“Gracias a Dios, a todo el pueblo barranquero y a toda Colombia por este gran apoyo”, primeras palabras de Luis Manuel ‘el Mane’ Díaz

Don Luis Manuel ‘el Mane’ Díaz se reencontró con su familia. Un emocionante encuentro que pone fin a una tragedia, al del secuestro a manos del ELN y en el que se convirtió en víctima de la mentira del grupo criminal en su supuesta propuesta de paz con el Gobierno Nacional. Al llegar a su municipio, el padre del futbolista Lucho Díaz, agradeció a Dios a sus coterráneos por el apoyo.

“Primero darle gracias a Dios, a todo el pueblo barranquero y a toda Colombia por este gran apoyo… Los quiero mucho y pronto tendré la oportunidad de saludarlos y darles abrazos”, dijo Mane Díaz.

Hace apenas unas horas el papá de Lucho Díaz recorría los montes en la Sierra del Perijá, en poder de la banda del ELN, secuestrado, bajo amenaza y como trofeo de los criminales. Ahora está al lado de su familia, de los vecinos y sus amigos. Los barranqueros que lo apodaron “Mane” y que lo esperaban desde el primer día que fue secuestrado.

El operativo para su rescate arrancó en la mañana de este jueves y en un nuevo intento por conseguir que el ELN se tomara en serio el sufrimiento de la familia de Mane y dejaran de burlarse del país, del Gobierno y de las víctimas. Paradójico cuando se entiende que el ELN supuestamente hace parte de una mesa de paz. Las evidencias indican un escenario distinto.

De hecho, en el marco del proceso de liberación, el fiscal Francisco Barbosa advirtió que la dinámica de anunciar e incumplir, que asumió el ELN durante el secuestro de ‘Mane’ Díaz, era un “juego” para el grupo criminal, como también resultaron los constantes ataques a la Fuerza Pública, la población civil y las instituciones. Se burlaron del país y de la familia del futbolista, dijo el fiscal.

“Está la institucionalidad que la Fiscalía, a la que le repugna ver cómo los delincuentes juegan al tiro el blanco con nuestros soldados y policías en el Catatumbo o cómo esta semana fueron arrastrados como animales nuestros soldados en El Plateado, Cauca, por parte de las disidencias de Iván Mordisco”, dijo el fiscal general.

Con megáfono en mano, Luis Díaz agradeció a Dios, su familia y todos los que estuvieron pendientes de su liberación, de acompañar a su esposa en tan difícil momento, mientras se convirtió en mercancía de cambio para el ELN, un ser humano que los delincuentes esperaban canjear, pero seguramente desistieron al entender de quién se trataba.

“Mane, Mane, Mane, Mane…” gritaban sus vecinos una vez Luis Díaz apareció en el municipio, en libertad y antes de llegar a la casa de sus padres, que desde el 28 de octubre estaban inmersos en una tragedia.

La entrega se dio luego de 12 días de espera, mientras estuvo cautivo en las selvas de La Guajira, en la Serranía del Perijá. El operativo se realizó con apoyo de Naciones Unidas, que fue delegada justamente porque es el organismo que está como garante en la negociación de paz con la guerrilla del ELN, que realizó el secuestro.

Con la voz entrecortada Mane reiteró su agradecimiento, la felicidad de estar nuevamente en su casa y con su familia. Aseguró, rodeado de las autoridades, como la Policía, el Ejército y el Cuerpo Técnico de Investigaciones, que tendrá, más adelante, la oportunidad de darle un abrazo a todas las personas que estuvieron apoyándolo.

“Primero darle gracias a dios, a todo el pueblo barranquero y a toda Colombia por este gran apoyo… Los quiero mucho y pronto tendré la oportunidad de saludarlos y darles un albarazos”, dijo Mane Díaz.

La fiesta en Barrancas tras su liberación está cantada. Todos sus vecinos estaban atentos a su llegada para conocer los detalles del secuestro, los mismos que serán utilizados por la Fiscalía para avanzar en la investigación que el fiscal Francisco Barbosa, aseguró tendrá resultados.