Versiones de la fuga de dos presos de La Picota

Las autoridades aún intentan enteder cómo fue que dos presos se fugaron de la cárcel de máxima seguridad de La Picota, en Bogotá. Alrededor de las 9 de la noche de este sábado, los guardias del centro penitencial se percataron de la ausencia de Jhon Gutiérrez Rincón y Olmedo Vargas, dos excombatientes de las Farc que estaban recluidos en el pabellón de Justicia y Paz.

Según el Inpec, Gutiérrez Rincón tiene encima una condena a 40 años por secuestro y concierto para delinquir. Vargas, por su parte, se desmovilizó de la guerrilla, pero el año pasado fue capturado por hurto.

La Policía Nacional emprendió la búsqueda de los prófugos, un trabajo que incluye el rastro de las vías de acceso de la ciudad, para evitar que huyan más lejos. En el Inpec, por su parte, intentan establecer las circuntancias que rodearon la fuga.

El Instituto, por ahora, informa que no han notado daño en la infraestructura del penal. La W Radio publicó un documento interno que daría pistas sobre otra posible forma de fuga. Se trata de un informe de novedad dirigido al coronel Germán Ricaurte, director de La Picota.

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En el documento, 4 guardias del penal dan el parte sobre lo ocurrido. Explican que uno de los dragoneantes a cargo de la seguridad del pabellón donde se presentó la fuga tenía aliento a licor, y que se negó a practicarse una prueba de alcoholemia.

Otros guardias que hablaron con La W aseguraron que el mismo dragoneante estuvo bebiendo con los reclusos y que supuestamente les permitió que salieran -no especifica a dónde- para que consiguieran más trago.

Por ahora, las autoridades trabajan en la recolección de elementos que permitan armar el rompecabezas del escape, mientras la Policía busca a los fugitivos con intensidad.