Gobierno y disidencias de Farc negocian despeje de área para la liberación de funcionarios del CTI secuestrados en el Cauca

El ministro de la Defensa, Iván Velásquez, confirmó que se está conversando con las disidencias de las Farc de Iván Mordisco sobre un despeje de área para que se concrete la liberación de dos funcionarios del CTI que fueron secuestrados semanas atrás.

Dijo el ministro Velásquez que, en un principio, las disidencias exigieron el despeje de cinco municipio del Cauca para entregar a los funcionarios judiciales, propuesta que fue rechazada por el Gobierno. Los funcionarios secuestrados son: Bethy Amanda Mage Imbachi y Gerzón René Rivera Fernández.

“Recibimos inicialmente una petición del Estado Mayor Central de la Carlos Patiño pidiendo el despeje de cinco municipio para la liberación de los secuestrados, que estimamos es un área muy extensa si el propósito es efectivamente este que ellos manifiestan de tener seguridad en la liberación. Se indicó que debía ser un área restringida: la necesaria para que se liberara a los secuestrados con seguridad”, dijo el ministro Velásquez.

Y agregó: “Hicieron luego una propuesta de que fueran tres municipios, que es a lo que se refieren en el último comunicado y lo que nosotros hemos insistido es en que sea el área necesaria para liberar con seguridad a las personas secuestradas, estamos con una intermediación para que se logre definir si están ellos como lo afirman en la voluntad de liberar a los secuestrados en condiciones de seguridad y nosotros tenemos esa voluntad de que lleguemos finalmente a la determinación del área correspondiente para que se proceda en ese sentido”.

El secuestro de los funcionarios se dio el pasado 19 de abril, cuando la Fiscalía informó que “rechaza el secuestro de los servidores del CTI Bethy Amanda Mage Imbachi y Gerzón Rene Rivera Fernández, pide respeto por su vida e integridad física, y exige su liberación inmediata a las disidencias de las FARC Gaor Dagoberto Ramos”.

Por su parte, las disidencias de las Farc indicaron: “Con la guerra total anunciada por el presidente Petro y la ruptura del cese al fuego con las Farc–EP, es lo mínimo que podemos pedir. Pasan los días y no se obtiene respuesta del Gobierno nacional. La vida e integridad de los retenidos depende exclusivamente del Gobierno nacional. Con los actos humanitarios no se regatea”.

La situación en el Cauca cada vez es más compleja. En la región delinquen los grupos criminales más violentos de las disidencias de las Farc que se apartaron de los diálogos de paz que se adelantan con el Gobierno nacional. Recientemente, fueron asesinados seis militares en dos acciones criminales de las facciones Carlos Patiño y Dagoberto Ramos.

Las acciones de las disidencias se están dando, según las Fuerzas Militares, en retaliación a las operaciones ofensivas que han ejecutado en las últimas semanas, como el ataque del Ejército donde murieron 15 integrantes de las disidencias que se encontraban en un campamento ilegal.

El departamento del Cauca hace parte de las regiones donde el Gobierno optó por levantar el cese al fuego con las disidencias, como ocurrió en Valle del Cauca y Nariño.