¿Habrá pico y placa para motos en Bogotá? Alcaldía aclara dudas

La motocicleta es uno de los medios de transporte más utilizados por los colombianos. Según cifras del Registro Nacional de Tránsito (Runt), en el país están rodando diez millones de motos y en Bogotá se estima que circula un millón de estos vehículos.

En el caso de la capital del país, las motos han sido de gran ayuda para sortear el complejo tráfico que se ha vuelto parte de la cotidianidad capitalina. Esto, sumado a su bajo precio y a la facilidad con que las marcas entregan uno de estos vehículos a cualquier interesado, incrementa su éxito comercial.

También se ha convertido en una oportunidad para generar recursos por medio de aplicaciones para entregar domicilios o de transporte de pasajeros; se debe tener claro, sin embargo, que este último tipo de trabajo aún no ha sido reglamentado por el Estado, por lo cual está prohibido.

Además, el hecho de que estos automotores no tengan una medida como el pico y placa para autos aumenta su atractivo.

Pero, en las últimas horas, ha circulado el rumor de que la Alcaldía de Bogotá ultima detalles para poner en marcha el pico y placa para las motos que circulen en la ciudad. Esto ha generado manifestaciones de inconformismo por parte de motociclistas, que dan como un hecho la implementación de la medida.

Ante ello, el secretario de movilidad de Bogotá, Felipe Ramírez, aclaró por medio de las redes sociales de la secretaría que en la capital no rige la medida de pico y placa para motos y, adicionalmente, no hay en curso ningún proyecto de modificación normativa para establecer la restricción.

“Ante los rumores alrededor de un pico y placa para las motos, debo desmentir esta noticia contundentemente, toda vez desde que la secretaría de movilidad no hemos contemplado poner pico y placa para las motos”, señaló Ramírez.

También aseguró que desde esa secretaría se continúa trabajando para mejorar las condiciones de movilidad de los bogotanos, incluyendo las motocicletas.

“Seguiremos trabajando para que todos los modos de transporte tengan la mejor oportunidad de movilizarse en la ciudad, ayudando con la movilidad sostenible y compartida para todos los bogotanos”, añadió el secretario.

A pesar de la aclaración, el inconformismo de los usuarios de las motos con el distrito tiene otro capítulo, que está en desarrollo.

Debido a los altos índices de inseguridad que presenta la ciudad y cuyos casos involucran a delincuentes que se transportan en motocicleta, la administración distrital, en cabeza de la alcaldesa Claudia López, tomó la decisión de implementar la prohibición del parrillero hombre los días jueves, viernes y sábado, desde las 7:00 p. m. y hasta las 4:00 a. m.

Este tipo de medidas tiene molestos a los líderes moteros, ya que argumentan que afecta el libre uso del vehículo por parte de los motociclistas ‘de bien’ y que por el comportamiento de pocos no se puede afectar a los demás.

No obstante, un informe entregado por la veeduría distrital revela que en el comportamiento general de los delitos de alto impacto hubo una disminución del 11 % de delitos cometidos en la ciudad entre el periodo enero-mayo de 2022, en comparación con el mismo periodo de 2021.

No obstante, la veeduría observó que, a pesar de que hubo una disminución general de los delitos entre esos meses, la participación de los móviles agresores (a pie, motocicleta, bus, bicicleta, vehículo, taxi) en la comisión de los delitos sigue estando acorde con la tendencia previa a la medida. Es decir, para la entidad no hay variaciones significativas de disminución del porcentaje de delitos cometidos en motocicleta.

El principal móvil agresor utilizado para cometer estos delitos es “a pie” con 82,3 % de participación, siguiendo una tendencia que se ha mantenido estable durante los últimos cuatro años. La “motocicleta”, con una participación de 7,6 %, representa el segundo móvil agresor más empleado y, aunque desde 2021 se presenta una tendencia a la baja en dicha participación, su comportamiento es lineal y constante.

Esta medida del parrillero hombre en Bogotá está en constante monitoreo y no se descarta que iniciando el 2023 sea levantada por las autoridades.