Gobierno Petro pidió a Estados Unidos que libere a Simón Trinidad. Quiere adelantarse a la era Trump

En una comunicación escrita, el embajador de Colombia en Estados Unidos, Daniel García Peña, le pidió a la administración de Joe Biden clemencia e indulto para Ricardo Palmera, alias Simón Trinidad, el comandante guerrillero de las Farc, que paga una pena de 60 años en el país del Norte.

La comunicación de García Peña, que fue revelada por Noticias Caracol, estaría dirigida al subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian Nichols, y estaría fechada el pasado 12 de noviembre. Paralelamente, el embajador colombiano habría enviado una petición al Departamento de Justicia de Estados Unidos, para que le autorice una visita personal a Simón Trinidad en la cárcel de Florence Colorado, donde se encuentra preso.

Es más, la idea sería que el encuentro sea en la semana del 25 de noviembre y el argumento que se usa para realizar la visita es que la libertad Trinidad, sería “relevante para la estabilidad regional”. Esto teniendo en cuenta que sería un acto asociado al proceso de paz total que el Gobierno Petro intenta desarrollar en el país.

La libertad de Trinidad también fue pedida recientemente por el líder del partido Comunes, Rodrigo Londoño, conocido como Timochenko. En medio de la conmemoración de los ocho años de la firma de los acuerdos de paz con las antiguas Farc, el excomandante guerrillero solicitó, sin sonrojarse y de manera directa, la libertad y respectiva repatriación de su excompañero en el Secretariado de las Farc.

“No se explica que a estas alturas haya un elevado número de firmantes en las cárceles y no se concibe la inoperancia de todas las ramas del poder para obtener la repatriación y libertad de Simón Trinidad, arbitrariamente detenido en los Estados Unidos”, expresó Rodrigo Londoño.

Frente a la era Trump

La solicitud del embajador colombiano ante la Casa Blanca se da a menos de dos meses del cambio de gobierno en Estados Unidos, a donde llegará de nuevo Donald Trump, de quien se espera una mano más dura con la izquierda, en especial con la más extrema, como la que representan los grupos guerrilleros. Esto explicaría en parte la urgencia de García Peña para poder visitar a Simón Trinidad, antes de que llegue el 20 de enero, cuando el magnate tomará posesión de su cargo.

Ricardo Palmera está condenado por el secuestro de los tres contratistas estadounidenses que fueron liberados durante la Operación Jaque, sobre él también pesa el crimen de la exministra de Cultura Consuelo Araujo Noguera, asesinada en 2001.

El partido Comunes, conformado por miembros de las antiguas Farc, ha sido insistente en pedir la libertad de Trinidad. De hecho, lanzaron una propuesta para Trump, pese a que en campaña apoyaron abiertamente a Kamala Harris. El senador Omar Restrepo, quien fue comandante de un frente de la extinta guerrilla en Chocó y en Antioquia, solicitó que se le permita a Trinidad venir al país para que se pueda presentar ante la JEP y les dé la verdad a las víctimas con a su participación en el conflicto colombiano. “Necesitamos a Simón Trinidad y este sería un gesto de Donald Trump como presidente”, dijo el congresista.

La petición de libertar no tendría mucho futuro, pues si las extintas Farc no lograron el cometido de sacar a Trinidad de la cárcel bajo el mandato de Barack Obama y con la ayuda de funcionarios del gobierno del entonces presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, mucho menos lo lograrían en el mandato de Trump.