Fuerza pública monitorea todo el país para evitar desórdenes en jornada de manifestaciones

Este jueves 28 de abril se conmemora el primer año del Paro Nacional en Colombia, el cual dejó un preocupante saldo de fallecidos y personas heridas, así como de denuncias sobre desaparecidos. Así mismo, la respuesta de la fuerza pública contra los manifestantes ha sido objeto de numerosas denuncias, alegando violaciones a los derechos humanos.

Con motivo de esta fecha, en redes sociales circulan convocatorias con los puntos de encuentro para la realización de marchas y manifestaciones en varias ciudades del país, como Bogotá, Cali y Medellín. En consecuencia, autoridades se preparan para garantizar el orden y seguridad durante la jornada.

Con el objetivo de evitar desórdenes y garantizar la seguridad de la población civil durante la jornada de este jueves, el Ejército y Policía Nacional monitorean minuto a minuto diferentes puntos del país.

“Conocemos de primera mano las intenciones maquiavélicas y perversas de algunas organizaciones violentas”, aseveró el general Eduardo Zapateiro, comandante del Ejército Nacional.

Así mismo, anunció que están muy atentos y “en estricta coordinación con la Policía Nacional en todas las regiones del país para no dejar que se fomenten desordenes, porque la gran mayoría de colombianos lo que queremos es construir y no destruir”, destacó el general Zapateiro.

Efectivos del Ejército y la Policía se han desplazado a diferentes puntos del territorio nacional para realizar una estricta vigilancia durante la jornada.

Durante la semana, en varias regiones hubo temor ante eventuales actos vandálicos de parte de grupos que aprovechen el escenario de las movilizaciones para sembrar caos y atentar contra la población civil, fuerza pública e infraestructura.

En consecuencia, el Ejército Nacional, en compañía de la Policía Nacional, diseñó una estrategia de vigilancia para monitorear minuto a minuto el avance de la jornada en diferentes puntos del país.

Ejército apoya plan de vigilancia vial

En Aguachica, Cesar, el Ejército Nacional vigila las carreteras para garantizar la seguridad de la población civil, custodiando los ejes viales, cascos urbanos y áreas rurales del territorio.

A bordo de motocicletas, soldados de la fuerza pública recorren las vías del territorio para garantizar el orden y prevenir cualquier situación que pueda derivar en hechos de violencia.

Nueva jornada de marchas este jueves: ¿quién está detrás de las protestas?

Este jueves, el país enfrenta una nueva jornada de movilizaciones. Aunque las autoridades están en máxima alerta y el general Jorge Luis Vargas Valencia, director Nacional de la Policía, habla de grupos que estarían preparando disturbios y daños que afectarían las marchas pacíficas convocadas, se espera que el tema no pase a mayores y que las marchas de ciudadanos no se conviertan en el inicio de otra jornada prolongada de protestas tal como ocurrió el año anterior.

De manera oficial, no se conoce quién está detrás de las movilizaciones. Al menos, la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) confirmó este miércoles “que el Comité Nacional de Paro no tiene agendada ninguna actividad de calle el 28 de abril”. Al contrario, promete hacer un análisis virtual con importantes actores de lo que dejó el estallido social a un año de su inicio.

Por la misma línea, está la Federación Nacional de Educadores (Fecode), que aclaró “que como trabajadores, nuestra gran movilización pacífica y contundente será el 1.° de mayo, Día Internacional del Trabajo”.

Cosa contraria ocurre con la minga indígena, que se desplazó hasta Bogotá desde varias ciudades del país. “Venimos en una acción legítima, caminando la palabra, para declararnos en emergencia humanitaria por toda la situación de violencia que viene bañando con sangre nuestros territorios indígenas, afros, campesinos, y ahora los territorios de la ciudad con la persecución militar y política que tienen los jóvenes que han participado en estas grandes manifestaciones en los últimos tiempos”, aseguró Giovanny Yule, representante del Consejo Regional Indígena del Cauca (Cric).

Las autoridades tienen claro que el problema no son las marchas indígenas. En cambio, sí lo son los grupos armados que, aprovechándose de las manifestaciones pacíficas de los cabildos, se mezclan y generan caos en las ciudades.

A menos de 36 días de las elecciones, con un país polarizado, que está saliendo de una pandemia por la covid-19 y que ha logrado avanzar en su economía, la prolongación de las marchas no sería un buen asunto para los colombianos.

Desde ya las movilizaciones de este 28 de abril agitan el debate electoral. “Grave error salir mañana”, dijo el senador Gustavo Bolívar, quien señaló al Centro Democrático de estar ambientando el aniversario del estallido social. “Seguro infiltran encapuchados para encender un nuevo estallido y tener pretexto de aplazar las elecciones”, añadió el líder del Pacto Histórico.

Por los lados de la derecha, las advertencias sobre lo que puede ocurrir este 28 de abril saltan a la vista. “Crece la amenaza de actos vandálicos por parte de la primera línea”, dijo la senadora María Fernanda Cabal.

“El Paro Nacional se traduce en violencia y permisividad para que el grupo de terrorismo urbano que llaman primera línea salga a destruir lo que les venga en gana. Ojo que eso se traduce en más inflación y carestía pues esos delincuentes cierran el suministro a ciudades y pueblos”, advirtió el candidato presidencial Enrique Gómez Martínez.