Sergio Fajardo y Gustavo Petro
Sergio Fajardo y Gustavo Petro | Foto: REVISTA SEMANA

Nación

Gustavo Petro se solidariza con Fajardo y rechaza el acto de violencia en su contra

Una oleada de comentarios y mensajes de apoyo se han evidenciado en las últimas horas hacia el precandidato Sergio Fajardo, víctima de un sabotaje político en su visita a la UTP.

18 de febrero de 2022

El pasado jueves 17 de febrero, el precandidato presidencial Sergio Fajardo sufrió un acto de violencia por parte de unos encapuchados en la Universidad Tecnológica de Pereira (UTP). Mientras daba una charla sobre su campaña electoral sufrió un hecho de sabotaje político cuando fue sorprendido por la explosión de una papa bomba.

El hecho generó repudio, tal como expresaron algunos aspirantes a la Presidencia. Uno de ellos fue el precandidato por el Pacto Histórico, Gustavo Petro, quien en su cuenta de Twitter rechazó tajantemente el acto violento.

“Mi más absoluto rechazo al acto de violencia ejercido contra Sergio Fajardo. La universidad debe estar abierta a todas las formas de pensamiento, lo contrario solo ayuda a establecer tiranías”, escribió Petro.

Sobre el hecho otros precandidatos también han manifestado su inconformidad. “Sacar a la fuerza a Sergio Fajardo de la UTP es la típica matonería de algunos que se reclaman demócratas y anti-fascistas”, dijo por medio de Twitter Enrique Peñalosa, precandidato por la coalición Equipo por Colombia.

Quienes también se pronunciaron de Equipo por Colombia fueron los precandidatos Federico Gutiérrez y David Barguil.

¿Quién creen ustedes que es el candidato de estos encapuchados? Hablan de paz y son los más violentos. Hablan de legalidad y están llenos de ilegales. Así pretenden gobernar el país, combinando todas las formas de lucha. A Sergio, toda mi solidaridad. Absoluto rechazo a esto”, opinó Gutiérrez en la citada red social.

Entre tanto, David Barguil señaló: “Toda mi solidaridad con @Sergio_fajardo por las acciones violentas con las que encapuchados le impidieron hacer campaña en la UTP. No podemos permitir que sigan sembrando odio y violencia en nuestros jóvenes. No podemos permitir que destruyan al país”.

Los compañeros de Sergio Fajardo en la coalición Centro Esperanza también le mostraron su apoyo tras lo ocurrido este jueves en la tarde.

Aseguró que este tipo de incidentes no lo detendrá en su camino para aspirar a la Presidencia y aseveró que buscará un nuevo espacio para encontrarse con los estudiantes de la universidad mencionada.

Sergio Fajardo concluyó destacando que su lucha para garantizar una mejor educación en el país sigue en pie y que esta es y será apuesta para una revolución y transformación social.

Los hechos

Ocurrieron cuando el antioqueño visitaba la Universidad Tecnológica de Pereira a las 3:00 de la tarde, en cumplimiento de una charla donde discutiría sobre su campaña electoral y la situación del país con un grueso de jóvenes que lo invitaron desde días atrás.

El precandidato presidencial arribó acompañado de siete de sus más cercanos colaboradores cuando fue sorprendido por la explosión de una papa bomba que estalló a escasos metros de donde él avanzaba en su recorrido. Los momentos fueron de pánico, pero él mantuvo la calma.

De inmediato, el aspirante paisa detuvo su marcha y fue sorprendido por un grupo de cuatro hombres que vestían de negro y lucían pasamontañas, que le exigieron se retirara de la institución universitaria.

Fajardo, quien estaba en una vía interna que comunica el Jardín Botánico de la universidad con el área administrativa, se quitó su tapabocas e intentó dialogar y manejar el asunto por su experiencia como académico universitario. Sin embargo, los encapuchados le pidieron que se callara y se retirara con urgencia.

El candidato, junto con su equipo de trabajo, no tuvo otra alternativa que salir de la institución, mientras los hombres lo acompañaron hasta el lugar de ingreso.

Algunos de los acompañantes de Fajardo le contaron a SEMANA que los momentos fueron de tensión y, preliminarmente, no lo ven como un atentado, sino como un hecho de intimidación política.