Gobierno condena declaraciones de Maduro: las llama desobligantes, irrespetuosas y calumniosas

Desde la Casa de Nariño el presidente Iván Duque ha seguido condenando la dictadora en Venezuela. Esto ha generado varios ataques verbales de Nicolás Maduro. Pero este miércoles sus palabras y acusaciones subieron aún más de tono, al punto en que en una comunicación oficial la Cancillería colombiana pidió respeto para el presidente Duque.

“(Duque tiene) carita de ángel y alma de diablo. Usted lo ve hablando y provoca hacerle así: ‘chuqui, chuqui, chuqui‘. Es un chuqui. Es increíble, en 90 días acumuló el 90 por ciento de repudio en las calles de Colombia”, dijo Maduro en una rueda de prensa a medios internacionales.

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Estas afirmaciones tienen un fondo: el envío de bombarderos rusos con capacidad de llevar armas nucleares a Venezuela. Duque lo asumió con una “provocación” y un acto “poco amistoso” para la región.

Maduro no demoró en contestarle. “Solamente Colombia tiene siete bases militares, para que salga el señor Duque a decir que esto es un acto inamistoso", aseguró. Acto seguido volvió a insistir en el supuesto complot que desde Colombia se estaría armando para derrocarlo e incluso asesinarlo: "inamistoso es preparar paramilitares en Colombia para atacar a Venezuela, para matar al presidente de Venezuela. Eso sí es inamistoso, Iván Duque, escúchame”.

En la ecuación también está involucrado Jair Bolsonaro, el presidente electo de Brasil. Según la teoría de Maduro, Bolsonaro y John Bolton –asesor de seguridad nacional de Estados Unidos- fraguaron un plan el pasado 29 de noviembre, en la reunión que sostuvieron en Rio de Janeiro.

"Nos ha llegado buena información (...), John Bolton desesperado asignando misiones (a Bolsonaro) para provocaciones militares en la frontera", dijo Maduro.

Ante las graves acusaciones, Duque aseguró que Colombia no está fraguando ningún acto hostil ni belicista. Y que contrario a lo que dice Maduro, deberían responder “quienes están ejerciendo la dictadura en contra de sus ciudadanos generando grandes flujos migratorios, son los que deben responder ante la justicia internacional por esos crímenes. Que no se acuda a ese tipo de prácticas que no son sino cortinas de humo”.

La Cancillería también se pronunció para rechazar de manera contundente las acusaciones de Maduro. “El ministerio condena en los términos más claros y contundentes las afirmaciones desobligantes, irrespetuosas y calumniosas de Nicolás Maduro sobre una imaginaria guerra que Colombia buscaría iniciar”, aseguraron por medio de un comunicado.

Las relaciones diplomáticas entre Colombia y Venezuela pasan por un momento delicado. Duque se negó a nombrar un embajador en Venezuela, la migración no para de crecer y el presidente Maduro insiste en el supuesto complot que existe para derrocarlo.

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