conducía una camioneta de la Unidad Nacional de Protección, asignada al esquema de seguridad del exsubdirector de la entidad, Ronald Rodríguez Rozo, y al cual le fueron hallados 168 paquetes con cocaína el pasado fin de semana.
Castañeda fue llevado en caravana desde Totoró, Cauca, donde cayó con el cargamento, hasta Popayán. Desde allá, un avión de la Policía lo esperaba para trasladarlo a Bogotá, no se quería correr riesgos al tenerlo en esa zona y era necesario garantizar su seguridad por la importancia de la información que podría entregar en caso de colaborar con la justicia, pues desde ya se habla de un auténtico cartel encargado de hacer “vueltas” a narcotraficantes con los carros y dispositivos de seguridad de la UNP.
La solicitud del traslado fue hecha el pasado domingo por el director de la Unidad Nacional de Protección, Augusto Rodríguez, pues Castañeda es considerado como un testigo clave para destapar múltiples casos de corrupción al interior de la entidad en la que estarían comprometidos algunos presidentes de sindicatos, funcionarios y exfuncionarios de la entidad y contratistas.
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Castañeda es un expolicía que se dedicó durante años a la promoción de artistas de música popular. En ese oficio asegura que fue secuestrado y extorsionado por alias Jhon 40, en los Llanos Orientales, por lo cual tuvo que conformar un esquema de seguridad que le costaba 15 millones de pesos mensuales.
En esas circunstancias, dijo, conoció en 2019 a Wilson Devia, presidente de uno de los sindicatos de la Unidad de Protección y quien no trabaja directamente para la UNP sino para una de las empresas contratistas que provee de personal a esa entidad.
Castañeda asegura que Devia le alquiló un esquema de seguridad que estaba asignado por esa entidad a un protegido firmante de los acuerdos de paz con las Farc, identificado como Yesid Torres, por un valor de siete millones de pesos mensuales, más un millón de combustible.
Devia, dice Castañeda, distribuía el dinero con los escoltas y el protegido. El esquema incluía vehículo blindado, escoltas, mantenimiento y combustible. Castañeda tuvo el esquema durante algún tiempo, luego se lo entregó nuevamente a Devia.
Curiosamente el vehículo que tuvo Castañeda fue detenido posteriormente con 400 kilos de marihuana.
Para sustentar esta y otras denuncias más, Castañeda le entregó al director de la UNP, Augusto Rodriguez, grabaciones y documentos que comprometen seriamente al presidente del sindicato, Wilson Devia.
En la grabación telefónica entre Castañeda y Wilson Devia se habla de la compra de unos vehículos por un artista llamado “Joaco”, quien estaría dispuesto a alquilarlos a la UNP.
En la grabación, Devia revela el monto de la “coima” que cobra por meter los carros a trabajar a la UNP e incluso se compromete a enviar los vehículos contratados a zonas donde no les den tanta “pata”, pues dice que pierde dinero si el carro se daña pronto.
Esta es la transcripción de la grabación que esta en poder de SEMANA:
MANUEL ANTONIO CASTAÑEDA (M.A.C.): Ahí fuimos a ver los vidrios...
WILSON DEVIA (W.D.): Cómo le fue...
M.A.C: El cuchito nos enseñó ahí los vidrios y eso. Pero el viejo resultó llamando a un tal Fabio y el viejo ya le elevó mucho. Ccuando llegamos ahí, ya no eran los mismos precios sino más elevados y decía que eso tocaba con Fabio, con Fabio y con Fabio...
W.D.: ¿Y quién es Fabio?
M.A.C.: Bueno, pues no sé, pero ahí el cucho marica habló de eso y nosotros no le paramos bolas y pues Joaco miró los vidrios.
W.D.: No, pues vamos a otro lado, no, ¡tan guevón!
M.A.C.: No, pues sí, igual ahí miró los vidrios y el man le dio los precios y yo le dije que pues yo hablaba con usted a ver a qué precio les dejaban los más baratos.
W.D.: Sí.
M.A.C.: Yo, sin embargo...
W.D.: ¿Y qué dijo?
M.A.C.: No, pues marica yo los llevé a otra bodega ahí de otro amigo y pues el man por allá le ayuda conseguir unas camionetas, entonces, esas que él está necesitando para comprar...
W.D.: Sí.
M.A.C.: Entonces, el amigo este que yo tengo se comprometió, que se las dejaba y que se las va a comprar al man, una Runner y una Lexus, eso…
W.D.: ¿Blindadas?
M.A.C.: No, no, no convencionales...
W.D.: Ah bueno.
M.A.C.: Eso, y pues Joaco, ahí sí, como yo hablé maravillas de usted, entonces el man me dijo: ‘marica, ¿y el tema de las camionetas cómo es? Será que es que el man me tira muy duro, que no sé que’. Yo le dije: ‘No marica, el man es bien, pues obviamente tiene que ganarse un porcentaje, le dije pero el man dijo: ‘Será seguro que él sí las mete, no sé qué’. Yo le dije que sí, que usted ayudaba...
W.D.: Pues esas las entro porque las entro, usted es como marica, si le estoy diciendo que sí…
M.A.C.: No, no, yo le dije ahí marica, yo le dije el man es bien, por ahí dijo que iba a ver si compraba unas a un man de Medellín, pa ver si se las metía a trabajar ahí.
W.D.: Lo que sí cobramos es el 10 por ciento de lo que facturen, guevón, eso sí no…
M.A.C.: Espere hago cuentas, el diez por ciento, ¿cuánto es el 10 por ciento?, ¿cuánto es que usted dijo? Él piensa comprar 2018, 2019...
W.D.: Ah no, un milloncito de pesos por cada camioneta guevón, eso no es nada y él paga 10.500.000...
M.A.C.: Ah bueno, eso, al man le sonó la idea, dijo que iba a ver si se compraba unas camionetas y las metía a trabajar ahí, pero que si las asignaban a esquemas muy patones o que si se podia darle manejo, yo le dije, a este marica se le da la ponchera y el man nos ayuda pa una buena ciudad, pa que no le den tanta pata.
W.D.: Claro, si no, no, no... Eso las organizamos, mijo.
Que a mí no me sirve mandar una camioneta donde le vayan a dar pata, donde se la van a tirar, porque la sacan de trabajar, la dejan quieta y yo no produzco.
M.A.C.: Ahhhh, no, él dice: yo le boto la ponchera al man de lo que pide, pues que obviamente Manuel me la deje trabajando, en un buen lugar, marica, no que le den pata.
W.D.: Eso las dejamos en buenos sitios. Organizamos para que de hecho quede con los escoltas del sindicato para yo poderlos apretar.
M.A.C.: Eso, marica, pues ya el man, marica, él dijo que iba a ponerse a la tarea de eso y que me cantaba la zona y que le había caído muy bien...
W.D.: Nooo, ese hijueputa, que el próximo concierto que haga me invite para escucharlo cantar… que me gusta… guevón, eso así a palo seco, y en video de youtube, la magia de los micrófonos hace que eso se cante bien bonito, y cuando uno va a ver el artista chimbo.
M.A.C.: Nooo, el man es muy bueno, ese hijueputa es 100 por ciento bueno, lo que pasa es que ahorita no hay eventos, conciertos como tal hasta marzo, marica . Ya en febrero porque enero ya se fue. Febrero está quieto, pero si apenas el man haga un evento yo le digo.
W.D.: Claro, eso es lo que toca decirle. Bueno, pero en conclusión fueron allá a los vidrios y consiguieron por otro lado, que es lo importante, ¿sí? ¿Solucionaron el problema?
M.A.C.: Sí, el man lo va a hacer allá en donde un amigo de una empresa, una que queda en la 80, pues el man está es esperando que le entreguen, como se supone que hoy le entregaban el carro del concesionario, no le alcanzaron a entregar la matrícula, entonces está esperando eso y lo hace allá donde el otro man que le llevé yo.
W.D.: Ahh bueno, ¿o sea no hicieron negocio con el señor de acá?
M.A.C.: No, con el de ahí, no, no, no. No llegaron a ningún lado. Al man, marica, se le subió. Imagínese que él que pidió 8 millones, estaba pidiendo 12, 14 millones, entonces el marica ya como que no le gustó eso.
W.D. Nooo, 14 millones quería era brindarle todo el carro, guevón.
M.A.C.: Noo, si eso es lo que le pidió el man, marica, 14 millones cuando esta mañana a mi me pidió 8, entonces Joaco no le gustó eso.
W.D.: Nooo, falta de seriedad, qué cagada hermano, pero ahí sí dijo el burro, se me sale de las manos.
M.A.C.: Noo, pero hágale gracias por la gestión y pues esperemos a ver qué me dice este marica y yo le canto la zona.
Esta grabación y otras más con documentos y evidencias documentales se encuentran en manos de la Fiscalía que abrió en las últimas horas una investigación formal con el fin de establecer quiénes más estarían detrás de la poderosa red de corrupción liderada presuntamente por el sindicalista Wilson Devia.
SEMANA contactó a Ronald Rodríguez Rozo, ex subdirector de la entidad y quien tenía asignado el carro en su esquema de seguridad pero no obtuvimos respuesta.
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