NACIÓN

Grave denuncia de maltrato contra la mujer en Bogotá: graban a líder indígena golpeando a su esposa. Alcalde Galán se pronunció

El hombre ya fue identificado y las autoridades se encuentran en las investigaciones para dar con el paradero de este presunto agresor y realizar su respectiva judicialización.

Redacción Nación
24 de agosto de 2024
El caso de intolerancia y violencia intrafamiliar se vivió en un barrio de Bogotá
(Imagen de referencia)- | Foto: Getty Images / Yaowarat Boonyarattaphan / EyeEm

En Bogotá, se hizo pública en las últimas horas una grave denuncia de maltrato contra la mujer que involucra a Saul Arias Sintua, un destacado líder indígena en la Unidad de Protección Integral (UPI) La Rioja. Recientemente, se difundió un video en el que, aparentemente, Arias Sintua aparece golpeando de manera reiterada a su esposa, Amparo Bateza, en presencia de sus hijos.

El video mantiene conmocionado a la comunidad y ha generado una fuerte reacción por parte de organizaciones y defensores de los derechos humanos. Por su parte, Diana Diago, concejal de Bogotá denunció esta acción en sus redes sociales.

“¡Indignante! Como es posible que esto pase en Bogotá, en un centro del Distrito, golpes, maltratos contra una mujer por parte de un líder indígena y no pase nada”, dijo la concejal.

Este caso provocó una serie de llamados a las autoridades para que tomen medidas inmediatas y efectivas para proteger a las víctimas y asegurar que los responsables de tales actos enfrenten las consecuencias legales correspondientes.

La Corte Suprema de Justicia determinó que las mujeres que sufrieron de maltrato y abandonaron a sus esposos, esto no altera el requisito de convivencia. Foto: Getty images (imagen de referencia).
Foto: Getty images (imagen de referencia). | Foto: Foto: Getty images (imagen de referencia).

Ante esto, Gustavo Quintero Ardila, secretario de Gobierno, dio a conocer que este hecho sucedió el pasado 17 de agosto, y según fue grabado por familiares de la víctima:

Ya tenemos rutas activas y estamos preparando la denuncia correspondiente. Necesitamos que las investigaciones den resultado pronto y que este señor reciba el castigo que merece. Por esta razón el retorno es vital, la situación de los Embera en la ciudad no da más espera. Seguiremos trabajando sin descanso para que este tipo de situaciones no sigan sucediendo”, dijo el funcionario.

Las imágenes destacan la necesidad de una respuesta contundente y un compromiso renovado para combatir la violencia de género en todas sus formas. La situación ha puesto de relieve la urgencia de abordar y erradicar la violencia doméstica, independientemente del estatus social o el rol de la persona involucrada.

Cúcuta registró el mayor número de víctimas de violencias basadas en género con el 68,4%, según el Observatorio de Asuntos de Género.
(Imagen de referencia). | Foto: Archivo Semana

“El abuso y el maltrato contra una mujer es una agresión contra todos los bogotanos. Seguiremos haciendo lo necesario para que se respeten los derechos de las mujeres y los niños de la comunidad Emberá en la ciudad, pero le hacemos un nuevo llamado al Gobierno Nacional a acelerar el proceso de retorno de los indígenas a sus territorios”, detalló el mandatario.

Lo cierto es que, en la actualidad se observa un preocupante incremento en los delitos de violencia contra la mujer en diversas partes del mundo. Este fenómeno ha sido objeto de estudio y preocupación por parte de organismos internacionales, gobiernos y organizaciones no gubernamentales.

De acuerdo con el informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente 1 de cada 3 mujeres en el mundo ha experimentado violencia física o sexual en algún momento de su vida. Esta cifra destaca la magnitud del problema a nivel global y refleja un aumento en la prevalencia de la violencia de género en los últimos años.

El incremento en los delitos de violencia contra la mujer refleja una crisis que requiere una acción concertada y multifacética a nivel global y local. La implementación efectiva de políticas, la educación pública y el apoyo a las víctimas son esenciales para combatir esta forma de violencia y promover una sociedad más segura e igualitaria.