CARRUSEL

Héctor Zambrano pagará 13 años de cárcel

El exsecretario de Salud de Bogotá fue sentenciado por irregularidades en un contrato de ambulancias.

1 de agosto de 2014
A Zambrano se le consideró el funcionario estrella de las administraciones de Luis Eduardo Garzón y Samuel Moreno. | Foto: Daniel Reina

La condena disciplinaria de la Procuraduría conocida hace dos semanas en contra del exsecretario de Salud de Bogotá, Héctor Zambrano, en donde se destituido e inhabilitado por 16 años para ejercer cargos públicos, fue el augurio de la sentencia que este viernes recibió por parte de una juez de conocimiento de Bogotá a 13 años de cárcel.

En su determinación, la juez señaló que “Zambrano fue acusado y aceptó los hechos, lo que dan cuenta de su autoría”. A lo que añadió la funcionaria que “esos dineros estaban destinados a la inversión pública por lo que se vulneraron los derechos a la salud de la sociedad”.

Zambrano pagará la condena en la cárcel La Picota, a donde fue enviado desde marzo del 2013, luego que un juez de garantías estimó que debía permanecer en prisión mientras transcurría su proceso. En esa misma prisión están recluidos otros de los involucrados en el escándalo. Es el caso de la Nule y Emilio Tapia.

Siete meses le duró la intención al exsecretario de Salud de Bogotá, luego de la imputación de cargos, la intención de seguir diciendo que era inocente. En octubre de 2013 tras negociar con la Fiscalía aceptó ante la juez 16 penal del circuito con funciones de conocimiento que hizo parte del ‘carrusel de los contratos’ en la capital del país. Luego se declaró culpable por los delitos de cohecho propio, interés indebido en la celebración de contratos y contratos sin cumplimiento de requisitos legales.

Con su determinación, Zambrano logró que este viernes al conocer la condena se le entregara una reducción de la pena. Además, el exsecretario se evitó el defenderse en un juicio en el que seguramente la Fiscalía los habría vencido con el acervo probatorio que tenía en su contra.

Zambrano consiguió un principio de oportunidad con la Fiscalía por el delito de peculado por apropiación a favor de terceros. El beneficio frena la acción penal por esa conducta durante un año, a cambio de que el exfuncionario colabore con la justicia como testigo contra otros implicados en el escándalo y entregue pruebas que conozca frente a más hechos de corrupción.

Según el fiscal delegado ante la Corte Suprema de Justicia, Juan Vicente Valbuena -encargado de la investigación-, el exfuncionario distrital, Emilio Tapia y Julio Gómez confirmaron el presunto actuar irregular de Zambrano y la relación con diferentes personas involucradas con el ‘carrusel’.

De acuerdo con Valbuena, Tapia contó pormenores de la entrega de dádivas para facilitar la adjudicación del contrato 1229 del 2009, cuyo objeto era la prestación del servicio de ambulancias. Este tuvo un costo de 67.000 millones de pesos.

Valbuena aseguró que “evidentemente existió una entrega de dinero correspondiente al 9 % del valor del contrato al exsecretario Héctor Zambrano, al exconcejal Hipólito Moreno (ya condenado) y al propio intermediario, Emilio Tapia”.

La Fiscalía añadió que Zambrano hizo acuerdos con el exalcalde Samuel Moreno, su hermano Iván Moreno, Emilio Tapia y Julio Gómez, a cambio de que les adjudicaran el contrato de las ambulancias, puesto que los cargos muchas veces se convierten en una “mafia”.

Según el ente acusador, el exfuncionario se encargaba desde su cargo de contratar para el servicio de salud pública la red de ambulancias de Bogotá con cargo al presupuesto de esa secretaría.

“Se encargaba de garantizar que el adjudicatario del contrato fuera la empresa que dijeran Emilio Tapia e Hipólito Moreno, es importante destacar que Zambrano era de la absoluta confianza de Julio Gómez y quien presentó a Zambrano con Tapia es Julio Gómez”, aseguró el fiscal.

Tras el escándalo Zambrano terminó con una brillante carrera que durante más de 20 años desempeñó en el área pública.